ZARPAR, del it. antic. sarpare (hoy salpare) íd., de origen incierto; como la forma más antigua fué serpare, quizá derive de serpe ‘espacio triangular de la punta de proa, donde se ponía el ancla al zarpar’, cuyo nombre se explica por el de unos maderos de forma serpentina que delimitaban este espacio.

1.ª doc.: h. 1600.

Escribió Cuervo: «me inclino a creer que çarpar no se introdujo en cast. sino pasada la primera mitad del S. XVI: no lo hallo en Fz. de Oviedo, en Fr. B. de las Casas ni en Eugenio de Salazar; C. de las Casas (1570) no da a sarpare otro equivalente que sacar, alçar; después úsanlo Cervantes, Lope, Tirso, Jáuregui, etc.». En efecto, falta también en Woodbr. y en la Instrucción Náutica de G. de Palacio (1587), donde no dejaría de figurar si por entonces fuese palabra de uso común; tampoco está en Percivale (1591). El primer testimonio que puede fecharse exactamente es éste del Alfarache de Martí (1602): «ellos querían zarpar los ferros y dejarme a la luna... recordé despavorido con un mal sueño de que me maltrataban, y hálleme sobre la yerba sin ropa ni fardel» (Rivad. III, 365). Quizá sean algo anteriores los dos de comedias de Cervantes (publicadas en 1615, pero escritas seguramente mucho antes): «zarpe el ferro la capitana», «a tiempo que zarpaban las galeras» en los Baños de Argel, «pues zarpo desto y voyme a mejor puerto» en El Laberinto de Amor (citas de Cej. IX, p. 552); en el Quijote está «hizo señal el cómitre que zarpasen el ferro», y en El Cuerdo Loco de Lope leemos también zarpar el ferro (v. 1320); en la Circe del mismo: «comenzaron las galeras a alargarse, y zarpando la capitana, a azotar el agua y el aire con los remos» (Aut.). He aquí los primeros lexicógrafos que lo recogen: «çarpar la áncora: lever l’ancre; çarpadura de áncora...» Oudin, «çarpar: sacar el áncora de debaxo del agua, y entrarla en la galera o navío para navegar» Covarr.

Como etimología propuso Diez (Etymologisches Wörterbuch, 281) el gr. Ɔξαρπάζειν ‘arrancar’, idea todavía adoptada por Rohlfs (ZRPh. XLI, 455-6; pero no trata del vocablo en su dicc. etimológico de los helenismos en la Italia meridional, a pesar de ser ahí tan vivo el vocablo) y por Migliorini; aun suponiendo que esto se latinizara en *EXHARPARE, el tratamiento fonético no sería regular, pues se esperaría *sciarpare en italiano (el caso de saggio EXAGIUM, donde pudo intervenir la disimilación, no es comparable). No es probable esta etimología, sobre todo teniendo en cuenta que la forma antigua es serpare, como veremos. M-L. (REW 7612) estudia la posibilidad de que venga del lat. SARPĔRE ‘cortar, podar’, o más precisamente de un derivado de este vocablo, el fr. serpe, oc. sarpa ‘podadera’, y la rechaza por razones semánticas (lo cual se impone, en efecto), y además porque este sustantivo sólo se encuentra en Francia, y M-L. cree que este verbo ha de ser oriundo de Cataluña o de Portugal. En efecto, de Cataluña sobre todo, y también de Portugal, procede la mayor parte del léxico náutico castellano de fecha antigua. Pero aquí yerra M-L., pues esta palabra se introdujo en una época en que la marina catalana ya estaba decadente y había dejado de enriquecer el léxico cast.; en efecto, en catalán no tengo más que testimonios recientes del vocablo, por lo demás en la forma salpar o saupar, que por cierto derivará directamente del italiano moderno y no por conducto del castellano1; en portugués no hay más que testimonios de fines del S. XVII (Brito Freiré), y en los Sermones de Vieira, de la misma época, aparece zarpar a âncora, cuya z lo denuncia como tomado del castellano.

No dudo que la patria del vocablo es Italia y que de allí lo tomó directamente el cast. (según ya dijo Cuervo). Hoy en aquel país ha predominado la forma salpare, pero lo antiguo es sarpare (absolutamente, o bien sarpare il ferro, l’àncora), ya en el Ariosto, Pantero Pantera (1612), Buonarroti il Giovane (princ. S. XVII) y autores posteriores. Esta forma, de la cual partió la cast., sigue siendo usual en los dialectos, p. ej. en Manfredonia (Pascale), y assarpari l’àncaru en las islas Lípari, donde también se dice assarpari a rizza ‘sacar la red’, ass. a lènza ‘sacar del agua el sedal’ (VKR III, 359, 362). La forma salpare me parece ser una alteración moderna procedente de la costa toscana, pues en efecto el dialecto de Pisa, Liorna y Luca cambia sistemáticamente la r en l ante consonante (còlpo, selvizio, pelmette, pòlta, mèlda, etc., Rohlfs, Hist. Gramm. d. it. Spr. I, p. 439; el fenómeno opuesto, que ocurre en otras regiones, p. 403, pudo contribuir por ultracorrección)2. Sea como quiera, hay todavía formas más antiguas en Italia: «intelligatur quod dicte galee serpentur et serpari debeant de Janua et districtu... infra kalendas marcii» doc. genovés de 1335, «non possit nec debeat aliquis patronus ex dictis galeis serpare de portu Janue seu de aliquo loco riparum Janue, nisi prius dicta galea sit mensurata et ferrata» íd. íd. 1344, «quando dicta gallea cum homni honere et furnimento parata ad navigandum serpari debet» de la misma fecha (Jal, 1344-5). Del it. se tomó el fr. antic. serper, todavía empleado por Rabelais («ayans serpé nos ancres et gumenes», encallan y otro barco «nous serpa des arenes» V, xviii, pp. 62, 64) y en un doc. de 1680 (Jal ibid.), sarper en otro de 1501 (Jal, 1318), pero no hay duda de que en francés es palabra poco arraigada y tomada del italiano.

