CAPOLAR, murc. arag., ‘cortar menudamente’, ‘abrumar a golpes’, del lat. vg. *CAPPULARE (lat. tardío CAPŬLARE) ‘cortar menudamente’.
Aparece en dos autores del S. XVII procedentes del reino de Murcia: Saavedra Fajardo (de Aljezares, prov. de Murcia) y Cristóbal Lozano (Hellín). Hoy se registra como voz murciana (G. Soriano) y aragonesa (Peralta, Borao). Es la prolongación del cat. y oc.
capolar íd., fr. ant.
chapler ‘quebrantar (con las armas)’. El vocablo latino aparece en textos merovingios (Antimo;
Leges Burgundionum;
caplare, en Pomponio Mela, es inseguro) y en glosas (
CGL VI, 179;
ALLG VIII, 448); hay también
cappellare en Antimo y en otra glosa (M-L.,
Litbl. LII, 57;
CGL V, 564.5), y un derivado
concipilare (o
-pulare,
-plare) íd., desde Plauto, que prueba que el vocablo tenía antiguamente
-p- sencilla (nótese la
-ĭ-). Sin embargo vulgarmente se duplicó la
-p- con finalidades expresivas, como en otras voces de la misma familia (V.
CAPÓN,
CHAPA).