AMAGAR, ‘hacer ademán de ir a ejecutar alguna cosa en daño de otro’, origen desconocido.

1.ª doc.: 1202, F. de Madrid.

Aunque Cuervo reunió algunos ejs. en que amagar no significa anunciar un mal, sino una acción favorable o indiferente, no logró demostrar que este otro matiz sea originario o antiguo, pues los ejs. son raros y tardíos (B. de Valbuena, Quevedo, Terr.; V. abajo algunos parecidos de amago). Son fundamentales para el origen e historia de amagar el artículo del diccionario de Cuervo (I, 397-400) y el estudio de Spitzer, AILC II, 6-8. Ambos se inclinan por el germ. MAGANtener fuerza’, ‘poder’; Cuervo hace notar que cuando decimos que una teja puede caer expresamos lo mismo que si dijésemos que amaga caer, y Spitzer llama la atención hacia los sentidos que el fr. ant. esmaiier ‘turbar, inquietar, asustar’, procedente de un derivado de MAGAN (a saber *EXMAGAREquitar las fuerzas’), ha tomado en varios dialectos francoprovenzales: Vaud amayé ‘amenazar, hacer ademán’. Crémieu ameyé ‘pegar un bofetón a alguno’, Entremont amayeré ‘persona que amenaza continuamente con hacer algo sin llegar a ejecutarlo’. Esta evolución semántica de *EXMAGAREquitar las fuerzas’ y ‘asustar’, en amagar ‘amenazar’ es, efectivamente, concebible, y la etimología ha de considerarse posible. Pero tiene razón Spitzer al considerar inseparable el cast. amagar del cat. y oc. amagar ‘esconder, ocultar’, que ya se halla en ambos idiomas desde fines del S. XII (Guillem de Berguedà: ARom. XXIII, 35, v. 8; Raimbaut de Vaqueiras), y que en lengua de Oc se extiende por Gascuña, Languedoc1 y Provenza2 hasta los Alpes (Barcelonnette: «s’amagar: se bien couvrir»)3. La ac. castellana de amagar se extiende hasta las hablas gasconas occidentales: bearn. amagà ‘amenazar’ (cop amagat, n’ey pas plaa dat ‘golpe con el que ya se ha amenazado no es fácil darlo después’: Lespy-Raymond)4, La Teste ama «ne pas menacer en vain»5; mas por otra parte la ac. catalano-occitana se extiende a Aragón: amagar ‘esconder’ (Borao), y de aquí se pasa a amagarse ‘agacharse’, usado en Aragón (Aut.), en Murcia (G. Soriano) y en Andalucía: amagarse ‘agacharse, aplastarse’ (AV)6. Pero es el caso que esta ac. reaparece en tierras portuguesas: Évora magar-se «acaçaparse, coser-se com o chƟo para se ocultar» (RL XXXI, 118), trasm. amagar «deitar, descansar, socegar (ja deve estar amagado: são 10 horas)» (Bessa). Ahora bien, la gran antigüedad de la ac. ‘ocultar’, el carácter importante y esencial de la misma dentro del idioma, y el principio geográfico-lingüístico de las áreas extremas coincidentes, todo hacer creer que la ac. originaria es ‘ocultar’ y no ‘amenazar’, como sugiere Spitzer; pero Spitzer escribía guiado por su falsa etimología del port. esmagar, para el cual V. abajo. Contra el escepticismo de Cuervo me parece que hay un nexo semántico entre ‘ocultar’ y ‘amenazar’ pasando por ‘disfrazar’, ‘disimular’ y ‘hacer ademán (de algo, sin cumplirlo)’: de hecho la ac. ‘disimular’ se halla en bearnés (Lespy) y el landes amacà es «mal accoutrer, masquer», amacà-s «se masquer» (Palay); por otra parte amago aparece con el sentido de ‘imitación, remedo’ en el Siglo de Oro7 y hacer amago no es precisamente ‘amenazar’ en Chile, sino ‘fingir que se va a hacer algo’8. Ahora bien, si el sentido primitivo es ‘ocultar’, es muy difícil relacionar semánticamente con MAGANpoder’, y las formas gasconas con -c- parecen indicar un étimo con -C- originaria9.

