TAHUR, antiguamente tafur, voz común a todos los romances de Francia y de Iberia, de origen incierto; parece haber designado primero a los componentes de una tropa auxiliar de los Cruzados que se declicaba al saqueo y al merodeo; quizá del armenio thaphúr ‘abandonado’, ‘desnudo’, ‘vagabundo’, nombre que les aplicarían los auxiliares armenios de los Cruzados durante el sitio de Antioquía.

1.ª doc.: 1260, doc. de Sevilla, M. P., D. L., 346.10.

Se menciona ahí a un «Pedro Royz Taffur». En la Gr. Conq. de Ultr. (h. 1300) se menciona repetidamente a los Tafures, que formaron una especie de cuerpo auxiliar de la Primera Cruzada (p. ej., p. 211): se trataba de una muchedumbre andrajosa y hambrienta que se dedicaba sobre todo al merodeo, pero que también atacaba con temible valor y vivía en forma miserable y anárquica, hasta el punto de correr la voz de que habían devorado cadáveres sarracenos. En castellano pronto se generaliza la ac. ‘jugador vicioso’, más tarde ‘jugador fullero’. Es ya lo primero en J. Ruiz: «desque vergüença pierde el tafur al tablero, / si el pellote ju(e)ga, jugará el braguero» (470a; también 555d, 1620b, ya con la variante tahur); también en los Castigos de D. Sancho, de la misma época: «Séneca mucho denuesta los juegos e más los jugadores, llamándolos tafures e deciendo que cuanto más saben en esta arte tanto menos valen» (179a2 de abajo). Así también en los clásicos: «¿de qué tal melancolía / te ha cargado en un instante? / Tahur parece el amante / pues no dura su alegría» Ruiz de Alarcón (Paredes Oyen, v. 223), «CAPITÁN: El comenzar por desdén / es señal que he de ganar. / GILA: Tahur os queréis mostrar / de amor» Vélez de Guevara (Serrana de la Vera, v. 2960), «qué tahur, qué amante jura / de no jugar o amar, sin volver luego, / éste a su pretensión, aquél al juego» Tirso (Palabras y plumas I, esc. 5). Hoy sigue pronunciándose taúr en España, mientras que en América se ha trasladado el acento, y partiendo del plural táures se ha formado un singular táure (chil., arg., etc.), y algunas veces táura m.1. Paralelamente y con los mismos sentidos ha existido y existe el port. taful (que también se halla en cast. ant., en las Partidas I, vi, 34 y 36): ejs. desde el S. XV en Moraes, y para la evolución semántica, vid. Gonçalves Viana, Apost. II, 466; el antiguo taful ‘jugador’ está ya en el segrel gallego de med. S. XIII, Pero da Ponte (R. Lapa, CEsc. 361.12); aunque parece que el poeta emplearía tafur, pues rima con algur (los mss., del S. XIV, traen taful); tafularia ‘juego, vicio del juego’ en otras ctgs. de la época (ib. 239.17, 298.21); gall. tafulo por tahur, Sarm. CaG. 101v, y una forma tahul tuvo amplia extensión en castellano, del cual lo tomó el cat. taül en el sentido de ‘holgazán, gandul’ (y al influjo de esta palabra se debe en gran parte esa l). En catalán tafur está hoy anticuado, pero fué muy frecuente en la Edad Media, con el sentido genérico de ‘hampón, persona de mala vida’: «lo bacallar o escaltrit, malendrí, tafur e alcavot o en altra manera viciós» Eiximenis (Doctrina Compendiosa 90; otro ej., p. 22), con el verbo menos frecuente tafurar «avent no de las mias cosas, amaguadament, assau taffurat, e de aquells dinés que yo a la sua guàrdia folament havia acomenats...» Corbatxo (BDLC XVII, 108)2.

