GAZAPO, ‘cría del conejo’, del mismo origen incierto que el port. caçapo y el cat. merid. y occid. catxap; el sufijo es indudablemente prerromano, y lo será también el radical, si no es derivado de CAZA, por ser los gazapos fáciles de cazar; aunque no se puede descartar tampoco una procedencia persa a través del árabe, o incluso la adopción del portugués cachopo.

1.ª doc.: gazapo a. 1188-1230, en los Fueros de Alfayates, escritos en dialecto leones1.

Cazapo aparece en el Fuero de Sepúlveda (S. XIII o XIV), V. DHist. s. v. y en una fuente aragonesa como el Epílogo en Medicina publ. en Burgos 1495. Estos textos arcaicos no tienen autoridad para el valor sonoro o sordo de la interdental; G. de Segovia (p. 89) escribe en 1475 gaçapo y agaçapar, Nebr. «gaçapo de conejo: laurex», y hoy se pronuncia con sorda en Cáceres, Sierra de Gata y Oeste de Salamanca (Espinosa, Arc. Dial., p. 50); sin embargo, gazapo en Villasandino (W. Schmid, W. d. C. d. Baena). Aut. cita ejs. clásicos, y ha sido siempre palabra de uso popular (ej. de Laguna, a. 1555, en Aut., s. v. conejuelo). Ac. secundaria: gazapu ast. ‘ave de rapiña de color rojo oscuro’ (V).

También port. caçapo, que ya figura en Gil Vicente (princ. S. XVI), vid. CortesƟo; en el Alentejo cachapo (RL IX, 167). El cat. catxap es palabra empleada en todo el País Valenciano2, en todo el dialecto catalán occidental, con la excepción de los altos valles pirenaicos3, y además en el Campo de Tarragona4; no conozco ejs. antiguos, pero ya debió usarse en los SS. XIV-XVI, pues del catalán pasó entonces al sardo cacciappu ‘insulto dirigido a un niño enfermizo’ (M. L. Wagner, VKR V, 31), campid. gaciapu ‘conejillo’ (Spano). Así, pues, las formas con -ch- (tx) son propias del Sur, lo mismo en catalán que en portugués, y existirán también en el Sur castellano, cuando el andaluz Alcalá Venceslada registra acachaparse por ‘agazaparse’ y (a)gachapazo ‘caída con todo el cuerpo’, ‘caída violenta’ (comp. agachaparse en la Acad.). Luego se trata de una forma mozárabe, donde ch corresponde regularmente a ç del Norte. Una ç sorda intervocálica del castellano antiguo sólo puede corresponder a -CC?-, -TT?l>, -CT?- o -PT?-; esto daría a entender que es palabra emparentada con cazar CAPTIARE, y, efectivamente, el gazapo, incauto por su juventud, es más fácil de cazar que el conejo adulto, de suerte que gazapo podría ser una especie de diminutivo de caza en el sentido de ‘pieza cazada’: los sufijos -apo, -opo, de origen prerromano, tienen a menudo el valor de diminutivos. Comp. el homónimo cazapo ‘pequeño recipiente donde el guadañero lleva un poco de agua con la piedra de afilar la guadaña’ en Cespedosa (RFE XV, 270), derivado de cazo; y cachapo, con el mismo valor en el Bierzo (G. Rey), derivado de CACHO, cacharro.

Por lo demás, estando probado que farnaca ‘cría de liebre’ procede del persa por conducto del ár. ȟarnaq, nos cuesta rechazar la idea de relacionar nuestro vocablo con el nombre indoiranio común del galápago o tortuga: scr. kaçyápaɅ, también kacchapaɅ (y aun káçça-), ave. kasyapa-, persa kašaf, afg. kašap ‘tortuga’, en osetino xaefs ‘sapo, rana’ y el antiguo saki khotanés reunía en khuysa los dos significados (Bailey, Trans. of the Phil. Soc. L, 1945, 30; BSOAS XII, 330, § 5; Mayrhofer, K. Etym. Wb. Aind. I, 190). Siendo voz de origen desconocido y no indoeuropeo, pero de fecha antiquísima, se le puede sospechar procedencia del substrato sumerio o elamítico, y ante un parecido fonético tan grande no sería inconcebible que el vocablo pasara como término vulgar de caza (acaso directamente desde aquel substrato) a variedades orientales del árabe, como nombre despectivo de un pequeño conejo; y que desde ahí viajara, igual que farnaca, a España. Esperemos más investigaciones por parte de los orientalistas.

