ZURDO, emparentado con el gall. mao xurda ‘mano izquierda’, port. surro, churro, churdo, ‘ruin, vil, sucio’, bearn. soùrrou ‘avaro’, ‘taciturno, maleducado’ y con el vasco zur ‘avaro, agarrado’, zurrun ‘inflexible’, ‘pesado’, probablemente de una voz prerromana afín a estas palabras vascas: las palabras que significan ‘zurdo’ suelen partir de la idea de ‘grosero’, ‘torpe’, por la inhabilidad que se atribuye al zurdo; la -rr- se cambia normalmente en -rd- en palabras de procedencia aborigen.

1.ª doc.: 1475, G. de Segovia.

Escrito ahí çurdo, -a (p. 79), con ç- sorda, con lo cual coincide la actual pronunciación de Cáceres (Espinosa, Arc. Dial., 52). Por lo demás, no tengo ejs. medievales, y falta en los glos. de h. 1400, en APal. y Nebr.; C. de las Casas: «çurdo: mancino»; Oudin «çurdo: gaucher»; Covarr. «el que es más ágil de la mano izquierda que de la derecha»; Aut. «el que usa de la mano izquierda del mismo modo, y para lo que las demás personas usan de la diestra», «se aplica también a la mano siniestra y a todo lo que le pertenece», de lo cual da ej. en G. Silvestre (S. XVIII); otro en Zabaleta (med. S. XVII): «desviando con toda la mano zurda dos dedos de la cabeza el sombrero». Pero lo más común es que se aplique a persona. En este sentido, la literatura clásica está rebosante de alusiones al concepto desfavorable que el pueblo tiene de los zurdos como gente inútil y, aún peor, gente mala y de mal agüero.

De entre la rica colección de ejemplos reunida por Herrero García (RFE XII, 169-73) y Cejador (VIII, p. 552), entresacaré sólo los siguientes. «Has de saber, ¡oh Sancho!, que no saber un hombre leer, o ser zurdo, arguye una de dos cosas: o que fué hijo de padres demasiado humildes y bajos, o él tan travieso y malo que no pudo entrar en él el buen uso ni la buena doctrina» Quijote (Cl. C. VII, 115), «pues ¿no quiere vuesa merced que me pudra... si éste es un hombre que trae por los caniculares chinelas y la espada a zurdas?... me pudro de ver aquellos que han de ser gobernados por mano de este hombre, que... si es zurdo, no podrá hacer nada a derechas» Cervantes (El Hospital de los Podridos), «la vara le dan zurda. ―¿Cómo zurda? ―Pues ¿no es zurda esta vara? ¿Cómo, pues, si me dan zurda la vara, quieren que juzgue yo derecho?» Cervantes (Los Alcaldes de Daganzo), «enojo de rubio y lanzada de zurdo: son crueles» G. Correas, «qué ojos de envidioso, de zurdo o de mulato» Jacinto Polo, «siguióle todo de verde / el valiente Pero Marcos; / Pero Marcos, hombre zurdo, / pero bien intencionado» Lope, «la infame fortuneja [que favorece]... /cada día a tantos mandrias, / a tantos zurdos y necios» Vélez de Guevara, «el que encontrare algún zurdo / por la mañana, protesto / que no hará cosa a derechas» Rojas Zorrilla, y como remate lo que dice Quevedo en Las Zahurdas de Plutón: «¿Quién son? ―le pregunté. ―Y dijo el diablo: ―Hablando con perdón, los zurdos, gente que no puede hacer cosa a derechas, quejándose de que no están con los otros condenados, y acá dudamos si son hombres o otra cosa; que en el mundo ellos no sirven sino de enfados y de mal agüero; pues si uno va en negocios y topa zurdos, se vuelve como si topara un cuervo o oyera una lechuza... al fin es gente hecha al revés y que se duda si son gente». Y atiéndase a que esto ―como lo prueban irrefragablemente los refranes, y las palabras muy serias de Don Quijote―, no son juegos de palabras, ni desvío de unos pocos, sino concepto hondamente arraigado y creído a fondo por todo el pueblo. Al zurdo se le miró como hombre esencialmente vil y grosero.

