VIENTO, del lat. VĔNTUS íd.

1.ª doc.: orígenes (Glosas de Silos; Berceo).

De uso general en todas las épocas y conservado en todos los romances. Para listas de vientos, vid. Nebr. s. v., y Vigón s. v. víentu. Cej. IV, § 136. Abundan las acs. secundarias: viento malo ‘desgracia, mal hado’ [Alex., 1913]; ‘cada una de las tres cuerdas que se aseguran en la armazón de la cometa’ colomb. (Cuervo, Ap.4, p. 434), cub. (Ca., 93) y en otras partes (con ac. más general en Acad., n.º 12; ‘alambre lateral que sostiene un poste’, oído en Madrid; cat. vents ‘cordeles laterales que sostienen una tienda’). Viento blanco ‘viento huracanado que levanta la nieve cerca de las cumbres andinas’ (BRAE XVII, 351; Draghi, Novenario, s. v.; Borcosque, Puque, 50).

DERIV.

Ventada. Ventalla [1708, Aut.], del fr. ventaille; ventalle [«es el pulmón como v. del coraçon, en que se recibe el aliento» APal. 396b], del cat. ventall ‘abanico’.

Ventana ‘abertura, respiradero’ antiguo [ventana de la loriga, hacia 1300, Gran Conquista de Ultr., 261], ‘respiradero de una nave, de una tienda’ [Alex., 2134b, 2383a]1, ‘orificio de la nariz, por donde se respira’ [llamado ventana a secas, no v. de la nariz, h. 1325, J. Manuel, Caça, ed. Baist 55.23; trad. de la Falcoaria de Pero Menino, RFE XXIII, 271.10], ‘ventana, abertura grande en una pared’ [h. 1400, glos. de Toledo (frente a finiestra en el del Escorial); «v. o hiniestra: fenestra» Nebr.]: no reemplazó a hiniestra (todavía posible en tiempo de J. de Valdés, Diál. de la L.) hasta fecha tardía, pero el idioma se vio obligado a generalizar ventana, a causa de la homonimia con iniest(r)a ‘retama’ GENISTA; como los demás romances, incluso el cat., conservan FENESTRA, ventana no tiene otra palabra hermana que el port. ant. ventãa, ventã (así todavía en Mendes Pinto, med. S. XVI, ASNSL CXXVII, 375; KJRPh. IV, 339; y hoy en San Martín de Trevejo, RL XXVI, 252, 257), port. venta, que sólo significa ‘orificio de la nariz’2, gall. béntas ‘narices del caballo’ (VKR XI, 262) (para el cambio fonético, comp. campa ‘campanita de las naves de aviso’ < campã CAMPANA): dado que la ac. ‘ventana’ parece ser secundaria, es incierto; que ventana pueda ser calco de un gót. *WINDAUGO del mismo significado, como supuso Meringer (Idg. F. XVI, 126), y puso en duda M-L. (REW 9212) en vista del fr. ventail ‘respiradero del yelmo’, y Pas-de-Calais vãsel3; ventanaje; ventanal; ventanazo; ventanear, ventaneo; ventanero; ventanilla; ventano ‘ventana pequeña’ (muy vivo, p. ej., en Almería, ast. ventanu V, no en Aut., donde hay en cambio ventanico y ventanillo). Ventanera ant. ‘ventolera’ (APal. 141d, 160d).