En Italia es, pues, donde debe buscarse la etimología del vocablo. Rechazadas ya arriba las demás etimologías propuestas, sólo queda la sugerida en el Diz. di Mar., teniendo en cuenta atinadamente el hecho de que la forma antigua fué serpare, cambiada en sarpare en el S. XVI por influjo de la r siguiente. Serpare, según los autores de esta obra, derivaría de serpe, parte de la nave donde se colocaba el ancla al zarpar; serpe (o serpa) es hoy término anticuado, que valía «sulle antiche navi, spazio triangolare all’estrema prora, delimitato a murata dalle serpi», éstas eran a su vez «pezzi di legno, così detti a cagione della loro figura, che si uniscono a dritta e a sinistra all’estremità del tagliamare, e fanno suo finimento tra le grue e la figura o polena». No se dan más que testimonios del S. XIX, pero Jal (p. 1345a), aunque no los da del it., da uno de un prov. ant. serpe tomado del italiano en el S. XVII. La figura que reproduce Jal (p. 827a) de un tajamar antiguo muestra, en efecto, unos maderos de forma serpentina, que a juzgar por las explicaciones de Jal parecen corresponder, en efecto, a las serpi italianas (digo «parece» porque todavía convendría confirmarlo). En cuanto a que serpe o serpa venga de SERPENS, quedo un poco en duda a causa del fr. herpe, que designa lo mismo y que no parece poder ser alteración de serpa. De todos modos, si nos constara que el it. serpe ya se empleaba en el S. XIV, importaría esto poco para la cuestión de si serpare (sarpare) deriva de este sustantivo, y ya no me quedarían escrúpulos en cuanto a esta etimología. Mientras tanto, no puedo desechar del todo otra posibilidad que convendrá tener presente en investigaciones futuras, en vista de que serpare aparece con el sentido de ‘separar’ en un estatuto genovés de 1351: «et non possit nec debeat serpare una ab alia sive ab aliis, ultra unum miliare, nisi casus in hoc evenerit». Jal (p. 1344b) quisiera enmendar en separari. Pero quién sabe si esto es arcaísmo y no error, y si debemos interpretar serpare il ferro como una expresión absoluta de ‘separarlo del fondo’; acaso el lat. vg. SEPERARE (> fr. sevrer), lat. cl. SEPRARE, sufrió una metátesis *SEREPARE, de donde luego estas formas. Desde luego es suposición muy aventurada, que por ahora vale más dejar en cuarentena3.

DERIV.

Zarpadura ‘acto de zarpar’ ant. (Oudin); un ej. aislado de este vocablo («amenasas de dar çarpadura») ¿‘marcharte’?) está en el Canc. de Baena (n.º 439, v. 13), pero el sentido del contexto no es claro (aún menos creo que pueda relacionarse con ZARPA).

1 Sobre todo es palabra mallorquina: saupar àncores (BDLC XII, 37) o saupar a secas (BDLC IX, 232; XII, 142; Ferrà, Comèdies, ed. Les Illes d’Or I, 24). Además toma el sentido de ‘chupar (la sustancia de una cosa)’ (BDLC VIII, 153; XI, 269). Es popular, por cierto, pero de todos modos italianismo. No es conocido el cat. anxarpar que cita M-L. Lo que enxarpar (o más bien eixarpar) significa es ‘hurtar, arrebatar’, sin relación con esto.―

2 En efecto, otros términos náuticos han sufrido el cambio opuesto: sparmare junto a spalmare, scarmo y palischermo por scalmo, paliscalmo; el nombre de pez salpa aparece convertido en σάρπƓ en un glosario griego (CGL III, 257.22), y, en efecto, este cambio se registra también en bajo griego, pero no creo que el griego tenga nada que ver con el cambio de salpare.―

3 A pesar del paralelismo entre zarpar y zarpa por una parte y garrar y garra por la otra, no creo que zarpar tenga nada que ver con el cast. zarpa. El port. garrar vale «ser impelido pelas ondas (falando-se do navio desancorado)» y luego también «desprender (amarras)». Pero zarpa es palabra exclusivamente castellana, y está fuera de dudas la procedencia italiana de zarpar. Las notas de Baist sobre zarpar en ZRPh. V, 237-8, no condujeron a resultados concretos.