JAHARRAR, ‘allanar la pared con yeso, raspándola después y disponiéndola para el blanqueo’, probablemente del ár. Ǥáyyar ‘encalar’, derivado de Ǥîr ‘cal’.

1.ª doc.: xaharrar en doc. palentino que sería de 1505, BHisp. LVIII, 360; 1591, Percivale; Oudin1; jaharrar, Covarr.2

Aut. repite la definición de Covarr. y da ej. de Palomino (1708). Dozy, Gloss., 290, en la duda de Müller entre el sustantivo Ǥayyâr y el verbo Ǥáyyar se decide por «Ǥayyâr, chaux» porque «il vaut toujours mieux dériver les mots espagnols des substantifs arabes»; sin embargo éste es un prejuicio de Dozy, pues si bien son menos numerosos los arabismos entre los verbos, hay ejs. indudables y no precisamente raros; por otra parte, según su propio Suppl. (I, 238) el único sustantivo que significa ‘cal’3 es Ǥîr, palabra vulgar (en lugar del clásico kils), pero empleada por buenos autores y hoy viva en todo el Norte de África; gayyâr significa ‘encalador, calero’4. En cambio, el verbo Ǥáyyar es ‘encalar’ en PAlc. y otros, y así debe entenderse ya en R. Martí, que lo cita sin traducción bajo el epígrafe calx. No hay gran dificultad fonética en derivar de ahí jaharrar, puesto que la -y- intervocálica se pierde en castellano en contacto con una vocal anterior aun en voces de origen arábigo (ALDEA, Baeza, vid. Steiger, Contrib., 301-2); verdad es que entre dos AA la yod se conserva en las palabras de origen latino, pero en los préstamos es fácil que las leyes fonéticas se alteren levemente (como ocurrió con la yod, p. ej., en GARÚA); por lo demás, Ǥáyyar sonaba vulgarmente Ǥéyyar, de donde se pasaba a *jearrar y de ahí jaharrar por asimilación; para lai -rr- comp. ATAHARRE. Sin embargo, Eguílaz (p. 428) se negó a aceptar esta etimología alegando que no explica la h castellana; ahora bien, este argumento sólo tendría algún sentido si esta h no fuese meramente ortográfica, sino aspirada, que es lo que él insinúa al citar como variantes sajarrar y SAJELAR. Pero éste significa algo muy diferente: «limpiar de chinas u otros cuerpos extraños el barro que preparan los alfareros para sus labores»; se trata por lo tanto de un vocablo independiente; en cuanto a sajarrar no es palabra conocida que yo sepa, será variante local andaluza (A. Venceslada da, en efecto, zaharrar, localizado en Osuna), pero entonces deberá comprenderse más bien como cruce de jaharrar, quizá con sajar, o más bien con zabollar ‘unir los ladrillos con yeso’ (A. Venceslada). La etimología de Eguílaz sáhhal ‘aplanar’ (que vulgarmente sería séhhel) es inaceptable fonéticamente, como indicó Baist, RF IV, 375; tampoco convence la relación supuesta por este erudito con CHAFAR o ZAFAR. Es también imposible por razones fonéticas partir, como hace la Acad., de hūwârà ‘tierra blanca’. Variantes de jaharrar: jarrar y jarrear [Acad. S. XX].

DERIV.

Jaharra (xa-, «plastre ou gyps pour enduire des murailles, piastras ou vieilles demolitions, gravois», Oudin); jaharro [Covarr.].

1 «To plaister a wall with white lime», como voz de origen arábigo. «Enduire un mur, plastrer». Minsheu agrega una variante xahartar que no pasará de ser una errata.―

2 «Igualar la pared rehinchéndola con yeso y raspándola, e igualándola con la plana queda aparejada para enluzirla», «vocablo arábigo».―

3 Él traduce «chaux» y «plâtre» ( = ‘yeso’), pero no hallo confirmación de esta segunda ac. en sus citas ni en Probst, Bocthor, Beaussier, Lerchundi, PAlc. ni R. Martí.―

4 Es verdad que Abenalhaxxá (S. XIII), en sus glosas al Mansurí, dice «Ǥayyâr, es la cal, llamada entre el vulgo Ǥír». Pero deberá entenderse como una explicación imperfecta, de tipo etimológico, como abundan entre los lexicógrafos árabes; la estructura morfológica de Ǥayyâr es lo bastante clara para todo el que sabe árabe para que no sea necesario precisar que se trata de un nombre de oficio. Tampoco es exacto que PAlc. traduzca encaladura por Ǥayyâr, como dice Eguílaz, sino por taǤyîra.