GIBA, tomado del lat. gĭbba íd.

1.ª doc.: APal. 122d («dromedarius... rumia como camello y... tiene diferencia en la giba»), 180dgibbus es corcoba o gibba [sic] levantada en el espinazo»).

De uso frecuente ya en el Siglo de Oro (Covarr., Quevedo), y J. Hidalgo (1609) le da el valor jergal de ‘alforjas’. Quizá no sea casual el hecho de que aparezca antes giboso, más necesitado como eufemismo, del cual acaso se extrajo giba por derivación retrógrada, según el modelo de corcova y joroba; en latín gibbus es más frecuente que gibba. La introducción de estos latinismos se debió al deseo de evitar expresiones humillantes para el afectado, si bien con el tiempo giba se ha hecho tan cruel como sus sinónimos populares. Hoy en muchas partes (p. ej. Almería) es más popular que JOROBA. En portugués, geba ‘giba’ y gebo ‘giboso’, y en catalán gep ‘giba’ y gepa ‘giba grande’ (y ‘giba’, en Valencia, etc.) son formas populares; del catalán, y quizá del arag. chepa ‘jorobado’ (Borao), pasó chepa ‘joroba’ al murciano (Ramírez Xarriá) y, como expresión familiar y pintoresca, al asturiano (Rato) y más o menos al uso general español, Acad. 1899, no 1822. También se empleó cheba: RH XVIII, 56, gall. ferrolano chepa ‘panchoz, pescado de forma abultada’ (Sarm. CaG. 220v y p. 220). Para otros representantes españoles y romances, V. AJOBAR; FEW IV, 132-3.

DERIV.

Giboso [S. XIII, ms. bíblico, Bol. Inst. Filol. Ch. IV, 427; Glos. de Toledo], de gibbōsus íd.; también gibado; gibosidad. Engibar. Partiendo de la ac. ‘molestia, incomodidad’ que tiene a veces giba, se formó el verbo gibar ‘fastidiar, molestar’ (comp. jorobar), que por influjo de chepa y de la etimología popular chivo, se pronuncia chibar en León, Cuba, Méjico, Honduras, y en el caló general (BRAE II, 641; VII, 469; Pichardo). Agibarse o agiebarse [?], santand., ‘agacharse’.