ARGAYA o más bien ARGAÑA, ‘arista del trigo y demás cereales’, del mismo origen que el gall. argana, y del mismo radical que el port. argueiro ‘arista’, ‘pajita’, ‘broza’, de origen desconocido, probablemente de tipos prerromanos *ARGANNA, *ARGARIUM, emparentados con ÁRGOMA ‘brezo’.

1.ª doc.: argaña, lr. cuarto del S. XIV1; 1574-16042; argaya (?), 1658, Arredondo (citado por el DHist.).

Esta última forma, que es la que da la Acad. [ya 1780, Supl.: «argaya, ant., lo mismo que arista»], no aparece confirmada en ninguna parte. Argaña se emplea en Mérida (Z. Vicente), Extremadura (S. Coco), Salamanca (Lamano), Astorga (A. Garrote) y el Bierzo (G. Rey)3; hoy ‘hierba áspera al tacto’ en Asturias, ‘arista de la espiga’ en Tierra de Campos y Extremadura, Gtz. Cuñado, BRAE XXV, 368; argaña ‘hierba mala que nace entre el maíz’ en Sajambre (Fdz. Gonzz. Oseja); de la misma raíz me parece argazas ‘conjunto de ramas secas y envolturas de las habas’ ‘pequeñas clavijas de madera para asegurar las espigas’; argana es gallego en general (Vall.: ‘punta en que remata el cascabillo del trigo’, ‘espina de pescado’4), empleado en el Limia (VKR XI, 261) y en el portugués de Valpaços (RL II 256); cf. gall. dial. arangaño ‘semilla de beleño’ con la var. arengo íd., pero arengos ‘gusanillos de los oídos’ y otros significados, J. L. Pensado, Opúsculos gallegos S. XVIII, V. ARAR. En el resto de Portugal hallamos la forma pragana ‘arista de los cereales’ [Rodrigues Lobo, 1619], que también tiene correspondencia en español: pargañas de la espiga en Mateos, Origen y dignidad de la caza (1634), y Cabrera oyó pargaña en las inmediaciones de Toro, al Este de Zamora. Esta forma con p- me parece debida a un cruce con algún otro vocablo: quizá con punta o con pestaña. C. Michaëlis, RL III, 180, había pensado en un híbrido SPICAE GRANA, donde GRANA sería el alem. granne ‘arista de la espiga’, pero ya M-L. (REW 3862) le hizo notar que la forma gótica correspondiente, granus, habría perdido la -n- intervocálica en portugués5. M. L. Wagner (ZRPh. LXIX, 376-7), se declara por la etimología dada al port. pragana por C. Michaëlis, en la forma modificada por Brüch (RLiR II, 41: SPICAE GRANA cruzado con el célt. GRENNApatillas’), idea sumamente inverosímil en sí misma, aun prescindiendo de lo inaceptable que es separar el port. pragana y leon. pargaña del cast. argaña. Por otra parte argana me parece estar en evidente relación con el port. argueiro, que F. García Esgaravunha empleó ya en el 3r. cuarto del S. XIII (ZRPh. XX, 208), con referencia a una broza en el ojo, y que significa hoy «palhinha; aresta; coisa insignificante», alent. alguêro (RL IV, 55), ast. occid. argueiro ‘partícula que se introduce en los ojos o cae en un líquido’ (Acevedo-F.)6; gall. algueiro ‘festuca o arestica que cae en los ojos’ (ve o algueiro en ollo alleo e non o no seu), Sarm. CaG., y dialectalmente ‘boñiga seca para quemar a falta de leña’ (Vall. Supl.). Pero ¿cuál es entonces el sufijo de argaña? No es -ANEA, como se ve por la -n- gallegoportuguesa, sino el raro -ANNA que hallamos en PESTAÑA. Podemos descartar sin vacilaciones la etimología de Eguílaz, ár. ġâya ‘término, límite, fin’. Rato dice que la argaña se emplea para escobas y para hacer cestos, y remite a vericiu, nombre de una planta de monte7. Luego parece que en Asturias argaña designe una especie de brezo8. Aunque esta ac. no figura en Acevedo-F. ni en Munthe, Vigón s. v. caxigu dice que argaña es el nombre de la Erica Arborea en Oviedo, y Canellada dice que es «planta dañina que nace entre el trigo» y «rozu grande y viejo». ¿Será argaña un derivado del lat. ERէCAbrezo’ (REW 2896, 2898), y se compararían las brozas y las aristas de cereales con el ramojo característico del brezo?9. Pero el sufijo no latino -ANNA hace pensar más bien en un origen prerromano del radical. Comp. ÁRGOMA. La amplia presencia en la toponimia confirma el viejo arraigo del vocablo. Hay un pueblo Villanueva de Argaño entre Burgos y Castrojeriz, y un Argañín en Bermillo de Sayago; análogos a éste son los dos Arganil de Portugal: uno al E. y el otro al N. de la Serra da Estrela, éste es sede de concejo, el otro es una freguesía del concejo de Guarda. El vasco a. navarro argaindu significa ‘desbastar madera’ y ‘cubrirse de cierta costra la tierra’ recogido en Ituren (alto Bidasoa) por Azkue (Supl. a Azkue), acepciones ambas procedentes de la idea de ‘broza, aspereza’ propia de argaña y argueiro. En la fonética vasca, esto corresponde claramente a una base ARGANN- (cf. boina ABONNIS, keinu CINNUS, etc.). Habrá que estudiar más a fondo el problema cuando se haya comprobado bien si es cierto que gan tenga también la acepción de ‘broza’ que le atribuye Azkue, lo cual abriría claramente la posibilidad de que la etimología sea en definitiva proto-vasca. No creo, en cambio, que haya relación con argan que Azkue anotó sólo en el Txorierri (vizcaíno occidental) ‘terreno pedregoso’, pues éste se analiza fácilmente en arri + gan ‘superficie (de piedra)’.

