PANDO, ‘encorvado, alabeado’, del lat. PANDUS ‘arqueado, alabeado’, ‘bombado’, ‘cóncavo’.

1.ª doc.: doc. leonés de 959.

Se trata ahí de la venta de unas tierras «in loco quo dicunt Alexi..., in illos pandos» (Vignau, Índice Docs. de Sahagún, n.° 590); otro ej. parecido registra Oelschl. en doc. de 1210; el sentido será más o menos el de «terreno casi llano situado entre dos montes», que la Acad. no registró hasta 1925 o 1936, pero que constituye indudablemente la base del nombre de lugar Pando o Pano, tan común en Aragón (más topónimos en M. P., Oríg.2, 300-1); en forma más precisa es probable que el vocablo significara ‘collado, paso entre dos cerros’, ya que Coll Pan o Coll Pany es un nombre de collado sumamente frecuente en los Pirineos Catalanes (Misc. Fabra, p. 111), comp. la forma mozárabe Serra de Pàndols [< Pandos], al Sur del Ebro, y galés pant ‘valle’, tomado del latín.

En general pando siguió empleándose como adjetivo, igual que en latín, y así aparece en APal.: «camures son bueyes altos y pandos» (55b), «remillum [‘arremangado, arqueado, saliente’] dizen lo que se tornó pando» (416d). En C. de Castillejo es ‘encorvado’: «alto, pando, corcovado, / mui carnuda la cabeza, / de los muslos mui delgado», y en Juan de Torres (1596): «juzgaban a qualquier persona por torpe y luxuriosa si tenía las narices pandas». Son citas de Aut., donde se define «inclinado u corvo levemente hacia el medio». Nebr. dice que pando hazia tras es lo mismo que repandus, y que vale también «cosa tesa», en latín pandus, por lo cual podemos entender situaciones como las del hombre que echa el cuerpo hacia afuera, formando eminencia para adelante.

De ahí varias acs. americanas: estar pando ‘tener la barriga llena o hinchada’ en Cuba (Ca., 115), pando «el que levanta la cabeza y echa el cuerpo hacia adelante» en Méjico y las Antillas, pandito ‘vanidoso’ en Nuevo Méjico (BDHA IV, 64); algo análogo puede entender Ramos Duarte cuando nos dice que en el Estado de Durango significa «preferido». Acs. más materiales tenemos en Asturias ‘cóncavo, hinchado’ (Rato), Bierzo pandín ‘curvo, torcido’ (hay que poner pandín el palo, G. Rey), colomb. pando ‘jorobado, encorvado, torcido (hablando de personas)’ (Sundheim). La del Alto Aragón mula panda ‘terca, huraña’ (¿‘coceadora’?), BDC XXIV, 176, puede venir del sentido de ‘hinchado, vanidoso’ o bien puede salir del sentido de ‘zambo’ (‘de piernas arqueadas para adentro’), que según Acevedo-F. tiene pando en el Oeste de Asturias; ac. que ya es muy antigua, pues en CGL III, 529.49, el gr. λορƌóς está traducido por pandus y cloppus, y en II, 432.58 nuestro vocablo se emplea como equivalente de σκελλóς, voz griega que en otras glosas equivale a scaurus, junto con σκαμβóς y στρεβλóπους. Ya en Aut. tenemos la ac. figurada «lento y tardo en el movimiento: dícese particularmente de los ríos quando van por tierra mui llana; y por extensión se dice del sugeto pausado y espacioso»: de ahí que en Bolivia valga ‘llano y de poco fondo’, aplicado a pantanos, lagunas y arroyos (Bayo), y en Mendoza, Arg., es muy vivo en esta misma ac. de ‘somero, poco hondo’ (una pileta panda, oído varias veces): el punto de partida puede ser ‘de fondo convexo’, a no ser que se pasara de ‘orgulloso’ a ‘sosegado, calmoso’ y después aplicándose a corrientes de agua se trasladara desde ahí a la poca profundidad, circunstancia que en los arroyos suele acompañar a la lentitud de curso (comp. SESGO). Finalmente nótese boquipando ‘hablador, largo en pláticas y consejos’, en la Pícara Justina (RFE XII, 169).

