MANTO, del lat. tardío MANTUM ‘manto corto’, que a su vez es de origen incierto; parece haberse extraído del lat. MANTELLUM, que quizá fuese voz antigua en latín.

1.ª doc.: doc. de 923 (Oelschl.); Cid, etc.

De uso general en todas las épocas1. Entre los romances sólo heredaron este vocablo el castellano, el portugués y el italiano [Dante, Petrarca, G. Villani]2. En latín se halla MANTUS, -ȢSl>, como femenino en Probo, mantum «amictum breve» en San Isidoro y en varias glosas; el santo nos informa de que así lo dicen los Hispani, lo cual no deberá entenderse como equivalente de iberos o hispanos prerromanos, sino sólo como indicación de la conciencia de que era voz ajena al latín clásico3. Más antiguo es el sinónimo MANTELLUM, único conservado en todos los romances de Occidente (V. abajo mantillo), salvo el portugués; en latín aparece como hápax en Plauto, en el sentido de ‘encubridura, capa (para ocultar mentiras)’: ahora bien, Servio al comentar este pasaje emplea la variante mantēlum. Es posible que tenga razón G. de Diego (RFE VI, 287) al admitir que éste es lo mismo que mantēlum, mantēlium, mantēle, que con todas estas variantes se halla desde antiguo el vocablo, corriente en latín, para ‘mantel’, ‘toalla’, ‘paño de secar’4; desde el punto de vista semántico es tesis admisible, pues mantelum, -ele, se empleaba también como paño para envolver objetos («in mantelis unguenta contigerunt», Fratres Arvales), en Arnobio parece designar una prenda de vestir, etc. Entonces mantelum habría pasado a mantellum como querela a querella, camelus a camellus (comp. phaselus > faseolus), y luego mantum se habría sacado de ahí en calidad de seudoprimitivo. Luego, sin descartar la posibilidad de que MANTUM en latín sea préstamo de otro idioma (comp. MANTECA), la tesis de la latinidad fundamental del vocablo cuenta con buenos argumentos5.

DERIV.

Mantear ‘salir mucho de casa’. Mantón [S. XIV, Rim. de Palacio, 332; APal. 269b; Quijote; comp. cat. ant. mantó arriba], para el uso actual, Amunátegui, BRAE X, 453. Manta [doc. de 969, Oelschl.; 1155, Fuero de Avilés6; Berceo, etc.; ‘pañuelo de cabeza’, 1288, Acedrex, 376.23; «manta de cama: lodix; manta de pared: auleum», Nebr.], derivado común al castellano con el portugués, catalán7 y lengua de Oc (ahí ‘especie de manto’, ya común en la Edad Media)8: el sentido primitivo parece haber sido ‘especie de manto’, de donde ‘manta de viaje’ y finalmente ‘manta de cama’ (en italiano es castellanismo ocasional: Zaccaria; pasó también al mozárabe, Palc., quizá Almacarí, vid. Simonet)9; gall. manta ‘banco de peces, tropa de múgiles’ (Sarm. CaG., p. 203); mantear [1599, G. de Alfarache], manteador, manteamiento y su sinónimo manteo; mantero, mantera; mantés ‘picaro, pillo’ [1868, como provincialismo cordobés, Aur. Fz. Guerra, El Averiguador, 186810; Acad. 1884], probablemente derivado de manta, con el sentido de ‘aficionado a yacer envuelto en una manta’, comp. cat. del Ebro mantós11, val. manter ‘dejado, perezoso’12, murc. mantillón ‘desaliñado, sucio, sin aseo’ [Aut.], que en Méjico ha tomado la ac. ‘sinvergüenza’; mantudo o mantón adj. Mantillo [-iello, Apol., 630d; «prestennia... mantillos que fasta hoy usan las mugeres de Arabia», APal. 381b], hermano del cat. mantell, oc. mantel, fr. manteau, it. mantello (V. arriba), raro en castellano (falta Aut.): hoy se conserva en la ac. ‘capa de materia vegetal negruzca en el suelo cultivado’ [con la cual compara Unamuno, en sus ingentes versos, el Cristo de Palencia], y en Sanabria como nombre de la toca típica de las mujeres (Fz. Duro, Mem. Hist. de Zamora), en otras provincias del Norte la forma de origen extranjero mantelo ha pasado a ser una especie de delantal (Acad. 1884, no 1843); mantilla [1552, López de Gomara, Aut.], de ahí el fr. mantille [S. XVI], it. mantiglia, port. mantilha; mantilleja; mantellina [APal. 420b; Pícara Justina en Aut.]. Del fr. ant. mantel ‘manto’ se tomó el cast. mantel como término heráldico, del donde mantelado; de la forma más moderna manteau viene manteo [Agustín de Salazar, † 1675], de donde mantehuelo y manteísta; mantelete, término de blasón [1725, Avilés] o de fortificación [Aut.] o de vestidura, del fr. mantelet; manteleta [no Aut.; h. 1800, Jovellanos en Pagés, quien además cita un romance]; desmantelar [h. 1570, Ercilla], del fr. démanteler; desmantelamiento. Enmantar. Somanta ‘tunda’ [Acad. ya 1817], probablemente derivado de manta en el sentido de ‘zurra aplicada (a un niño llorón p. ej.) debajo de las mantas de la cama’ o por la idea de cubrir de azotes13. Somantu ast. ‘regazo’ (Vigón).

