CALAFATEAR, del antiguo calafatar, palabra común a los principales idiomas mediterráneos medievales ―catalán, lengua de Oc, italiano, árabe y griego―, oriunda sin duda de uno de los dos últimos, probablemente del ár. qálfaƫ íd., que a su vez es de origen incierto, quizá procedente del lat. vg. *CALEFARE (lat. CALEFACĔRE) ‘calentar’, por ser la operación de derretir el alquitrán, sometiéndolo al fuego, una de las más importantes que practica el calafate.

1.ª doc.: calafatear, Partidas, y h. 1300 (Gr. Conq. de Ultr.); calafetear, h. 1380, López de Ayala; calafatar, 1540 (contrato privado); calafetar, 1525-47, Sánchez de Badajoz1.

Jal, 381-2; Engelmann, en Dozy, Gloss., 376-7; Devic, 24; Simonet, s. v. cálfath y calafáth; Vidos, Parole Marin., 263-6; Terlingen, 234-5; Corominas, Symposium, 1948, 118n. 6. El cat. calafatar es ya frecuente en el S. XIII (Alcover), y oc. calafatar e it. calafatare son de la misma fecha; junto a ellos hallamos el sustantivo cat. calafat [Consulado de Mar, cap. 8, y otras fuentes del citado siglo], oc. íd., it. calafato [1213, Génova]. El gr. καλαưατέω y su familia son de fecha algo más temprana (καλαưάτƓσις ‘calafateo’ ya en 959, καλαưάτƓς ‘calafate’ en 1057 y ya en papiros tardíos); en cuanto al árabe, qálfaƫ ‘calafatear’ no aparece hasta el S. XIII (R. Martí), pero la variante Ǥálfaƫ ya está en una carta de Omar I (634-44, d. C.), y el sustantivo qalafâƫ ‘calafate’ fué apodo de un poeta cordobés del S. IX (según el Bayán Almogrib) y figura en Abenalauam (Sevilla, S. XII) y en R. Martí; por lo demás el verbo qálfaƫ se emplea hoy en Argelia y en Oriente, qalafâƫ es magrebí y Ǥilfâƫ ‘calafate’ corresponde al árabe oriental; junto a estas formas existe qállaf ‘calafatear’ en diccionarios del árabe clásico (Freytag). Se suele derivar este vocablo del sustantivo qilf o qílfa ‘corteza de árbol’, lo cual sería posible si sólo existiera qállaf, pero la ƫ de las demás formas no podría explicarse según el sistema de derivación arábigo2; además la vacilación entre q- y Ǥ3, entre -ƫ y -t (así en ciertos puntos del Norte de África, según Hélot), y entre la forma qállaf y la derivada qálfaƫ, todo indica origen extranjero en árabe. Sin embargo no es posible partir del griego, donde καλαưατέω y su familia no tienen etimología. En definitiva es probable que el centro de expansión esté en el Norte de África, pero que el vocablo proceda en última instancia del lat. vg. *CALEFARE (lat. CALEFACERE), por alusión al acto de calentar el alquitrán para calafatear; véanse las pruebas semánticas de esta etimología aducidas por Jal y por el propio Vidos, p. 266 («cum calafati bruscarent [= ‘chamuscaran’] quandam maximam navem... accenso in ea igne, combusta fuit tota», Génova, 1213; «calafatejada l’embarcació cal enquitranar-la. Hom posa el quitrà en un perol i l’escalf a...», Roig, La Pesca a Catalunya, 37). Hay en hispanoárabe varios casos de verbos derivados de un participio pasivo latino, procedimiento normal en vasco, como es sabido; comp. qerbaƫ CREPARE, qarƫaƫ CURTARE en el propio Simonet, qannaƫ (V. CANILLA).

Debe rechazarse la etimología de Lokotsch, recogida por el FEW, ár. qafr ‘(la) pez’, ‘asfalto’ (propiamente ‘desierto’, de donde qafr al-yahûd ‘desierto de los judíos’ > ‘asfalto’, según indicó Vidos), que no explica calafatar fonética ni morfológicamente4.

Desde las lenguas mediterráneas el vocablo se extendió a todos los idiomas marítimos. Es posible que el cast. calafatar no sea arabismo directo, sino tomado a través del catalán: entonces se comprenderían bien las formas calafetar y calafetear5, como consecuencia de la pronunciación del catalán oriental. En todo caso el port. calafetar6 debe proceder del catalán por conducto del castellano, y el fr. calfeutrer viene de la lengua de Oc o del italiano; de ahí luego el alem. kalfatern y otras formas germánicas.

La moderna española calafatear es derivada del sustantivo calafate, mientras que el antiguo calafatar provendrá del verbo árabe. Para un cruce de calafatear con garfio y derivados, vid. GARRA.

DERIV.

Calafate [APal. 474d; 1504, Woodbr.; y V. arriba].

Para las acs. ‘haragán’, ‘niño pequeño’, ‘dedo’, que tiene galafate en los dialectos, vid. Zamora Vicente, RFE XXVII, 2487.

Calderón emplea una variante califate (DHist.).

Calafateado. Calafateador. Calafateadura. Calafateo. Calafatería. Calafatín.

1 A las diversas variantes agréguese galafatar en Pérez de Hita (ed. Blanchard, II, 298).―

2 Vidos quiere partir de una t que se agregaría en estado constructo. Pero hay estado constructo en los sustantivos y no en los verbos, de suerte que se debería partir del sustantivo qilâfa(t) ‘calafateado, arte de calafatear’, siendo así que no hay sustantivo parecido a éste en romance. Por otra parte se explicaría si acaso la -t- romance y griega, pero no la del verbo árabe qálfaƫ, Ǥálfaƫ, ni del sustantivo qalafât; así Vidos se ve obligado a admitir que estas formas árabes vienen del romance, aunque en romance el vocablo vendría del árabe.―

3 Esta Ǥ ha de venir de una variante romance *galefare, comp. los galafatar y galafate que cito.―

4 Una etimología romance imposible propuso Behrens, ZRPh. XIV, 370, comp. G. Paris, Rom. XX, 325. No he podido consultar la nota de E. Weekley, Modern Lang. Review V (1910).―

5 Además de López de Ayala, la emplea Lope, La Circe III, v. 794.―

6 Ya S. XIII «non á... mestre... calafetador que podesse calafetar mellor» 339.62.―

7 En la de ‘ladrón astuto’ se halla ya en G. de Alfarache (1604); en la de ‘corchete, policía’, en el Estebanillo (1646); ‘ganapán’ en Aut. (1734). Desde luego nada tiene que ver con gerifalte, de donde quiere derivarlo la Acad.