En romance PANDUS (fuera del caso aislado de un dialecto del Sur da Italia, REW 6193) se ha conservado solamente en castellano y en el port. pando «cheio; inflado; largo; aberto e encurvado»; para algunas voces derivadas procedentes de PANDUS en dialectos catalanes, vid. BDC XXIII, 3011. En latín PANDUS fué voz bien conocida en la Edad de Oro, derivada de PANDĔRE ‘extender, separar’, de donde PANDUS ‘apartado (de lo recto)’ y de ahí las acs. conocidas; por lo demás las definiciones que suelen dar los diccionarios comunes son poco satisfactorias: más bien que de ‘curvo’ se trata de la idea de ‘arqueado, torcido’, ‘alabeado’, después ‘cóncavo’ y alguna vez (pocas en la buena época) ‘convexo’; V. los dicc. de Ernout-M. y Walde-H., y sobre todo las notas monográficas de Wölfflin, ALLG I, 10 y 329-43; llama la atención Wölfflin hacia el hecho de que desde Séneca el vocablo se encuentra solamente en escritores hispanolatinos, como Quintiliano y Marcial, lo cual no puede sorprender a los romanistas.

DERIV.

Panda ‘galería o corredor de un claustro’. Pandear ‘alabearse’ [Aut.]; pandear la cintura ‘echarla para adelante’ en las Antillas (BDHA IV, 64)2; pandeo. Panderón3 ‘plano arqueado y convexo, de superficie lisa y suave, que se forma en las vertientes de Sierra Nevada’. Apandar ‘pandear’ (ej. de Galdós, DHist.), ‘doblegar, humillar’, ‘doblarse, amansarse’ en el Oeste de Asturias (Acevedo-F.), ‘contener, aguantar, resistir’ (ejs. del S. XIX en DHist.), y por confusión parcial con apañar, ‘pillar, atrapar’ (ibid.), ast. apandar ‘recoger y apropiarse algo’, ‘pandear’ (V); para apandar y para el port. apandeirado, vid. M. L. Wagner, Misc. Coelho, 306; gall. pandar o apandar ‘hacer de caballo un niño en cierto juego, para que otro se le suba encima’ (Sarm. CaG. 120v y p. 162). Empandar. Cultismo: pandiculación. V. además PANDILLA y CUCHIPANDA.

CPT.

Hay muchos topónimos cpts. de pando ‘collado’ en los Picos de Europa, nombres de puertos o collados: Collado Pando, Pandetrave (TRABS ‘viga, tronco’), Panderruedas, Pandiellas, Pambuche, etc., y el más notable Pandébano, puerto y majada en un altísimo macizo pedregoso: supervivencia del famoso ibérico eban ‘piedra, peña’ (vid. los sitios en el plano, p. 83, de José Lueje, Los Picos de Europa, León, 1973, y vistas de Pandébano en las pp. 71 y 124).

1 El mall. pàndol aplicado a las orejas anchas y caídas de los animales (BDLC IX, 185; AORBB III, 40), vendrá de PANDUS como forma mozárabe (y no de PENDULUS, como quisiera Moll, lo que no explicaría la á). V. arriba el nombre de lugar Pàndols.―

2 Rato registró «bandear: buscarse la vida, vid. pandear» y luego olvidó definir este último; pero lo emplea él mismo al definir otra palabra: «foyau adj.: pandeao en dalguna poza o foyu»; se tratará de un terreno que ha cedido formando un hoyo.―

3 Con un punto de partida semántico análogo se emplea panà(r) m. en cl sentido de ‘partida, zona extensa en la montaña’ en cat. dial. del extremo NO. (anotado p. ej. en el macizo del Turbón, en Les Viles).