También es frecuente tafur desde el S. XII en lengua de Oc, con amplio sentido peyorativo semejante al catalán (Scheludko, ZRPh. XLVII, 439), e igual ocurre con el fr. ant. tafur, muy frecuente en las Canciones de Gesta y hasta el S. XIII; en la Chanson d’Antioche y otras se trata de la tropa auxiliar de los Cruzados. La mención europea más antigua parece ser la del historiador de la 1.ª Cruzada, Guibert de Nogent (1053-1124), quien dice que es palabra de los «paganos» y significa ‘vagabundo’ o ‘truhán’: «tafur autem apud gentiles dicuntur, quos nos, ut minus litteraliter loquar, trudennes [= fr. ant. truanz] vocamus, qui ex eo sic appellantur, quia trudunt, id est leviter transigunt quaquaversum peragrantes».

Michael Schmitz (Rom. Forsch. XXXII, 608-12) sugirió con verosimilitud que se trate del armenio thaphúr «vuoto, vacuo», «abbandonato, derelitto», «solitario, ramingo», «privo, orbo, ignudo, libero», enseñado a los Cruzados durante el asedio de Antioquía por sus aliados de este idioma, que vivían en gran cantidad alrededor de esta ciudad; etimología aceptada por Sainéan, Sources Indig. I, 2983, y que me parece, al menos provisionalmente, satisfactoria, aunque no la mencione M-L. Éste se limita a rechazar, siguiendo a Dozy (Gloss., 386), la de Engelmann, ár. daɅûl ‘engañoso, pérfido’, que no es palabra del árabe corriente y tropezaría con el cambio completamente anómalo de la d- en t-. Tampoco es aceptable el ár. taȳhûr ‘hombre irreflexivo’, sugerido por Diez (Wb., 313), cuyo sentido además no satisface. Más aceptable sería relacionar con el ár. vg. ƫaffâr ‘alcahuete’, «celui qui fait métier de prostituer des femmes ou des filles» (en Berbería según Bocthor), en Túnez ‘pederasta, sodomita’ (Beaussier), pronunciado ƫåffr según Stumme (Gramm. des tunis. Arab., p. 172), quien además cita un verbo ƫáºffår ‘dedicarse a la pederastia’, marroq. ƫȳri ‘pederasta’ (Fischer, Wortton, 279); sin embargo, ni da esto una base adecuada al vocalismo romance, ni es verosímil que se trate de una expresión antigua, pues es derivado de ƫáfar ‘ataharre’, que modernamente tomó el sentido de ‘trasero’ (Beaussier).

No atina tampoco Asín, Al-And. IX, 38, al partir del árabe zafúr ‘victorioso, ganancioso’ (deriv. de Ƿúfur ‘uña’, Ƿáfar ‘apoderarse de la presa con las garras’), suponiendo que tomara el sentido de ‘largo de uñas, rapaz’; pero, además de lo hipotético de la base, Ƿ no puede dar t (V. TOLDO).

Puesto que en la primera Cruzada desempeña un gran papel el Rey Tafur, o jefe de los tafures, cabría también sospechar que el vocablo se aplicara primeramente a este famoso personaje, y sólo después se trasmitiera a sus acólitos: en este caso podría tratarse del armenio tagavor ‘rey’, o por mejor decir su transcripción árabe takfûr, corriente al menos desde primeros del S. XIV, y aplicada no solamente al rey armenio de Sis, sino también a los emperadores griegos de Constantinopla y Trebizonda (Dozy, Suppl. I, 149b).

Sin embargo, por ahora me parece algo más verosímil la etimología de Schmitz.

DERIV.

Tahurería [1294, doc. de Sevilla, M. P., D. L., 355.21; Gr. Conq. de Ultr., 192; Gower, Confesión del Amante, 299]. Tahuresco.

1 «Por ser ruso, todos los tauras al principio... lo querían sobrar» en el uruguayo F. Silva Valdés, La Prensa de B. A., 26-VII-1942.―

2 Del castellano parece haberse tomado el cat. mod. taül ‘haragán’.―

3 God. VII, 623, cita un ej. de gent tanfure (por tafure) en una Passion du Christ, pero a juzgar por la medida del verso no parece ser la famosa Pasión de los SS. X-XI (nótese la tardía forma doit y no deit): de haberlo sido, esto sería grave obstáculo contra la etimología a base de la Cruzada, de fecha posterior.