Aut. cita otros ejs. de los SS. XVI-XVII, y hoy sigue siendo muy popular. Pertenecen al mismo radical onomatopéyico
CUESCO (vid.), el familiar
cosque íd. (Acad. 1884, no 1843; empleado por el vasco Azkue en su diccionario, I, 474
c, al definir el sinónimo vasco
kaskarreko, de formación análoga), y varias palabras que designan objetos duros o endurecidos:
cuscurro (ya Acad. 1843; también aragonés: Borao) y el metatético
corrusco (Acad. íd.),
currusco en Aragón y en Navarra (A. Alonso), todos ellos para ‘mendrugo, cantero de pan’, vasco
koxko,
kasko,
koxkor,
koskor,
kozkor, ‘corteza del pan’ (
BhZRPh. VI, 12-13), labort.
kuzkur ‘troncho de col’, Arrens
couscoùrro ‘piña de abeto’, Cauterets
couscoùlho, Aure
cascoùlho íd. (
BhZRPh. LXXXV, § 13), arag.
coscarana ‘torta muy delgada y seca que cruje al mascarse’ (Acad. ya 1843), y aun quizá el santand.
corruscar,
tarruscar, ‘abrasar’ (comentados de otra manera por G. de Diego,
RFE IX, 126-7).
Cuscurrear and. ‘mascar una cosa dura’, ‘comprender un asunto’ (AV).
Cuscurronero o
-rrunero ‘que se deja masticar fácilmente y cruje al masticarlo, lo contrario de correoso’, palabra no recogida por los diccionarios, usual en Almería y otras partes. Claro es que en varias de estas palabras puede haber interferencias con las familias de
CÁSCARA, de
COSCOJO y de
SOCARRAR. Más derivados dialectales en M. L. Wagner,
ZRPh. LXIII, 364; Krüger,
NRFH VI, 18-19.