No aportan novedades importantes, pero sí datos útiles las notas recientes de Johannes Hubschmid (ZRPh. LXXI, 243 n. 1, y Pyrenäenwörter vorroman. Ursprungs, 39 n. 96).

1 «Tomó el pan, comió dél un poco, ca avia en él muy grandes argañas», Cuento del Emperador Otas, p. 439.37.―

2 «Hoy, segadores de España, / vení a ver a la Moraña / trigo blanco y sin argaña, / que de verlo es bendición», en un villancico popular insertado por Lope en su comedia El Vaquero de Moraña, ed. Acad., VII, 569b, cuya acción se desarrolla en la sierra de Ávila.―

3 Argaña, con variante argaya, sería ‘lluvia menuda’, en Santander, según G. Lomas. ¿Hay error?―

4 Así también en el Bierzo, y en Valpaços. Gall. argana ‘arista del trigo’, Bierzo argaña íd. y planta que parece matita de trigo y echa unas hojas como herba lesta, y topón. Argañedo, Sarm. CaG. 143v.―

5 D.ª Carolina cita sin documentarlas unas variantes portuguesas paragana, pagrana y espigrana, que no hallo confirmadas en ninguna parte. Si las dos últimas existen es visible que se deben a etimología popular.―

6 Quizá deban agregarse a este grupo Valpaços araujo o arujo «argueiro» (RL III, 326), si viene de *ar(a)gujo y el trasm. argavaços ‘pedacitos de leña muy menuda para encender el fuego’ (RL V, 27). Con éste comp. ast. garabanzos ‘hierbas leñosas’ (Rato, s. v. marbiezu). J. M. Piel quiere explicar el port. argueiro como derivado del lat. ALէCAespecie de escanda o espelta (variedad de trigo)’ (Fs. Wartburg 1958, 545-55); aparte de que no es nada clara en el aspecto semántico esta etimología, como reconoce el propio Piel, choca con la -r- portuguesa y con el sufijo prerromano de argaña; pese a su opinión, el ast. erga ‘grano de la escanda’ no puede apoyar esta etimología, pues el cambio de Á en é no tiene paralelo en asturiano (es inadmisible citar a este propósito formas como ertu, donde hay metafonía normal ante -u).―

7 También remite a vericiu en los artículos árgoma y godoxu, donde dice que con los vericios se hacen escobas para barrer cuadras. Es evidente que quiere decir ‘brezo’.―

8 Argañal como nombre de lugar en Sanabria (Krüger, Gegenstandsk.).―

9 Comp. port. dial. árgomas ‘ramaje menudo que se saca de los árboles al limpiarlos’ junto al ast. árgoma ‘especie de brezo’.