Si la etimología MAGAN ofrece graves dificultades, más inverosímil me parece aún la de Brüch (ZRPh. XXXIX, 202), aunque la aceptaran Moll y M-L. (REW 5237): MAGUSbrujo’ habría dado amagar ‘embrujar’, y como el embrujo es un mal, ‘amenazar’, semántica simplista y artificiosa por cierto10. Claro que no puede venir del lat. EMէCARElanzar destellos’ (GdDD 2419). De amagar con propagación de nasal sale el santand. amangar ‘amenazar’ y no de un *EMINICARE (ib. 2420a); en cuanto a esmengar, esmingar ‘dar empellones’, van con esmegón, esmengón, ‘empellón’, y con el port. esmagar ‘aplastar’, del cual trato en mi artículo DESMAYAR. Los santand. acemangar, acemengar, arcimengar, ‘amenazar’, salen, por cruce con amagar, de un *acemanar metátesis de amenazar; hay también acemallar, con otra contaminación. Desde luego nada de esto sale de un fantástico *SUBMINICARE (GdDD 6409c); el ast. ximi(e)lgar ‘sacudir un árbol o a una persona’, chamelga ‘sacudir, balancear’, Oseja (a)ximielgar ‘balancear, columpiar’ (Fdz. Gonzz., Oseja, 205, 369), es propiamente ‘apuntalar’ (el hombre que sacude el árbol toma respecto de éste una posición semejante a la del puntal), de jim(i)elga, vid. MELLIZO.

Ya he dicho que Spitzer se fundaba en el port. y gall. esmagar suponiendo que se hubiera dicho primero esmagar-se ‘aplastarse, agacharse’ y antes ‘sentirse afligido’, que deriva del hipotético germ. *EXMAGAREprivar de fuerza’. Pero no hay tal: la voz gallegoportuguesa no tuvo estas acs. y su origen es otro, del cual para desbrozar el terreno conviene tratar ahora. El vocablo fué siempre transitivo y con el sentido básico de ‘aplastar’ [«fazer en pedaços, amassando, pisando, comprimindo; fazer rebentar» Moraes, h. 1530, Ferreira de Vasc., J. de Barros, etc.], aunque llegue a valer también ‘abatir, vencer, afligir’ (Fig., no Moraes); es también salmantino y no tiene menor vitalidad en gallego11. En realidad se trata de un derivado de maga que Fig. recoge como término de pescadores para la ‘tripa de la sardina que sirve de cebo’ y Sarmiento (1745) para los «intestinos y broza de los pescados» (CaG. 59v) ‘entrañas de los pescados’ que junto con las cabezas se cuecen para hacer el saín con la superficie de este cocido, ‘montones de tripas de sardinas que se abandonan a los cerdos’, y precisa el propio Sarmiento que esmagar es quitar la maga del pescado (citas en la ed. de Pensado, p. 175); de ahí también el derivado esmaga, que es esta maga quitada de la sardina (o. c., pp. 270, 175).

Me parece claro que el gall.-port. maga procede de un gót. *MAGA o suebo MAGO hermano del ags. maga (ingl. maw) ‘estómago’ ‘papo de las aves’, a. al. ant. mago ‘estómago’, b. al. med. mage, neerl. med. maghe, fris. ant. maga, que es también común con el escandinavo magi íd. (ya en los Eddas), y por lo tanto es prácticamente seguro que no careció de él el gótico, pues de ahí se cree que lo tomó el finés mako (Kluge-M.). Por lo demás no es imposible que el vocablo existiera en lenguas prerromanas de España en un significado parecido (y en una forma como *MAKA), pues dejó descendencia en las lenguas bálticas y eslavas; aunque ahí sólo en el sentido de ‘bolsa, funda’ y aisladamente derivado aparece en el celta de Gales (Pok., IEW 698).

Nótese que acs. conexas con las del gall. esmagar ‘aplastar’, ‘estrujar’, ‘espachurrar’ (BRAE XIV, 117) y luego ‘podrirse’ (cf. Contr., 109) se hallan en América: cubano somagarse, zomagarse, ‘enfermarse el tronco de los árboles produciéndose en él una especie de gangrena que destruye parte de su madera, formándose huecos’ (Martínez Moles, 331, 584), ecuat. asomagado ‘hombre ebrio que va retornando a su estado natural o que se levanta soñoliento de su cama’ (Lemos, Semánt., s. v.). Algo de esto hubo en leonés antiguo: amagadura ‘rozadura sobre el casco de una caballería’, S. XIII, Libro de los Cavallos 44.12. Probablemente otro derivado es gall. magote ‘(pan) cuyo migajón está apelmazado y mal cocido’ (Pontevedra, Sarm. CatVG. 195v)12.

