AMIÉSGADO, ant., ‘fresa’, del lat. vg. (FRAGUM) DOMĔSTէCUM(fresa) cultivada’.

1.ª doc.: miezgado, 1557, Jarava: en Colmeiro, II, 319; miezdago, 1569, Palmireno, ibid.; miesgado, 1570, C. de las Casas; amiesgado, 1616, Oudin.

El diptongo indica que el vocablo se acentuó siempre en la sílaba mie, aunque algunos que, sin conocerlo de oído, lo hallaron en textos escritos, acentuaron falsamente la terminación, y de aquí vino el interpretar erróneamente amiesgado como adj. por ‘(lugar) lleno de fresas’, según hace Franciosini y tras él Terr., pero Aut. acentúa amiésgado1. Con feliz intuición propuso Schuchardt, ZRPh. XXIX, 220, la etimología DOMESTICUS para el cast. miesga. Creo indudable este étimo, aunque debe rectificarse ligeramente, pues esta forma miesga2 está mal documentada. Trae amiesga Franciosini, pero creo que deduciéndola de amiesgado que según hemos visto interpreta torcidamente. DOMĔSTէCUS daría *amiéstago, luego *amiésgato, y como no había un sufijo átono -ato, pero sí -ado (lóbado, nuégado, port. relâmpado, etc.), esto se convirtió en amiésgado. Una huella de la forma primitiva podría hallarse en el miézdago de Palmireno: la -d- podría explicarse por una sonorización esporádica que a veces ocurre tras s (comp. ESGUILO, esguil·là s. v. ESCULLIR, etc.) (o será forma de compromiso entre *miéstago y miésgado). DOMESTICUS sólo significaba ‘casero, hogareño, familiar’ en latín clásico, mas por influjo de domesticar pronto tomaría la ac. ‘domesticado’, ‘plantado, no silvestre’, como se ve por las formas romances: oc. ant. domȇsge, -esgue, -ergue, -etge «de la maison, de la famille; du pays; planté, greffé (opposé à sauvage, en parlant d’un arbre)», mȇsche, mȇtche «domestique; planté, cultivé», bearn. amèche doumèdge, mèche, mèdje, mètche «apprivoisé», amechà, ametchà «apprivoiser» (Palay), Gers amèche «apprivoisé, caressant, doux» (Cénac o Durrieux), cat. metxot ‘(alcornoque) que ya ha sido pelado’ (Costa de Levante), venec. mèstego, desmèstego, Bas-Manceau domèche, norm. cérise amèche ‘clase de cereza’ (REW), fruits mesches et salvatges en un doc. landés de 1256 (Luchaire, Recueil, p. 80). Estas formas nos prueban que DOMESTICUS, cambiado primero en *deméstego, pasó luego a *eméstego, améstego o méstego, por deglutinación de la d-, confundida con la preposición: es la misma historia de DAMASCENA > amacena, (a)meixa, o la de DUM INTÉRIM > domientre, demientre, mientras. Para otras antiguas denominaciones de la fresa, V. MAYUETA, MADROÑO y MERUÉNDANO; sustituidas todas por el galicismo FRESA 3.

1 Hace referencia la Acad. en sus diccionarios de autoridades al diccionario español-latino de Nebr., con la definición «fruto de cierta yerva, fragum», pero lo único que hallé en la primera ed. de Nebr., y con esta misma definición, es MAYUETA. Si no hay error de cita, se tratará, pues, de una edición tardía de Nebr. Aut. y Covarr. (s. v. fresa) citan también miezgado del Calepino de Passeracio.―

2 En el REW3 2732, adiciones, miesgo, por errata según creo.―

3 C. Michaëlis, Misc. Caix-Canello, 139n., había pensado en el nombre de Linneo (FRAGARIA) VESCA para explicar miesga.