MAGAÑA, en este vocablo del diccionario se han confundido dos palabras diferentes: magaña ‘defecto de fundición en el arma de un cañón de artillería’, tomado del it. magagna ‘defecto’, derivado de magagnare ‘echar a perder’ (hermano del fr. ant. mahaignier y cat. maganyar, quizá de origen germánico); y el cast. ant. madagaña, magadaña, ‘espantajo’, ‘fantoche’, ‘armadijo’, cat. dial. madoganya, de procedencia oscura: quizá estas últimas formas son hermanas del cat. dial. marfana, marfanta, ‘fantasma’, ‘mujer mala’, gnía. maraña, port. marafona y magaña ‘prostituta’, y vienen del ár. márȐa ȟánā ‘mujer de burdel’.
1.ª doc.: l.r vocablo, 1708, Tosca (Aut.); 2.º vocablo, magadaña o madagaña, J. Ruiz.
Aut. registra sólo la ac. artillera, pero en Acad. 1843 se halla ya una segunda ac. ‘engaño, astucia, ardid’, de la cual parece ser responsable Ramón Cabrera († 1833), quien en su póstumo Dicc. de Etimologías reunía el magadaña del Arcipreste con un magaña a malaña2 anticuado que significaría «engañifa, añagaza, artimaña para engañar, como la figura que se pone para espantajo de los pájaros»; sin embargo, este significado es propio del magadaña del Arcipreste, mientras que de magaña no hay testimonios seguros sino en el significado artillero3. Juan Ruiz emplea el vocablo en dos pasajes: «muchos creen que guarda el viñadero el paso, / e es la magadaña que está en el cadahalso» (1442d), donde se trata de un refrán bien conocido que alude al espantapájaros montado sobre un armazón de tablas (cada(h)also). Así en el ms. S: T escribe magdagaña enmendado en magadaña, y G madagana. En otro pasaje, donde sólo disponemos de S, se lee, hablando del mensajero que le robó su amada, Cruz: «ca ante nin después non fallé en España / quien ansy me feziese de escarnio magadaña» (122d): magadaña de escarnio será ‘espantajo o figurón de escarnio’, quizá refiriéndose a una pandorga o estafermo víctima de los golpes de todos los caballeros. Aunque palabra más bien rara, siguió empleándose hasta mucho más tarde, pues el aragonés H. de Luna, continuador del Lazarillo, escribe h. 1620; «la vieja y la hermana, que vieron tan rendidos a los dos Roldanes, se llegaron a ellos y los desarmaron...; como vi que aquellas madagañas no eran lo que parecían, me animé y acometí a ellos» (Rivad. III, 122), «las sandalias me podían servir de cormas porque no tenían suelas... con esta figurilla fuí a ver a mi amo, que me había enviado a llamar, el cual espantado de ver aquella madagaña, le dió tal risa que... me preguntó la causa de mi disfraz» (ibid., p. 113): seguimos, pues, con la ac. ‘figurón, fantoche, espantajo’. En el Tratado de las Colmenas del aragonés Jaime Gil (1621) malagaña es ‘armadijo formado sobre cuatro horquillas para que en él paren los enjambres’, V. el texto en la edición de J. Ruiz por Cejador.
El vocablo sigue empleándose hoy en el centro y Norte de Cataluña: madoganya en Andorra, maduganya en Castellbò, madugany en la Seo de Urgel y en Puigcerdá, significa ‘espantapájaros’ (ALC, mapa 188; Griera, Tresor, s. v.); cerca del Talladell (Segarra) existe un vértice de triangulación Maduanya (según el mapa del Inst. Geogr. y Catastral, a 1:50000, hoja de Cervera); maganya de secà aparece como insulto en un texto de Castellón de la Plana por J. Barberà (Bol. de la Soc. Castellón, de Cult. XXIV, 185), y vendrá de madaganya, en este dialecto que pierde las d intervocálicas4.