DERIV.

Amago [princ. S. XVII]: esta palabra era mirada como culterana en el Siglo de Oro (Vélez de Guevara: RH LXXVII, 342).

Amagatorio ‘escondrijo’ arag.

1 En lo antiguo At de Mons y Matfré Ermengaut; hoy Doujat-Visner y Gary.―

2 Ej. de Anselme Mathieu (Vaucluse) en Mistral.―

3 Ronjat, Gramm. Istor. I, 313, cita amegà «envelopper» en un doc. landés de 1300. No puedo tomar en serio su etimología de amagar: *MACA, primitivo de MACULA.―

4 Nótense otras acs. más oscuras que hallamos en el SO. de Francia: bearn. ‘reunir’ («dens sa couroune amagarà, dab lous liris francés cadenes de Nabarre»: Lespy), Sarladais omo «rassembler» (Colas). Por otra parte gascón marítimo amacà «arranger, disposer», amacà-s «s’installer, se mettre à l’aise» (Palay), Landas amagà «arranger, soumettre» (Métivier, Agric. des Landes, 710), La Teste s’esmagà «se donner du mouvement», esmac «mouvement brusque, inattendu».―

5 Se trata sin duda de una mala definición a base del proverbio de Lespy. De todos modos demuestra que la ac. castellana llega hasta la Gironda. Del bearnés (en cuyos dialectos del SO. toda -g- intervocálica se reemplaza por -k-) pasaría al vasco labortano amakatu «exciter les chevaux avec toute sorte de cris»; de amagar ‘esconder’ el b. navarro amaka «al escondite, juego de niños», lo cual se dice en catalán jugar a amagar.―

6 Por lo menos en el Oriente de esta región: se oye mucho a gente de Almería. Comp. ibid. remaguear ‘ser flojo, mostrarse rehacio’, remaguero ‘flojo, poco activo’ (AV).―

7 «Subir a la magestad / es dexar de ser humano, / y un amago soberano / de la infinita deidad» en la comedia El Palacio Confuso que se ha atribuido a Lope o a Mira de Amescua (T. A. E. III, p. 152).―

8 «Hizo José Araos amago de pagar con el inconvertible billete de cien pesos», G. Maturana, D. P. Garuya, p. 210, también p. 58, y Cuentos Tradicionales en Chile I, 76. Comp. amagote ‘engañifa’, ‘lisonja’, en J. Ruiz, 1478 (Τ y G; amargote S).―

9 ¿Habrá relación con Servigliano amacasse «aprirsi (delle nuvole)» (ARom. XIII, 248)?―

10 El cat. amagar para Moll sería ‘hacer invisible por arte mágica’. Más razonable sería partir de ‘escamotear’, ‘hacer desaparecer’. Pero este *MAGAREhacer prestidigitación’ derivado de MAGUS es muy inverosímil desde todos los puntos de vista.―

11 «Esmagar unha chinche» «~ cabezas de moscas», «~ macarrons» Castelao 149.18, 57.31, 58.8 y passim, en fin «~ unha necesidade» 56.31. ‘Aplastar con los pies, las manos o entre dos objetos duros’ Vall.; esmagarse «estrujar, pisar» Lugrís, parte evidentemente del empleo dativo esmagarse un pie, un dedo; Sarmiento CatVG. 220r anota la ac. ‘estrujar’ sólo en Caldas de Reis, pero «destripar aplicado a frutas y otras cosas» en uso no localizado (58r).―

12 Quizá también magarreiro (cuchillo ~) ‘macheta o mal cuchillo de cocina para picar o cortar’ (ib. 218r) por ser el empleado para sacar la maga del pescado; desde luego sin relación con mangorrero o con el gr.-lat. machaera ‘sable’. No veo claro lo que es una palabra mago que sale tres veces designando una pertenencia o derecho de algunas casas, en doc. pontevedrés de 1450 («nosa casa, décimo a Deus, con seu mago, ena rua da Prancha» CatVG. 177v).