SAJAR, antiguamente jassar y sarjar, probablemente tomado del fr. ant. jarser íd., de origen incierto: parece tratarse de un derivado de jarse ‘sangría’, ‘lanceta’, que vendría del gr. χάραξις ‘incisión’ (derivado de χαράττειν ‘desollar’, ‘escarificar’), romanizado en *GÁRAXA; por razones fonéticas las formas castellanas no pueden venir directamente del griego ni del latín vulgar, sino a través del francés.
1.ª doc.: jassar, S. XIII, L. de los Cavallos, 38.25, 101.37; sajar y jassar, 1475, G. de Segovia (p. 49).
Otras etimologías pueden ya descartarse. Entre ellas incluyo la que propuse para el cast. sajar-jassar en 1937 (BDC XXIV, 28-29), sin haber reparado en el fr. ant. jarser: partía yo entonces del ár. vg. sáǤǤa «cicatriz, señal de herida, señal de golpe o açote» (PAlc.), disimilación del ár. literal šáǤǤa, derivado de šáǤǤ ‘herir’: no habría dificultad semántica, pero deberíamos tener z- en cast. y no s-3 (y también sería de esperar e y no a en el radical, comp. la pronunciación çegge documentada por PAlc.). Tampoco hay que pensar en SARCULARE ‘sacar las malas hierbas’, aunque éste haya dado sajar íd. en la prov. de León (Goy, Susarón, p. 501), etimología que no sería posible ni semántica ni fonéticamente en Castilla.
Comp. ZANJA.
DERIV.
Saja (V. arriba); gall. herba da sarxa ‘eléboro’ («porque sajan [con ella] el pellejo del animal al curarlo» Sarm. CaG. 137r); aun cuando Sarm. afirma que sarxa o xarxa es el nombre de la salvia en Galicia (CaG. 92v, 93v, A100v) y sarིa en Maragatería (149r), este dato, no confirmado por fuente alguna, no es creíble, pues sería imposible tal evolución fonética en gallego o en cualquier romance ibérico, y la afirmación no tendrá otro fundamento que una confusión de boticarios o herbolarios, por el empleo curativo de ambas hierbas. Sajado. Sajadura [jassadura, Nebr.]. Sajía [1555, Laguna].
1 Contrib., pp. 43-45. Da a entender éste que el étimo CHARAXARE no es incompatible con el carácter autóctono del cast. jassar: afirmación extraña que no creo tome el autor en el sentido de que la j cast. sea transcripción del sonido tardío de la χ griega; recuérdese que la j cast. fué palatal y sonora hasta el S. XVI, sin conexión posible con dicha consonante griega.― ↩
2 Pienso principalmente en el port. sarrafar ‘escarificar’ (ya çarafar en Mestre Giraldo, a. 1318), sarrafo «tira delgada de madeira», sarrafaçar «escarificar mal roçando e rasgando muito» (que de ninguna manera podrían salir de SCARIFARE, ni siquiera suponiendo una metátesis mozárabe *ECSARIFARE, como quisiera C. Michaëlis, RL XIII, 290-2). Teniendo en cuenta que la χ griega se transcribe varias veces, en préstamos tardíos, por la otra fricativa f (como en rhonchare > it. dial. ronfare, fr. ronfler, vid. aquí RUNFLA; parochia > paroffia; chalare > sardo falare ‘bajare’), sería posible, en cambio, el paso de CHARAXARE a *FARASSARE y luego sarafar. También recuerda esta familia romance el alto-arag. eskarasár ‘escarbar’, eskarasadór ‘palanca para el horno’ (RLiR XI, 162, 221), que no se relacionarán con el cast. escarzar, como quisiera A. Kuhn, pues de él están decididamente separados por el sentido y por la -s-; sin embargo, antes de asegurar que se trata de lo mismo que el suditaliano carassare, scarassare ‘abrir una grieta’, tendríamos que estar bien seguros de que Kuhn oyó bien la -r- (pues en sus materiales son harto frecuentes las confusiones de -r- y -rr-), ya que al fin y al cabo el sentido es diferente; también habría que aclarar la relación posible con el cat. escarrassar-se ‘derrengarse trabajando’, escarràs ‘armazón de listones para poner el pan’, en Mallorca ‘esquirla, astilla que se clava’: que éstos vayan asimismo con CHARAXARE tampoco está fuera de discusión, pero se hace más difícil teniendo en cuenta el cat. occid. y gasc. carràs ‘armazón de palos’, etc., que parecen procedentes de CHARACIUM (vid. ka࿉ás en mi Vocab. Aran.).― ↩
3 Verdad es que existe la variante zajar en Murcia (G. Soriano), pero ni siquiera en esta región es general: Ramírez Xarriá trae sajar «abrir con el bisturí un infarto cualquiera».↩