ENRIZAR, ‘azuzar, incitar’, ant., origen incierto, probablemente alteración de ERIZAR: primero se diría erizarse (un animal) ‘enfierecerse’, de donde luego erizarlo.
1.ª doc.: 1241, Fuero Juzgo; 1251, Calila.
Lo más probable, como ya anotó Allen en su ed. de Calila, es que nuestro vocablo sea alteración de erizar (quizá por influjo del sinónimo enridar), puesto que la misma palabra se redujo en otro sentido a RIZAR, junto al cual hay también la variante enrizar; efectivamente, ariçar en portugués se empleó con el sentido de «instigo, incito» (así en glos. del S. XIV, RPhCal. VI, 87, § 1525). De enrizarse ‘erizarse (un animal)’, ‘enfierecerse’ se sacaría el transitivo enrizar ‘azuzar’. Hay otras etimologías posibles, pero menos convincentes. La convivencia con el sinónimo enridar, cuya etimología էRRզTARE es evidente (vid. IRRITAR), sugiere que enrizar sea una variante de este vocablo. Podría suponerse una base derivada *էRRզTIARE, formada según la analogía de los casos que cito en RPhCal. I, 38, y aquí s. v. BOSTEZAR. Pero teniendo en cuenta la frecuencia del cruce de sinónimos en las expresiones para ‘azuzar’ (para lo cual disponía el idioma de muchas voces equivalentes), sería preferible suponer que enrizar sea enridar alterado por el influjo de azuzar o quizá de la variante de enguizgar (vid. GUIZQUE) que vemos en el santand. inguisar (Alcalde del Río), en el cat. aquissar o atissar y en la familia galorrománica del bearn. enguissà, langued. y prov. aquissà, prov. atissà, fr. ant. enticier (> ingl. entice), vid. FEW II, 711a.
Aun nuestro vocablo mismo sufrió cruces parecidos, pues es bastante claro que el ast. encerrizar ‘enardecer’ (V), ‘encarnizar, animar a la pelea’ (R), ‘azuzar, irritar, estimular, encorajar’, and., murc., albac. encerrizarse ‘empeñarse tenaz y ciegamente en algo’ (Acad., después de 1899; A. Venceslada), se debe a una combinación de enrizar con encender en el sentido de ‘excitar’ (ya en Alex., 1101c)1; por otra parte el ast. engarridar ‘azuzar, envalentonar’ (< *enguerridar < *enguirridar) puede ser enguizgar sumado a enridar2. Como en gallego existe un encirrar (Vall.), por metátesis, encerrizar también puede ser combinación de encirrar con enrizar.
Nuestro vocablo era ya arcaísmo en el Siglo de Oro, pues Covarrubias sólo registra enrizar «irritar», «en lengua antigua» (de aquí Oudin: «enrizar, mot antique qui signifie inciter, irriter, provoquer, en la ed. de 1616, pero no en la de 1607); sin embargo lo emplea todavía alguna vez Lope3: «Las abes, antes que el sol, / o sus rayos las enrrizen, / Pedro Carbonero ―dicen― / el cordobés español» (Pedro Carbonero, v. 1598), donde parece significar ‘incitar al canto o a la alegría’4.
1 También se puede pensar en incitar, pero éste es vocablo más moderno y menos popular. Y también pudo contribuir enzurizar.― ↩
2 Es imposible fonéticamente la relación con RէXA ‘pelea’ en que pensaba Gayangos (glosario de su ed. de Calila). Tampoco es posible relacionar con el alem. reizen ‘excitar, irritar’ y su familia germánica (a. alem. ant. reizzen, etc.), pues la forma gótica correspondiente, *wraitjan, no podía dar enrizar. Otra posibilidad sería derivar del anticuado riza ‘estrago, destrozo’, del cual procederán seguramente arriça «abomination» y desrriçar ‘destruir, devorar’ (en el Pentateuco del S. XIV: HR X, 39, 41), pero ni la explicación semántica a base de ‘invitar al estrago’ me parece verosímil, ni coincide la calidad sonora de la z antigua de enrizar con la sorda de esta otra palabra (bien atestiguada por el Pentateuco, por la grafia de la Celestina, XVIII, Cl. C. II, 168.23, y por la pronunciación actual de Malpartida de Plasencia: Espinosa, Arc. Dial., 51). He aquí algunos testimonios de este vocablo: «comienzo a esgrimir mi espada... y... en un pequeño rato hice tal riza dellos, dando a diestro y a siniestro, que tomaron por partido apartarse de mí algún tanto», continuador anónimo del Lazarillo en 1555 (Rivad. III, 92), «¡Bravo toro es éste! / veisle, en el arena escarba; / él hará más de una riza, / no se dormirá en las pajas» Lope (Los Vargas de Castilla, ed. Acad. X, 294), «grande es el daño, grande la perdición, grande la riza que el demonio hace en la juventud» Alfarache de Martí (Rivad. III, 418; otro, p. 408). Hoy en Malpartida de Plasencia vale ‘destrozo o estrago (de la comida que cae al suelo, de objetos desparramados)’ (Espinosa), salm. derriza, -rricia, ‘destrozo, matanza (de los lobos en las ovejas, etc.)’ (Lam.), Cespedosa ricia ‘riza’, riciar ‘esparcir alguna cosa’ (RFE XV, 139), Aut. riza «el residuo que queda del alcacer cerca de la raíz, después de cortado», «lo que dexan en los pesebres las bestias caballares por estar duro», ricial «se aplica a la tierra, en que, después de cortado el pan en verde, vuelve a nacer o retoñar algún otro», arag. ricio «campo sembrado, con sólo las espigas que en él quedaron, ya porque cayeron desgranadas, ya porque no se cosecharon» (Borao). No conozco ejs. anteriores al de la Celestina: «si mi espada dixesse lo que haze... ¿Quién destroça la malla muy fina? ¿Quién haze riça de los broqueles de Barcelona? ¿Quién revana los capacetes de Calatayud, sino ella?». El uso se parece tanto al de hacer trizas que me parece probable suponer se trata de una alteración de este vocablo, en virtud de una etimología popular que lo relacionó secundariamente con el antiguo enrizar: así riça habría conservado la calidad sorda de la africada de triça, y aunque es verdad que ignoramos si este vocablo tenía primitivamente ç o z, no hay razón para dudar de que se apartara en este punto del port. destrinçar y del oc. trissar.― ↩
3 No es improbable la opinión de Cejador de que en J. Ruiz, 75d, «el ffuego sienpre quiere estar en la ceniza, / como quier que mas arde quanto mas se atiza; / el omne quando peca, bien vee que desliza, / ma non se parte ende, ca natura lo entiza», deba corregirse entiza en enriza, puesto que en esta copla sólo disponemos del ms. S y no se conocen ejs. españoles de un verbo correspondiente al fr. ant enticier, ingl. entice. En realidad esto es indudable, V. el facs. de este folio del ms. S en la propia ed. de Ducamin: es una r clara; lo propio hay que suponer del entizar de la Gral. Est. citado por Mtz. López, Bol. Fil. Univ. de Chile.― ↩
4 Pero también podría tratarse de un significado más próximo al que hallamos documentado en gallegoportugués: arriçar ‘adquirir fuerza y vigor’, en García de Guillade (vv. 979, 985). Nobiling agrega en su edición: «Arriçar = dar vigor a, instigar, Vat. 994.8; arrizado = vigoroso, robusto, Vat., 980.3; Col.-Br., 383.14; 439.3 e 15; CM 31.6, 88.5, 205.4, 312.2; riçado = robusto, Canc. Gall. de Lang, v. 422; hoje segundo CortesƟo arriçar-se, popular, ‘arrastar a asa a alguem, namorar, galantear’»; además cavaleiros ardidos et arrizados ‘briosos, gallardos, robustos’ en las Cantigas de S. M., 215, y gall. mod. arrichado ‘atrevido, arriscado’ (RH LVII, 569). Deberán estudiarse cuidadosamente los ejs. citados por Nobiling, y decidir entre las dos traducciones ‘instigar’ y ‘dar vigor’ que propone alternativamente, antes de poder decidir si este arriçar gallegoportugués tiene que ver con el cast. enrizar, lo cual desde el punto de vista semántico no es imposible, pero tampoco está claro. En la composición 1002.25 del Canc. de la Vaticana, debida al portugués Gonçalo Eanes do Vinhal (h. 1270) «pôs-mi o gran can enriçado, / que nunc’a morder fez fin» entiende Nobiling ‘instigado, atizado’ y Rds. Lapa (CEsc. 168) ‘enfurecido’, matices muy parecidos y ambos posibles. Desde luego tenemos nuestro vocablo en el trasm. estar o andar enriçado «muito arraçado, muito teimoso em alguma coisa... ideia de persistencia, da força de vontade, mesmo do phrenesi» (RL V, 47). También parecen contenerlo los dos ejs. siguientes que Moraes cita de Mousinho de Quevedo (h. 1600) y de Luis Pereira (fin S. XVI), si bien traduciéndolos «ouriçado, crespo» [?]: «o Turco arriçado com mágoa» y «os filhos da Leoa arriçados». ↩