UZO, ant., ‘puerta’, del lat. vg. ȢSTէUM, lat. cl. ĶSTIUM íd.

1.ª doc.: uscio, doc. leonés de 1092 («levetis vestras portas et vestros uscios» M. P., Oríg. § 57.1).

M. P., Cid, p. 888, cita ejs. de uzo 1179, 1190, 1202, 1228; otro de uço en doc. burgalés de 1211 (Oelschl.). También está en el Cid («vío puertas abiertas e uços sin cannados», v. 3), en Sta. M. Egipc. («ell abat a todos pesa, / después les abre el uzo de la eglesia», v. 843) y J. Ruiz («la merca de tu uço Dios es que te la aduxo», 1490c). Después queda anticuado. El tratamiento ST? > ç es el regular en Castilla (la -z- de las formas citadas es grafía arcaica imperfecta); en León debe esperarse uxo, que es lo que significará la grafía de 1092, hoy pueblo de Uxo en Asturias (grafía oficial Ujo). Corresponden regularmente a la forma cast. el cat. uix ‘abertura en una cuba para entrar a limpiarla’, oc. ant. uis, fr. huis, it. uscio ‘puerta’, etc. (REW 6117). Como indicó M-L. (ZRPh. XXV, 356-8; Einf.3, p. 180), todas las formas romances, sin excepción, corresponden a una base ȢSTէUM, que efectivamente se encuentra documentada desde el S. IV (Ernout-M. y Walde-H., s. v. ostium). M-L. tomó en cuenta la posibilidad de que esta variante se explicara por una apofonía indoeuropea o por una reducción de fonética sintáctica latina en la combinación in ūstium (tal como sēd frūde = sēd fraude), pero ambas explicaciones son inseguras; como ōstium procede de un más antiguo ōustiom, acaso podría tratarse de una diferente reducción del diptongo arcaico, pero habiendo un caso paralelo en BզSTIA por BSTIA (vid. BICHO) es más probable que se trate de una metafonía temprana del latín vulgar, como admite Rohlfs (ZRPh. XLI, 354-5).

DERIV.

Ucera ant. (Berceo, Santo Dom., 709a: ucera parece significar ‘entrada de una cueva’, más que ‘cueva’, como admite GdDD 4721, deduciendo de ahí el nombre de lugar Ucero de Soria, por nacer este río en una cueva), hay equivalente uxera ast., ucheira en gall. ‘jamba que sostiene el dintel de una ventana’ (J. L. Pensado, Acta Salmant. n.º 51, p. 53). Alto Aller uxera «portilla de finca con quicio» (Rdz. Cast., pp. 106, 277). Orzuelo «instrumento que tienen los cazadores para coger vivas las perdices, que es a modo de una ratonera de agua, con su trampilla movible, y en poniéndose encima la perdiz, resbala y cae dentro, y vuelve la trampilla a quedar cerrada impidiendo pueda salirse» [1640, Mz. de Espinar, Aut.], «un género de cepo para prender las fieras por los pies» [Aut.]: lo mismo designan el port. ichó y el aran, ixò, que vienen evidentemente de *USTIOLUM, dimin. de USTIUM, como la palabra cast.; ésta sufrió el influjo del parónimo orzuelo HORDEOLUM. Ujier [uxier, h. 1580, Argote, Aut.], del fr. huissier íd., derivado de huis, introducido (como observa Mayans, Oríg. de la L. Esp. I, 98) de la terminología de la Corte de Borgoña por Carlos V: en efecto, Aut. sólo registra uxier como nombre de varios oficios palatinos, y como término de justicia es innovación posterior; para explicar el cambio de -iss- en -x- quizá no sea preciso admitir el influjo del cat. uixer (castizo y ya muy usual en la Edad Media) o del it. uscio, comp. la forma usier, preferida por Covarr. Ostiario es duplicado latino de ujier.

CPT.

ALTOZANO. Análogo a este es el derivado gall. ant. huschão ‘portezuela o ventana (que da a una era)’ que señala J. L. Pensado, op. cit., pp. 51-3, quizá extraído secundariamente de ANTE-OSTI-ANUM > altozano.