ENGASTAR, ‘embutir una cosa en otra, como una piedra preciosa en un metal’, del lat. vg. *INCASTRARE ‘insertar, articular’ (de donde INCASTRATURA, INCASTRATOR en textos vulgares y tardíos), de origen incierto, quizá alteración de un *INCLAUSTRARE que sustituiría al lat. INCLUDĔRE ‘engastar’; la forma española es una alteración de encastrar debida a influjo del antiguo sinónimo engastonar, derivado de gastón ‘engaste’, que a su vez se tomó del fr. ant. y dial. caston íd. (hoy chaton), procedente del fránc. KASTO (alem. kasten) ‘caja’.
1.ª doc.: APal. 208b1, 534b; Nebr. («engastar como en oro: celo»).
INCASTRARE perteneció indiscutiblemente al latín vulgar, pues incastratura ‘inserción, articulación (de una mesa con otra)’ figura ya en la Vulgata, y el gramático Virgilio (S. VII) compara las conjunciones con una incastratura; el vocablo está documentado también en varios glosarios antiguos, entre ellos los atribuídos falsamente a San Isidoro (CGL V, 589, 32; 620.14; 266.49; 490.15; 590.1; IV, 486.25), siempre en el sentido de ‘articulación’ («ancones, anconiscos»), e incastratores figura en el Liber Glossarum redactado en España h. el año 700 (CGL V, 24). Esta antigüedad, no posterior al S. IV, bastaría para dudar de un origen germánico del vocablo (además KASTO no explicaría la r), pero hasta ahora no se ha dado explicación satisfactoria de la formación latina de *INCASTRARE. Si la vieja derivación de CASTRARE ‘cortar, mutilar’ no satisfacía, tampoco puede contentarnos la de CASTRUM ‘campamento fortificado, ciudadela’, que admiten sin titubeos Antoine Thomas (Rom. XXXVIII, 387), M-L. (ZRPh. XXXIV, 126; REW, 4344) y Wartburg (FEW II, 478a); el primero relaciona oc. encastre, fr. ant. enchastre, «châssis», «enceinte», «compartiment dans une huche» con los cerea castra ‘colmena’ de Virgilio, pero claro que esta expresión ‘campamentos o fortalezas de cera’ es una mera metáfora poética que no puede servirnos, y por lo demás no se enlaza de cerca con el sentido de ‘articular’ o ‘engastar’; menos me persuade aún la explicación de Wartburg INCASTRARE = aneinander befestigen; la índole abstracta del vocabulario derivado alemán (donde festung ‘fortaleza’ se codea con befestigen ‘sujetar’ y lager ‘campamento’ está junto a lage ‘situación’, p. ej.) se presta a esos equívocos y a esos escamoteos verbales, pero pocos admitirán que ‘engastar’ o ‘articular’ sean propiamente ‘construir una fortificación junto a otra’, o ‘encerrar (la joya) en una ciudadela’: el pensamiento popular no es tan gongorino.
Por otra parte si nos fijamos en que el oc. ant. encastrar se decía de las reliquias de santos (un dedo, un brazo, un pedazo del lignum crucis) encerrados en un relicario (vid. Levy, s. v.; Du C., s. v. incastamentum, incastare), y aun se podía decir en el sentido general de ‘meter’ (flors en gaugz s’es encastratz, flors en purtat encastrada), nadie extrañará que lo relacionemos con el b. lat. inclaustrare ‘encerrar’, inclaustrum ‘ámbito del monasterio’ (fr. ant. enclo(i)stre), derivado de CLAUSTRUM ‘clausura’, ‘encierro’, lat. tardío CLAUSTRA f.; tanto menos cuanto que ‘engastar’ se decía includere en latín clásico (smaragdi auro includuntur), inclaudere, inclausus, en la latinidad tardía (ThLL VII, 949.50ss., 957, 48-50), de suerte que todo el mundo tenía bien viva la noción del nexo inmediato entre claustrum y éste inclausus, y en el pasaje citado de la Vulgata hubo quien corrigió incastratura en inclaustratura; por otra parte includere era también el vocablo para ‘articular’ en términos técnicos («in arte mechanica»: ThLL VII, 954, iii), con el significado del it. y lat. vg. incastrare. La reducción de -claustr- a -castr- (quizá ayudada por la etimología popular que los citados filólogos toman por etimología real) tiene explicación fonética en la disimilación de las dos líquidas (como en TEMBLAR TREMULARE) y la reducción del complejo nexo implosivo -austr- a -astr- (comparable a los oc. anta, farga, entenerc, gay, en vez de aunta, faurga, entene?rc, ga?y). De hecho la reducción de CLAUSTRUM a clastrum está documentada en las Actas de San Benito (Du C.) y el caso paralelo en CLAUSTRA aparece en el cat. or. y mall. clasta ‘patio’, cat. ant. clastra, aran. crasta ‘ayuntamiento, casa capitular’ (vid. Festschrift Jud, 566), con toda la numerosa familia que Wartburg coloca erróneamente en su artículo CASTRUM: Aveyron castre «petit parc dans une étable où l’on enferme les veaux», gascón de Comminges crasto ‘cárcel’, Delfinado clastroun (nótese la l), Niza castroun «loge à cochon», langued. encastrà ‘encerrar a los corderos aparte de sus madres’, Lozère, Velay chastra ‘colmena’, etc.4. Por otra parte caustra por ‘claustro’ está en la Crón. Troyana en gallego del S. XIV (II, 105.1). Comp. lo dicho s. v. CÁRCAVA.
DERIV.
Engastador. Engastadura. Engaste [APal. 423b]. Engastonar, vid. arriba.
1 «Inclusor... es el que en oro engasta piedras precioses».― ↩
2 Hablando de una haba que se pega a los dientes, Saisset, Perpinyanenques, 94. Esta ac. y la localización rosellonesa hacen muy improbable un origen castellano, aunque lo normal en catalán es encastar. Engastament ‘engaste’ se lee también en el mallorquín Oleza, ms. de 1536.― ↩
3 En lengua de Oc para explicar la falta de r se puede pensar en el influjo de (en)cadastar íd., derivado de cadasta (REW 1762).― ↩
4 Posiblemente por ultracorrección nació el b. lat. inclaustrum, it. inchiostro, ‘tinta’, de ENCAUSTUM. Hay también variante inclastrum, vid. Du C. ↩