Esto nos explica el que la misma palabra tenga otros sentidos, pertenecientes a estas ideas, en Portugal; así surro es ‘grosero, basto’ en Tras os Montes: «a louça mais grosseira, surra, é baça: e nƟo ornamentada» (RL XXIX, 304); lo mismo significa loiça churra en otras partes de esta provincia portuguesa (RL XI, 306), pero churro en el portugués general vale «vilƟo, ruim, miserável, pertinaz, chulo» (Moraes), y junto a esto tenemos churdo «homem ruim, vil», y churro y churdo se aplican a la lana sucia, antes de prepararla; sin embargo, no cabe dudar de que esto es lo mismo que zurdo, pues en el gallego del Limia xurda es la mano izquierda (Schneider, VKR XI, s. v.). La idea de crueldad sigue presente en el gato zurdo, nombre empleado por Tirso (Fcha.) con el sentido de ‘gato romo o valiente’. Para más detalles acerca del portugués, V. mi artículo CHURRE, que es variante de la misma palabra. Cito allí también el bearn. soùrrou «parcimonieux, avare», «sournois, taciturne, bourru», el cat. sorrut ‘adusto, taciturno, cazurro’, y el it. merid. zurro «rozzo», sardo zurra ‘oveja vieja y flaca’ (comp. ZORRO) 1.

Las viejas generaciones de romanistas anduvieron muy desorientadas en la etimología de zurdo. Diez (Etymologisches Wörterbuch, p. 500) quería partir de SŬRDUS ‘sordo’, lo que es imposible tanto por el sentido como por la forma. Baist, rectificándole (ZRPh. VII, 125), prefería ABSURDUS ‘discordante’, ‘absurdo’, idea todavía aceptada por G. de Diego (RFE III, 308) y M-L. (REW1 y 3 50), pero rechazada por A. Castro (RFE V, 24), y que no satisface en el aspecto semántico, y mucho menos en el fonético: no se justifica ni la caída de la A-, ni la ç-, ni la u, pues diga lo que quiera Baist, no hay razones firmes para separar etimológicamente a ABSURDUS de SŬRDUS (vid. Ernout-M. y Walde-H.), ni por lo tanto hay probabilidad alguna de que la U tónica de ABSURDUS fuese larga (lo cual por lo demás sería extraordinario ante el grupo RD, según la fonética latina). Spitzer propuso primero (RFE VIII, 404) un cruce de zoco ‘zurdo’ con palurdo, voces de sentidos diferentes, que no podían cruzarse (además zoco es regresión modernísima y poco extendida); luego rectificó (ARom. IX, 146) sugiriendo que zurdo derive de zurrar ‘curtir pieles’ (con cambio de -rr- en -rd-), con lo cual compara el fr. gauche junto al alem. walken ‘abatanar’; pero ésta no es buena semántica, pues gauche no deriva del fr. ant. gauchier en el sentido de ‘abatanar’, sino en el de ‘alabear, torcer’ (en el cual parece tratarse de *WANKJAN sin relación con WALKAN, aunque alterado fonéticamente por influjo de éste), y realmente no sería fácil derivar la idea de ‘zurdo’ de la de ‘curtir las pieles’.

Sólo Rohlfs (ZRPh. LII, 67) propuso algo razonable al relacionar con el vasco labort. y b. nav. zurrun «inflexible, raide, lent, lourd»; pero éste en realidad parece ser un derivado del vasco zur (o en forma diminutiva-hipocorística txur) ‘avaro’, ‘agarrado’, voz que tiene rr larga, pues con el artículo suena zurra; ya hace años que indiqué (VRom. II, 158) que ahí había de encontrarse el origen de zurdo. Es sabido que la -RR- se cambia muchísimas veces en -rd- en las palabras de origen no latino (ZRPh. XLII, 402; VRom. II, 455). Como he escrito s. v. CHURRE es de creer que el sentido primitivo de toda esta familia vasco-románica sería ‘grosero’, ‘ruin’, ‘sucio’, de donde se pasaría a ‘avaro’ en vasco moderno (según ocurrió con el lat. sordidus). Observa Michelena (V. las adiciones a churre) que el vasco zurr parece venir de un más antiguo ZUNURR, con evolución fonética regular en vasco. Lo cual nos obliga a suponer que zurdo se tomara del vasco en la Edad Media y no del protovasco o el ibero. Esto ya sería probable de todos modos, pues el concepto de ‘izquierdo’ (V. este artículo) es de los que cambian de nombre continuamente a causa de las interdicciones de que son objeto las palabras de mal agüero. Está claro que zurdo es menos antiguo que izquierdo en romance. En definitiva, es sumamente probable que tengamos ahí una evolución romance de ese vasco zurr ‘grosero, vil’.

DERIV.

Zurdería. Enzurdar.

1 Sin apartarnos mucho de este orden de ideas podríamos relacionar aquí el galés swrth ‘amodorrado’, ‘pesado’, ‘malhumorado’, que según Loth sería préstamo del lat. SORDIDUS, y que según Schuchardt fonéticamente sólo puede corresponder a SURDUS (Litbl. XIV, 96), aunque bien mirado no veo razón para apartarlo del autóctono swrth ‘que cae, caduco’, que de todos modos sería causa según Schuchardt de que este supuesto latinismo termine en -th y no en -dd como se esperaría.