CPT.

Mantaterilla, compuesto con tirilla; mediamanta cub. ‘especie de turrón melcochado’ (Ca., 267).

1 Berceo, Mil., 851c, S. Dom., 493; también en Apol., J. Ruiz, etc.―

2 Pasó pronto al catalán, gracias al influjo conjunto del castellano y el italiano. Ya se halla a menudo en el Tirante y en inventario de 1430, en ambos asegurada la acentuación por el plural mantos. En otros ejs. más tempranos (Turmeda, Bons Amon., 151; invent. de 1385, Misc. Fabra, 174) podría tratarse de mantó, con sufijo (¿diminutivo?) -ONEM, puesto que mantonet se halla varias veces desde princ. S. XV (Ag.). Claro que manto no puede ser autóctono en Cataluña, pues en esta posición no se conserva la -o. No existe el mant citado por M-L. En italiano no es ajeno a los dialectos: Servigliano mantu «velo (con cui alcuni nascono)», ARom. XIII, 258.―

3 Sofer, 144-5, cree que es voz céltica, y aunque le siguen varios etimologistas modernos (Hofmann, etc.), no da para ello razones positivas. En la baja época parece haber sido voz muy extendida, pues se halla en fuentes itálicas (Edicto de Diocleciano) y otras al parecer galorrománicas (cita de Arles en Sofer, de un doc. de 542 en Diez, Wb., 203); pero también aparece temprano en España: S. Isidoro; doc. de 780 (en Diez).―

4 Mantēlum puede explicarse etimológicamente en latín. Parece comprobada la existencia de esta forma como la más antigua, por el testimonio de varios autores arcaicos (ThLL VIII, 332.26; Walde-H.).―

5 Ac. secundaria ‘máquina defensiva de guerra que servía para cubrir a los que atacaban los muros de las ciudades’, Gr. Conq. de Ultr. (fr. manteau, b. lat. mantum). En el mismo sentido manta en APal. 7b, 135b, 528b, y en Nebr. La ac. mineralógica, p. ej., en Cartagena, BRAE XXII, 489.―

6 «Nullius homne qui sacar armas esmoludas vel espadas nudas, de fora manta, contra suo vezino, pectet LX solidos», línea 34.―

7 «Suplic lo rei de pau / que·ns abric en la seu manta», Turmeda, Div. de Mall., 142. En la Edad Media sólo como sinónimo de ‘manto’; hoy sólo se emplea para ‘manta de viaje’ (no ‘de cama’), lo cual quizá sea castellanismo.―

8 Ya se lee en una epístola latina dirigida a Carlo Magno, vid. Fz. Guerra, F. de Avilés, s. n. manto.―

9 La locución a manta ‘en abundancia’, también catalana, es popular en Aragón, en Vizcaya y en muchas partes. Quizá proceda de manta de palos, de azotes, que Aut. ya documenta en el judío portugués L. de León, h. 1690. Variante a manta de Dios, para la cual vid. El Averiguador, 1868, 263-4. No creo que sea, como se ha supuesto, catalanismo procedente de mant ‘muchos’, ‘varios’.―

10 Este artículo, que trata también del origen, no está a mi alcance.―

11 «L’hivern... és el temps de les gallines mantoses, i ara no ponen», Bladé, Benissanet, en La Nostra Revista VI, Méjico, 1952, p. 455.―

12 «Casi totes les casades se tornen manteres y pereoses, que si pòden ja no alcen una palleta de térra», M. Gadea, Térra del I, 303.―

13 Según Spitzer, BhZRPh. LXVIII, 317 (y Litbl. XLII, 400), sería derivado de soma ‘carga’ (SAGMA) con el mismo sufijo de carpanta, comp. «cat. somaina ‘paliza’»; pero no conozco tal palabra cat. ni figura en las fuentes lexicográficas (si existe será cruce de somanta, también empleado en cat., con otro vocablo); soma no es palabra cat. ni cast. (sólo figura en Oudin, donde es galicismo ocasional); y -anta no es sufijo en carpanta. El alto-arag. lomanda ‘paliza’ (RLiR XI, 214) parece ser somanta, pronunciado -anda según la fonética local, con influjo de lomo.