Puede sospecharse además que una variante del port. cachapo pasara a nuestra península con el supuesto sentido etimológico de ‘galápago’, pues el port. cachopo designa una roca sumergida o un banco de arena: «o cachopo Sul da barra do Tejo», p. ej., que lleva el nombre árabe de Alpeidão (al-baȳȓân ‘las blancas’ porque al romper allí las olas lo cubren de inmensa blancura) según D. Lopes, RL XXIX, 263. Formas análogas, aunque no se apliquen a este cachopo: Cachopo, freguesía cerca de Alportel, distrito de Faro, Cachopi apellido latinizado en 1258, Cachapã(n)es casal en documentos de 1220 y 1258 (CortesƟo, Onomástico).

Desde luego es imposible, por razones fonéticas, derivar del gr. ƌασύπους ‘especie de conejo de pelo espeso’ (como propusieron Covarr. y Diez). Increíble de todos modos sería el supuesto de GdDD 2119a de un cruce del gr. dasypus con el étimo ibérico LAPP- del port. láparo, lapouço, fr. lapin; además, ni siquiera admitiendo otro cruce con caçar, para el port. caçapo, explicaríamos la -tx- del cat. catxap ni la g- del cast. gazapo. Pero tampoco se puede partir de GAZUZA ‘hambre’ y gazofia (variante de BAZOFIA), según quiere Spitzer, Neuphil. Mitt. XXIV, 152, palabras de etimología diferente entre sí y que tampoco ofrecen base adecuada. Ni mirarlo como un derivado de cacho, cachorro, ‘cría del perro’, según propuso Sainéan (BhZRPh. X, 25), seguido por J. Hubschmid (Festschrijt Jud, p. 268, 278n., 279),pues viniendo cacho(rro) de CATTULUS, no podría explicarse la ç de gaçapo ~ caçapo5. Tampoco es posible derivar de AGACHAR (acachar), aunque el agacharse o estar agazapado sea realmente característico del gazapo, a no ser que queramos postular una base *COACTIARE (no documentada en iberorromance), paralela al COACTARE de donde quizá procede AGACHAR.

DERIV.

Agazapar [1475, G. de Segovia; Ercilla, La Araucana, DHist.; port. acaçapar, pero acachapar en Filinto, S. XVIII]: agazaparse es propiamente ‘ocultarse en los intersticios del terreno, como hace el gazapo’ (comp. agaçapado ‘flaco como un gazapo’, en los Autos publicados por Rouanet, S. XVI, Fcha.). Gazapera; ast. esgazaperar «tirar por el vestido descomponiéndolo» (V). Gazapina. Gazapón.

1 PMH, Leges, 809. Pero es texto más leonés que portugués, lleno de formas como paloma (p. 847).―

2 Tengo datos de Albaida, la Ribera del Júcar, el Maestrazgo, El Boixar (junto al límite catalán) y Bellmunt de Mesquí, en la zona catalana de Teruel.―

3 No se emplea en Cardós y Vall Ferrera (Alto Pallars), ni en Andorra y localidades próximas (quizá en todo el Alto Urgel y alto valle del Noguera Pallaresa); pero el diminutivo catxapó es ya conocido en el Flamisell (Sudoeste del Alto Pallars), Butll. del C. Excurs. de Cat. XLV, 242, y en Sopeira (Ribagorza), Congr. de la Ll. Cat., p. 424. Parece ser general desde la línea Balaguer-Segarra. En verdad he anotado recientemente catxapó hasta Tragó de Noguera, Corçà (ahí catxap), Peralba, Montmagastre, Colldelrat y Tudela de Segre; y Ribagorzana arriba lo oí más tarde hasta Senet, límite del Valle de Arán. En una palabra, es vivo en todo el catalán occidental. En el extremo occidental del valenciano, la Font de la Figuera, me dicen que ya no es vivo catxap, pero sí se emplea gatxapera (ya con g-) para la ‘madriguera’ o ‘lugar donde pare la coneja’.―

4 El catalán central sólo conoce llodrigó o llorigó, procedente de otro iberismo, el LAUREX, -էCIS, de Plinio.―

5 El alent. gazopo ‘perrito’ (Fig.) parece estar por *canzopo, diminutivo de cão ‘perro’, pero sólo por casualidad se parece vagamente a nuestro vocablo, que en el Alentejo es cachapo.