FILATERÍA, ‘palabrería’, ‘tropel de palabras que un embaucador ensarta para engañar’, antes filatéria, tomado del lat. phylactērĭa, plural de phylacterium ‘pedazo de pergamino con versículos de la Biblia, que los fariseos y judíos medievales llevaban como amuleto o como atributo religioso’ (V. FILACTERIA). Observa Spitzer que esto no es sólo de los judíos medievales, pues siguen haciéndolo los de ahora en sus plegarias cotidianas de la mañana.
1.ª doc.: 1525-47, Sánchez de Badajoz.
Moraes cita como portugués phylactérías, empleado en esta forma o en la variante estropeada filastérias, por Paiva de Andrade (h. 1600) en el sentido etimológico; en el de ‘sutilezas’ «usar das phylacterias da industria» en el Conde da Ericeira; en el de ‘amuletos o remedios supersticiosos’ en dos textos en bajo latín; «minucias e sutilezas misteriosas e supersticiosas» en Ferreira de Vasconcellos (1547), vid. Moraes, s. v. fi- y phy-. En italiano se empleó filatèra (o filattèria) en el sentido de ‘retahila, cantidad de cosas’ desde Fr. da Barberino († 1348) hasta Buonarroti (princ. S. XVII). Es evidente que del sentido de ‘amuletos, remedios supersticiosos’, ‘inscripciones de palabras mágicas’ se pasó a ‘retahila de palabras del embaucador’ (comp. el sentido peyorativo tomado por otros términos mágicos en castellano, como CARANTOÑA o EMBUSTE). Así REW, 6473a. Aunque Covarr. admitió la relación con phylacterium, yerra al partir del sentido de ‘cenefa’, y rechazar una interpretación análoga a la que doy, aunque la apoya él mismo con citas de San Jerónimo y Nicolás de Lira. Para el uso en francés antiguo, vid. DGén., s. v. (nada en Blondheim). Inútil decir que nada tiene que ver con hilo, a pesar de Covarr., Aut. y la Acad. El sentido abstracto que había tomado el vocablo hizo que pasara a las palabras en -ería trasladando el acento. De ahí que se creara luego un secundario filatero ‘el que usa de filaterías’ [Aut.], que ya existiría antes, pues en la jerga germanesca, según ya observó J. Hidalgo en 1609, se interpretó popularmente en el sentido de ‘ladrón que hurta cortando alguna cosa’ (por la cuerda o hilo que cortaba), y de ahí se sacó un verbo filar «cortar sutilmente».
DERIV.
Filatero y filar, vid. arriba.