ENGORRAR, ant., ‘tardar, detener’, origen incierto; parece tratarse de una alteración del ant. engorar ‘incubar (la gallina)’, de donde ‘estar inmovilizado’ (para el cual V. HUERO), debida a influjo de engorra ‘gancho de hierro de algunas saetas, que sirve para que no puedan sacarse de la herida’, probablemente voz independiente de la anterior, quizá procedente de angorra, y derivada de anga ‘gancho’ (gót. *ANGA ‘gancho, anzuelo’, vid. ANGAZO).

1.ª doc.: J. Ruiz.

«Tu que bien corres / aquí non te engorres, / anda tu jornada» (1025d), «E tú, ¿por qué non corres? / Andando e fablando, amigo, non t’engorres» (1465d); otro ej. de la ac. ‘tardar’: «con el rato acuciado se repara e cobra en alguna manera el día engorrado» Hernando de Talavera, NBAE XVI, 95a. Engorrarse se halla también una vez en el Canc. de Baena (W. Schmid), en Andrés Bernáldez, Hist. de los Reyes Catól., † 1513, en Sánchez de Badajoz (1525-47) y en Timoneda († 1583, vid. M. R. Lida en su ed. de J. Ruiz); Juan del Encina (1496) emplea muchas veces engorrar ‘entretenerse, tardar’ como intransitivo, y Nebr. registra «engorrar o tardarse: moror» y «engorrar a otro: cunctor»; por otra parte, a diferencia de este sentido general, Vinasandino (h. 1400) emplea engorrar en el de ‘cansar, fastidiar, ser molesto’1, que hoy se ha conservado en Venezuela, y de donde procede el moderno engorro. Por lo demás, el vocablo ya se anticuaba en el S. XVI, pues Juan de Valdés (1534-6) dice que más le contenta tardar que engorrar (Diál. de la L., 106.19), Sánchez de las Brozas (1582) comenta que es voz del «antiguo castellano», aunque Percivale (1591), Oudin (1607) y Covarr. (1611) siguen registrándolo sin observación, y hoy engorrar, -rriar ‘entretenerse, divertirse’, ‘pasar el rato holgando’, sigue vivo sólo en dialectos, p. ej. en Salamanca (Lamano)2.

El del origen de engorrar bien puede decirse que es un problema intacto, pues no son dignas de discusión la etimología de Covarr. ―derivado de hora― ni la de Sánchez de las Brozas: derivado de gorra, por el mucho tiempo que tardaban en ponérsela cuando llevaban el cabello largo. Lo primero que ocurre es relacionar con gorrón y gorrero ‘el que come o vive a costa ajena’, ‘persona de mala vida’ [ambos desde princ. S. XVII], y con su primitivo gorra, en comer o vivir de gorra [misma fecha], que con toda probabilidad no son otra cosa que gorra ‘prenda para cubrir la cabeza’, tomada como símbolo de la cortesía en el refrán buena gorra y buena boca hacen más que buena bolsa ‘es muy útil ser cortés y bien hablado’ y en las frases duro de gorra (el que aguarda que otro le salude primero) y hablarse de gorra (saludarse sin hablarse) ya registradas por Covarr., de suerte que comer de gorra pudo ser ‘comer por cortesía, gracias a los muchos saludos que el parásito prodiga’, comp. comer de bonete en el Estebanillo González; siendo esto así, el derivado engorrarse ‘tardar’ debería proceder del sentido de ‘hacer el parásito, hacer el perezoso’, evolución semántica larga que presupondría la existencia de gorra y de aquellos derivados mucho tiempo antes de J. Ruiz; en realidad el nombre de esta prenda no aparece antes del S. XVI, o a lo sumo en el XV; además, siendo derivado de gorra en el sentido de ‘gorrón’, el vocablo debiera tener sabor jergal como este su primitivo, cuando el verbo engorrarse pertenece evidentemente al lenguaje serio desde sus orígenes.

Tampoco hay probabilidad de relacionar con engurrio ‘melancolía’, dado el origen semántico de este vocablo (véase), que además no explicaría la o del nuestro.

