FOJA, ‘ave zancuda, Fulica atra, semejante a la cerceta’, del cat. fotja íd., que parece ser forma mozárabe de Valencia y Mallorca, procedente del lat. FULIX, <l=lat.>-էCIS (variante de FŬLէCAl>) íd.

1.ª doc.: foxa, 1577, en el aragonés-valenciano Bartolomé de Villalba, El Peregrino Curioso, 65; foja, Covarr.

Dice éste «ave de lagunas, y ribera de la mar; de éstas ay muchas en el albufera de Valencia, y entran con unos arquillos y a bodocazos las derruecan con los arcos». Aut. cita solamente la autoridad del murciano Diego de Funes (1621), escribiendo foxa1. Como se ve, todos los testimonios castellanos son demasiado tardíos para determinar si tenía antiguamente la sonora j o la sorda x, y todos ellos se refieren a Valencia o a Murcia, sugiriendo procedencia catalana. El traductor de Robert de Nola (1525) lo considera palabra ajena al cast.: «ánades salvajes, que en Valencia llaman fotjas» (p. 90). En efecto, en catalán hay documentación más antigua: fotja está ya en Eiximenis (1381-6)2 y en J. Esteve (1489). Pero es verdad que no se ve camino para explicar fotja como representante fonético catalán de FŬLէCA, como ya indicaron M-L. (REW 3557), y Tallgren (Glanures Cat. II, 27), lo cual conduce a Wartburg (FEW III, 843) a suponer que así en catalán como en castellano el vocablo se tomara del sic. forgia. En realidad, si no es fácil comprender el cambio FULICA > fotja en catalán, las dificultades fonéticas en siciliano son mucho mayores; la forma más común en este dialecto es foggia (Traina), idéntica fonéticamente a la catalana, y forgia quizá no sea más que una alteración por etimología popular; pero cualquiera de las dos variantes que se tome como básica, es imposible llegar a ella según la fonética local, sea partiendo del clásico FÚLICA o de su variante FULIX (Cicerón; CGL V, 360.38), FULICE (CGL IV, 79.25; funicae IV, 520.34): en efecto, la Ŭ daría u en siciliano, la I postónica debiera conservarse y la C intervocálica no se podía sonorizar en esta habla del Sur de Italia3. Por lo demás, el catalán no se enriqueció con sicilianismos durante la dominación catalana en Sicilia, sino con algún italianismo, pero el siciliano tomó ciertamente bastantes vocablos catalanes; luego no hay duda que foggia es uno de ellos. El problema fonético se despejaría si existiera una forma francesa u occitana *fouge o *folja (resultante regular de FULICA según la fonética de estos idiomas), pero lo único que Wartburg ha hallado es oc. ant. folca y prov. foulego, de los cuales quizá sea hermano el cat. ant. folges, en doc. rosellonés de 12754, plural cuyo singular será folga. Pero la forma normal catalana es fotja5. Para explicarla debemos tener en cuenta la gran abundancia de fojas en las Albuferas de Valencia y de Alcudia, ya atestiguada por Covarr.; Eiximenis también vivió gran parte de su vida en Valencia y creo que J. Esteve era valenciano. De allí ha de proceder el vocablo, y como término mozárabe no hay dificultad en explicar el cambio de FŬLէCEM (de donde vienen también el it. folice y el modenés foldza), primero en *fóleƇa y luego *fola, sonorizándose la Ƈ, sea como intervocálica o por influjo de la pronunciación arábiga; tampoco la desaparición de la l tras o puede sorprender en mozárabe, donde se hallan formas como faȮƇél FALC-ELLU, <l=alt.>šáuš SALSUM, <l=alt.>ȮɊ = cast. balsa, Ȯma = palma, šaȮt = soto, tau_V%pa = topo, además de que puede tratarse de una reducción catalana como en sofre SULPHUR, om ULMUS, el dialectal cotze por colze, etc.

Nada tiene que ver con foja o FULICA el valencianismo ALHOJA ‘alondra’ (vid.), contra lo que supuso Cabrera, p. 14. El arag. focha ‘gallina de agua’ (Borao) viene también del catalán de Valencia; una forma floja citada por M-L. ha de ser alteración castellana por etimología popular. G. de Diego, que erróneamente cree se trata de una ave marina o gaviota, quiere partir de la forma focha, al parecer suponiéndola de origen gallego, y postula una base *FŬLCŬLA>, diminutivo de un FULCA, que él supone documentado (?): Contr., § 273; pero está claro que la forma reciente focha es secundaria. El duplicado culto fúlica está ya en Acad. 1843.

1 Las tentativas de hallar documentación anterior han sido inútiles. El vocablo no figura en la copiosa enumeración de aves objeto de caza que se lee en el Libro del Caballero e el Escudero de D. Juan Manuel (p. 250), ni en las similares de López de Ayala, Libro de la Caza, ed. Bibl. Esp., pp. 48, 51, o en el capítulo 45 del mismo libro, donde debiera figurar, pues enumera las aves de paso. Un examen rápido del Libro de la Caza de las Aves de D. Juan Manuel tampoco ha dado resultados.―

2 «Tords grossos, tudons, fotges e carn de caça», Terç del Crestià, N. Cl. VI, 51.―

3 Comp. PULէCEM > sic. pùlici, CIMէCEM > cìmicia.―

4 RLR IV, 358. Quizá sea idéntico el documento de la misma procedencia que Ag. fecha en 1278 y que el editor de este dicc. ha creído poder singularizar en folja (?). Hoy en el Rosellón se dice folliga (Companyó, citado en BDC X, 73) o foliga, que no puede acentuarse fòliga, como se hace en el dicc. Ag., puesto que el rosellonés actual no posee palabras esdrújulas.―

5 He oído f࿀Ƈཙ en el Prat de Llobregat, y me señalan f࿀Ƈa en Carlet, al SO. de la capital valenciana. Alcover recoge f࿀ཡཙ en los pueblos mallorquines de Alcudia y Artá (BDLC VI, 32; IX, 39), y en su dicc. señala fòtja en muchos pueblos valencianos. Es regular el cambio de Ŭl> en o abierta en sílaba inicial (Estudis Romànics III, 208), y el ensordecimiento moderno de la es general en Carlet y corriente en el Prat. Hay una pronunciación rústica mallorquina fòrja (Alcover), coincidente con la variante siciliana, cuya r no aseguraré que continúe la L del étimo.