HARBAR, ‘hacer algo de prisa y atropelladamente’, del ár. ȟárab ‘devastar’, ‘destruir, echar a perder’; la forma española vendrá del nombre de acción del mismo verbo, ȟarb.
1.ª doc.: h. 1500, Juan del Encina.
El judeoesp. conserva acs. más arcaicas: jarbear (con j velar) es «estragar; horadar; buscar, revolver, desarreglar, registrar» en Marruecos (Benoliel, BRAE XV, 207), «pegar, castigar» en Oriente, y de ahí en Estambul está harbado «je suis abattu, défait» (Crews, Recherches sur le Jud.-Esp.)3.
Nadie se ha ocupado hasta ahora de la etimología, si exceptuamos alguna idea descabellada de Covarr.4, Benoliel dice sin precisar que es palabra arábiga, para lo cual se funda en la inicial aspirada, pues es sabido que el judeoespañol conserva la F- latina o romance sin cambiarla en aspiración, o bien la pierde totalmente, mientras que sólo tiene aspiración en palabras de origen semítico, con aspiración originaria (comp. HARAGÁN).
Y, en efecto, el verbo ȟárab es conocido en árabe. El sentido primitivo parece ser ‘devastar’, pues en el Corán se halla ya el intransitivo ȟáriba ‘estar desierto’, y los causativos ȟárraba y Ȑáȟraba ‘dejar desierto, devastar’ (Dieterici); ȟárab pertenece a la lengua clásica con el sentido de ‘arruinar, devastar (p. ej. una casa)’ y también ‘agujerear, perforar’, y el vocablo sigue vivo en los dialectos modernos: ‘destruir’, ‘arruinar’, en Marruecos (Lerchundi), «détruire; bouleverser, mettre en désordre, en confusión; démolir, détruire, renverser, ruiner; dévaster, désoler, ravager, ruiner» en Argelia (Beaussier), «faire des dégâts; faire rage, commettre des désordres extrêmes; remuer ciel et terre; dérégler, mettre dans le désordre; désajuster, pervertir; mettre tout en confusion; couler une personne, la ruiner» en Egipto (Bocthor); en España mismo el vocablo estuvo en uso, aunque PAlc. y R. Martí sólo registran la primera forma en el sentido de ‘engañar’, pero el último trae de todos modos la 7.ª forma en la ac. ‘destruirse’. No hay duda de que los sentidos castellanos se explican perfectamente partiendo de la idea de ‘echar a perder’, ‘arruinar’, y que el matiz de ‘hacerlo así por la prisa’ se desarrolló secundariamente. Formalmente harbar procederá del nombre de acción o infinitivo ȟarb; la variante jarbear se explica como fidear de fîȓ, V. FIDEO y demás casos análogos allí citados.
DERIV.
Harbullar ‘farfullar’ [Acad. 1925 o 1936], cruce con FARFULLAR; harbullista [1625, como voz vulgar o mal sonante, en Pedro Espinosa, Obras, p. 196]. Del verbo ár. ȟárab directamente quizá derive haravillo «batidor, meneador» (1525, Rob. de Nola, pp. 74, 222).
1 De este ejemplo parece haberse sacado la definición de harbar «coudre à grands points; faire une chose à la hâte», que según Farhi y Steiger (VRom. III, 305) se hallaría en Oudin, aunque no en la 1.ª ni la 2.ª edición de este diccionario.― ↩
2 Confirmado por Figueiredo con definiciones semejantes, como vocablo trasmontano, y en el sentido de «apanhar muito calor» como voz provincial. Además las ediciones póstumas traen un «afervar: tornar fervente; aferventar; afervorar», que me parece algo sospechoso.― ↩
3 Cynthia Crews, VRom. XIV, 307, aunque por lo visto, acepta mi etimología, afirma que me equivoco al admitir que estas acs. judeoespañoles son arcaísmos castellanos, y asegura que se deben al influjo de la raíz hebrea Ʌ-r-༠ ‘echado a perder, seco’ (por lo demás, hermana del étimo arábigo ȟárab), en lo cual no se puede asegurar si tiene o no tiene razón, pues aunque parece seguro el origen hebreo del judesp. Ʌarboná ‘paliza’, y es posible que éste influyera, también pudo hacerlo solamente en el sentido de ayudar a conservar una ac. arcaica castellana, perdida por lo demás en España, pero procedente del árabe.― ↩
4 Hebr. harbagh ‘cuatro’, porque el muchacho que escribe mal encadena cuatro letras a un tiempo. Ár. harab ‘escritura en cifra empleada en tiempo de guerra’ (no sé en qué palabra arábiga piensa ahí Covarr., pero no vale la pena buscarlo, pues no satisface semánticamente). ↩