CAUCE, del lat. CALIX, -էCIS, ‘vaso para beber’, ‘tubo de cobre o bronce en las conducciones de agua’.
1.ª doc.: En el bajo latín hispánico se halla calice desde 932 y en castellano calze desde h. 1140 ‘conducto descubierto, acequia’, Aebischer, RFE XXXVIII, 240-6; calçe, 1063, M. P., Oríg., 317; cauze, 1475, G. de Segovia, 83; comp. la grafía ultracorregida cabçe en Juan Ruiz, 778c, rimando con sabçe ‘sauce’.
En gallego-portugués se produjo un acercamiento entre varios homónimos, o más bien parónimos de este vocablo, acerca de los cuales proporcionó J. da Silveira, RL XXIV, 202-7, valiosos datos y útiles ideas, aunque no logró desatar el nudo. El portugués alcouce significó ‘prostíbulo’ y se aplicó también a varios nombres de lugar; Viterbo ya documenta esta ac. en docs. antiguos y en la toponimia se aplica a lugares donde hay conducciones de agua. No hay duda de que tiene fundamento la etimología del Padre Moura, ár. qáȬs ‘arco, bóveda’, que es palabra bien popular en hispanoárabe1 y al- es indicio claro de arabismo en una palabra de esta forma; la evolución de ‘bóveda’ a ‘lugar donde se fornica, lugar donde actúa una pareja desvergonzadamente’ es la misma del lat. fornix ‘bóveda’ y ‘lugar de fornicio’. Sobre todo, hubo en Coímbra una puerta de la muralla morisca mencionada como «porta quae arabice dicitur Alcous» en docs. desde el S. XII, y más tarde Porta e Arco de Belcouce o Valcouce (S. XIII), Belcoyce (SS. XV y XVI); Gonçalvez Viana explicaba la B- por la preposición árabe locativa b(i)-; Silveira (citando P. de Avalcouze, -ozi en docs. de 1220 y 1230, forma de aglutinación con la a- locativa o artículo árabe a(l)-) quisiera partir de Abu Ȑl- qaȬs ‘el del arco’ (propiamente ‘el padre del arco’)2. En realidad es Bêb el-qáȬs ‘puerta del arco’, que vulgarmente se contraía en B’el-qaȬs (V. lo que digo en BARBACANA y la toponimia urbana de Valencia y Mallorca da muchas pruebas de tal contracción).
Pero el problema más importante lo plantea el hecho de que los topónimos Alcouce no se encuentran en su mayoría en la zona de toponimia arabizada, sino en las tierras desde el valle del Mondego para el Norte: hay 8 entre este río y el Ave, 3 entre éste y el Miño y 6 en el Sur de Galicia (desde Pontevedra hasta Pobla de Trives)3. Por ello cree Silveira que en realidad, en todos estos nombres de lugar, se trata de CALէCEM ‘cauce’, de donde ‘canal derivado de una fuente’, etc. Pero también tropieza esto con la grave objeción fonética de que CALէCEM no podía dar más que cauze, con -z- sonora en portugués y con au y -e conservados, cf. sauze y la documentación indicada arriba para el cauce castellano; además de que entonces al- no se explicaría. En realidad se trata pues de la superposición y suma de dos palabras de sentido y forma semejante: CALէCEM y el árabe al-qaȬs ‘arco’, ‘arcada’, ‘acueducto’: la toponimia proporciona docenas de ejemplos en que Los Arcos, o el cat. Els Arcs, Els Arquells, han pasado a designar un acueducto; por otra parte, la frase port. dar alcouce ‘lugar donde se peque carnalmente’ se prestaba a la idea de ‘encauzar un acto ilícito’ y como en portugués se han empleado como perfectos sinónimos alcouceira y alcoviteira (= alcahueta), la confusión era casi fatal.
Por otra parte, Silveira enreda demasiado esta cuestión con la de otro parónimo: el gall. couso y el nombre de lugar portugués Cousso, representado en una treintena de lugares del país vecino y muy documentado desde el S. XI (y aun alguna vez en el S. X y en 897); siempre que aparece en documentos antiguos de grafía cuidadosa, la ss es doble y hoy es sorda; en gall. hay couso, que Cuveiro define «sitio a propósito para correr y hacer montería y cacería»; y aunque esta definición no es muy de fiar en su detalle, tratándose de Cuveiro, debe de haber ahí bastante de cierto, no sólo en vista de que la repite Vall. y es la que más o menos permite inducir la documentación local portuguesa; para Vilar de Bos (valle de Verín, gallego extremo SE. [Silvio Santiago]) el Apéndice a Eladio define ‘parcela pequeña dedicada al cultivo de legumbres’. Como cosso, además de ‘lugar para comer, para carreras’ ha significado ‘solar’ y ‘pequeño campo de labranza’, y como cosso CURSUS se rozaba en su forma y sentido con coto ‘lugar cerrado o acotado’ y ‘lugar de cacería’, está claro que tenemos ahí un cruce de cosso CURSUS con el gall.-port. couto ‘coto’; es posible que además contribuyera algo a ello el contacto con alcouce ‘cauce’, ‘canal’ y ‘bovedilla’, pero este contacto debió de ser menor y meramente parcial. En todo caso es seguro que yerra Silveira al postular como base un CAUSUM participio de CAVERE (como lo fué CAUTUM > couto): ni esto podía dar fonéticamente más que *couso, con -s- sonora y sencilla, ni tal formación participial, partiendo de un verbo en -VERE, es concebible en la morfología latina ni en la romance (Silveira fía en exceso de formas latinizadas que halla sólo en Du C.).
DERIV.
Caucera o cacera. Encauzar [ya Acad. 1884, no 1832]; encauzamiento. Socaz. Además vid. CAUCHIL.
1 Del plural al-aqwâs sale el nombre del pueblo de Alaquàs en la Huerta de Valencia, donde hubo un acueducto, etc. No hay que pensar en ȟuɊɊ como dijeron otros y rechaza Steiger, Contrib. 228n., imposible por el ou y aun por la k.― ↩
2 Supone él una pronunciación (A)bū al-qaȬs, lo cual es arbitrario, al menos en cuanto a al-: no existe otra pronunciación que AbuȐl.― ↩
3 Silveira mezcla con esto Alkoz, nombre de lugar navarro de origen vasco y sin relación con ello. ↩