Ventarrón. Ventear [Lucano de Alf. X (Almazán); 1604, G. de Alfarache], antes ventar [Cid; Alex., 579, 1817; J. Ruiz 873d; S. XIV, Aut.; hoy en Galicia, Pardo Bazán, Obras, ed. 1943, p. 1490, especialmente ‘oler, presentir’: «ouvearon os cans ventando a morte» Castelao 187.21, 203.9], que también se ha empleado alguna vez con el valor de ‘aventar’ o de ‘soplar el viento’ [1251, Calila, Rivad. LI, 32]; el cast. ant. ventar ‘descubrir’ no viene de VENTUS ‘venido’ (GdDD 7078a): inútil refutarlo. Venteadura. Perro ventero. Ventilar [APal. 375d; fin S. XVI, Aut.], tomado de ventĭlare íd.; ventilación; ventilador. Ventiscar [¿S. XIV?, Biblia med. rom., 1.2; 1613, Cervantes, Aut.]; ventisca [Berceo; princ. S. XVII, Aut.]; ventisco; ventiscoso; ventisquear; ventisquero ‘ventolera’ ant. (S. XV, Aut.; med. S. XVI, Lope de Rueda, RH VII, 252], ‘sitio alto donde se conserva la nieve’ [S. XVII, Aut.], en la Arg. ‘glaciar’ (J. F. Finó, La Prensa, 25-11-1940). Ventolera [S. XVII, Aut.]; ventolina [Acad. S. XIX], y de ahí ventola. Ventor ‘perro de caza’ [fin S. XVI, Argote de Molina; Lope; G. de Alfarache] parece suponer un fr. ant. *venteor (o fr. dial. *ventour). Ventorrero [Acad. S. XIX]; con este sentido emplean ventorrillo en Almería. Ventoso ‘vano, hinchado’ ant. [APal. 162d, 213b, 519d], ‘lo que se muda a merced del viento’ ant. [S. XV, Consolaciones del A. Luna, 566], ‘azotado por el viento’ [«cosa de viento» Nebr.]; ventosav. medicinal: cucurbita» Nebr.; comp. el artículo de Meringer, WS IV, 177-197]; ventosear; ventosidad. Aventar ‘echar al viento la paja al trillar, la ceniza, etc.’ [Alex.], ‘disparar una arma’ ant. [Alex.]4, ‘hacer viento’ [Nebr.], aventarse el ganado [«consternor» Nebr.]; aventadero; aventado; ast. aventáu ‘alocado’, V; aventador; aventadura; aventamiento; aventear; avienta; aviento. Redroviento. Sobreviento, comp. cat. sobrevent, ‘barlovento’.

CPT.

Vendaval ‘viento fuerte del Sur inclinado al Oeste’ [1519, Woodbr.; 1590, Acosta, Aut.], ‘cualquier viento muy fuerte’ (en Veracruz es viento del Norte según Jal), junto con el port. vendaval íd. [1453, 1504, Jal] y el vasco mendebal ‘viento Oeste’, ‘Oeste, punto cardinal’5, se tomó del fr. vent d’aval ‘viento de alta mar, viento Oeste’, así llamado por oposición al vent d’amont ‘viento del Naciente’, porque en Francia las tierras altas están a Oriente y las bajas al Poniente (etimología ya admitida por Aut. y Diez, Wb., 697).

1 En P 2248b, donde parece significar ‘viento, ventolera’, no es lectura segura, pues O trae ahí montaña.―

2 Sin embargo, según Vieira ventam se aplica también a las «aberturas das torres ou campanários, em que estam apoiados os sinos [‘campanas’]», y según Fig. significó antiguamente ‘ventana’, lo cual no puedo comprobar, y hoy ‘vejiga de cierto pez’. De ahí el trasm. ventos ‘resquebrajaduras en una piedra’, venteada ‘(piedra) resquebrajada’ (RL V, 108). El vocablo normal port. para ‘ventana’ ha sido siempre janela JANUELLA; antes también fiestra FENESTRA, todavía vivo en gallego (Castelao 219.7), que creo allí de extensión parcial, hacia el Miño, aunque también tienden a preferirle xanela.―

3 De ser cierta la idea de Meringer, estaríamos ante el mismo caso del port. laverca ‘alondra’, tomado del germ. LAIWERKO para evitar la homonimia entre ALAUDULA e HIRUNDINEM (vid. ALONDRA). Aunque en inglés y escandinavo el vocablo vale sencillamente ‘ventana’, de acuerdo con su composición (AUGO ‘ojo’ + WINDS ‘viento’) es probable que significara en su origen ‘respiradero’, como el cast. ant. ventana. De todos modos es harto dudoso que el gótico tuviera tal palabra, sólo documentada en escandinavo windauga, y quizá b. alem. windooge (el ingl. window es escandinavismo). Schuchardt (Roman. Etym. II, 4) expuso ya la idea de que ventana fué primero sólo el nombre de cierto tipo de ventanas; Baist, RF IV, 409, comparó con cercera ‘ventana orientada al Norte’, derivado de cierzo ‘viento Norte’.―

4 Comp. Alent. aventar ‘echar afuera’ (RL IV, 57), cat. dial. ventar ‘dar (un golpe)’ (Nordeste y Sur del Principado).―

5 El origen de éste es indudablemente romance según Schuchardt, BhZRPh. VI, 54, por lo tanto no está fundada la duda de Jud (Rom. XLIV, 294) acerca de la etimología tradicional. Del cast. pasó a la traducción italiana de Fernando Colón, y del portugués salió el it. ventavolo que emplea Sassetti (h. 1580) haciendo constar que lo toma del portugués (Zaccaria).