Está claro, por la sílaba -da-, que este vocablo no es idéntico al cat. maganya ‘defecto’, it. magagna íd., aludidos arriba. En cambio, por lo menos en lo semántico, parece haber relación con el grupo de vocablos siguientes: cat. dial. (¿Maestrazgo?) marfana ‘mujer necia’ («ximpla»), Tortosa marfanta ‘mujer mala, mujer cualquiera, mujerzuela’, ‘mujerona alta y gruesa’, ‘fantasma, el que se disfraza de aparecido con el objeto de espantar a la gente’ (BDC III, 102; Griera, Tresor; Ag.), port. marafona ‘prostituta’, gnía. maraña íd. [1609, J. Hidalgo], port. magana íd. [1715, Bluteau]5, de donde magano ‘impúdico, lascivo’, ‘hombre bajo, que hace acciones indignas’, ‘malo, malicioso, bellaco’ (Bluateau), «mariola, homem vil» (Moraes), magana ‘tocata, música antigua’ [1538, Jorge Ferreira]. Según indiqué en BDC XXIV, 26-27, no hay dificultad alguna en derivar el port. marafona y el cat. marfana del ár. márȐa ȟánā ‘mujer de burdel’ (márȐa ‘mujer’ es palabra generalmente conocida, y ȟánā ‘burdel’, ‘coito ilícito’, ‘deshonestidad’, se halla en el hispano R. Martí y en muchas fuentes vulgares). El paso de ȟa a fo en portugués está en regla fonéticamente (Steiger, Contrib., 311, n. 1), y la pérdida de una a átona tras r es también corriente en catalán moderno; en cuanto al cambio de marfama en marfanta, se debe a cruce con farfanta ‘bribona’ (para cuyo origen V. FARFANTE); también es probable que gnía. maraña resulte de *marahana, -aña; de ‘prostituta, mujerzuela’ se pasa fácilmente a ‘mujer de mala figura’ y ‘espantajo’. En cuanto a madagaña, el cambio de Ȟ en g no ofrecería dificultad, pues es bastante usual, pero ya es más sorprendente la sustitución de -r- por -d-, aunque sería natural la forma arag. malagaña, pues esta l (< r) es muy corriente en los arabismos; sin embargo, pudo haber una contaminación, y no olvidemos que el paso inverso de una -d- arábiga a -r- romance es un hecho conocido (p. ej. en JOROBA o en BERENJENA, y V. más ejs. en BDC XXIV, 37), que pudo dar lugar a ultracorrecciones6. Para el and. y santand. magaña = LEGAÑA, V. este último artículo7.
1 Maganyar es palabra bien viva en muchas hablas catalanas, y maganya ‘defecto oculto’ ya se encuentra allí en la Edad Media (Consulado de Mar, cap. 332); sin embargo, tratándose de un término técnico militar de aparición tardía, el cast. magaña debe ser italianismo y no catalanismo.― ↩
2 Éste debe de ser errata del diccionario de Cabrera (cuya impresión no pudo vigilar el autor) en vez de malagaña, que es la forma que se halla en el texto de Jaime Gil citado por Cabrera a continuación.― ↩
3 Claro que es posible que magadaña pasara vulgarmente a mag(a)aña al debilitarse las d intervocálicas; pero no consta que así sucediera en castellano.― ↩
4 Quizá tenga el mismo origen maganya como nombre de pájaro, que leo en una nota manuscrita del Sr. Porcar, de Castellón de la Plana. Dudo que sea el ár. muġánniya ‘cantadora’ (Dozy, Suppl. II, 230).― ↩
5 Empleado en Serpa (junto al Guadiana), según Fig.; en portugués general valdría ‘mujer jovial y desenvuelta’.― ↩
6 La sustitución de -ana por -aña se halla en otros arabismos (vid. HAZAÑA), y en general es alternancia frecuente en castellano (V. ejs. en dicho artículo).― ↩
7 Es probable que la familia de nuestro madagaña haya sufrido contaminación con la familia de MANGANILLA (véase). Parece asegurado si tenemos en cuenta que en el pasaje de la Gr. Conq. de Ultr. que cita el DHist. la forma almagaña de la ed. de 1503 sustituye, según creo, al manganilla de la ed. Rivadeneyra. En rigor cabría pensar en una anaptixis *managaniella, -ñella, de donde el derivado regresivo y disimilado madagaña o malagaña. Pero dudo de que sea esto, sobre todo no creo que sea el origen único, pues una anaptixis tras nasal es fenómeno inusitado. ↩