ALACRÁN, del ár. vg. aqráb (ár. áqrab) íd.

1.ª doc.: 1251, Calila, 39.688.

Ya en el S. XIII la vieja palabra romance escorpión necesitaba ser explicada en las obras alfonsinas. Neuvonen, 143. Variante metatética arraclán en Cespedosa (RFE XV, 155), Salamanca y Aragón. También port. alacrau, lacrau, val. alacrà [S. XV]1. Para otras variantes portuguesas (licranço, etc.), vid. Wagner ARom. XIX, 118. Sobre los nombres gallegos del liscáncere trató extensamente M. Sarmiento en su Onomástico de 1765, § 357-396; «liscáncere ni es culebra ni víbora, pero es de un palmo y parece víbora manchada» (CatVG. 63v, 240r y v. Sin embargo ni el port. licranço (como observa Fig.) ni el nombre gallego designan el alacrán ni la culebra sino el pequeño e inofensivo reptil conocido por lisón en algunos dialectos castellanos y por llisona, anadull, noia de serp o serp de vidre en catalán, nombres éstos que derivan de liso por el deslizarse del animalito. Hubo cruce de alacrán con este lis- pues, en efecto, la ignorancia popular confunde a menudo los dos reptiles y achaca a éste picada no menos venenosa. Junto a la forma gallega más conocida liscáncer, cita Sarm. liscanzaro en Caldelas, liscance más al E. (en Soutelo de Montes), esconcer en el Norte (Lugo y Viveiro) y cancer en Sarria (240v). Variantes locales en GdDD 291. Comp. ALICANTE y ARRACLÁN.

DERIV.

Alacrancillo. Alacranera. Alacranear arg. ‘criticar venenosamente’.

1 Con el port. alacrau y el cast. dial. arraclán comp. la forma arreclau ‘escorpión’, que he oído en Bellmunt de Mesquí, La Torre Vilella y otros pueblos catalanes de la prov. Teruel.