Es razonable, en cambio, relacionar con engorar ‘incubar, empollar’, ‘sacar el polluelo del huevo (la gallina clueca) calentándolo con el contacto prolongado de su cuerpo’, ya documentado en la Edad Media, ast., marag., santand. gorar (guarar, gurar, agorar) ‘ponerse cluecas las aves’, para cuyo origen V. HUERO. En efecto, bastará citar expresiones como el cast. chocho ‘decrépito’ (junto al port. chacho ‘huevo huero, incubado, podrido’), clueco ‘achacoso’ (junto a clueca), cat. cloc ‘enfermizo, achacoso’, it. chiocciare ‘estar enfermizo o achacoso’, ‘cloquear’, oc. cloussejà íd., para recordar con cuánta frecuencia van juntas las ideas de ‘empollar’ y ‘estar paralizado o inmóvil’, de donde tan fácilmente se pasaba a ‘entretenerse, tardar’.

Sólo falta explicar la -rr-, ya asegurada por la rima en Juan Ruiz. Este cambio pudo realizarse fácilmente por una contaminación, que difícilmente será la de gorra, por la razón cronológica indicada, pero que bien pudo venir del vocablo engorra, que según Núñez de Guzmán (1499) significaba ‘gancho que llevan ciertas saetas para que no puedan sacarse sin cortar carne’, en los versos de Juan de Mena (h. 1444): «Como el ferido de aquella saeta, / que trae consigo la cruel engorra» (citados in extenso por Cuervo, Dicc. II, 981a, s. v. descabullir). En este sentido, engorra podría derivar de engorrar en el sentido de ‘objeto que estorba y detiene (la cura)’, pero nada impide considerarla palabra independiente, como sugiere Spitzer, RFE X, 171n., aunque antes que derivarla del gr. ęƔκǠν ‘ángulo’, o del lat. ANGŬLUS, preferiría, en vista de las dificultades morfológicas que estos étimos ofrecerían, partir de una forma castellana hermana del gall. anga ‘hierro saliente en una caldera para cogerla’, procedente del gót. *ANGA ‘gancho, auzuelo’, puesto que este vocablo debió tener antes mayor extensión, derivando de él el port. engaço ‘gancho’ y el leon. angazo, engazo, ‘gancho para coger algas’, ‘rastrillo’; de *angorra fácilmente se haría engorra. Para asegurar esta etimología haría falta documentar más abundantemente este vocablo, y a ser posible probar con textos que aquélla fué realmente su forma originaria. Parecen confirmarla las acs. de engorrarse ‘quedarse prendido o sujeto en un gancho’ y ‘entrar una espina en la carne de modo que no se pueda sacar fácilmente’ que registró la Acad. sólo después de 1899.

DERIV.

Engorra ant. ‘tardanza, detención’ (Nebr.; A. de Salaya, 3r. 4.° del S. XVI, PMLA LII, 55); ‘trozo de piel a modo de polaina con que se ciñe la pierna, para que no penetre en el pie ni tierra ni agua’ [Correas, 1627], propiamente ‘impedimento’, conservado en Salamanca en esta forma o angorra3. Engorro ‘embarazo, impedimento’ [Aut.]; engorroso [1591, Percivale; Oudin].

1 «Rey gentil, muy illustrado, / la vuestra merçed acorra, / ca ssy mi persona engorra / muerta la veo privado», Canc. de Baena, n.° 65, v. 67.―

2 También engarriar, por cruce con otro vocablo, probablemente engarañarse, engarrañirse, engarrillarse ‘entumecerse’ (quizá derivados de garra en el sentido de quedar con los dedos encorvados, comp. la sinonimia desengarabitarse en la cita de Maldonado que da Lamano). El sentido de meter en angorras ‘incitar, estimular’ (Sierra de Francia), no es fácil de comprender, a no ser que venga de ‘molestar, importunar’.―

3 Para engorra ‘gancho de flecha’, véase arriba. La ac. ‘juego infantil en que los muchachos saltan por encima de otro, que permanece con el cuerpo arqueado’ quizá viene de la idea de ‘gancho’.