SUSO, ‘arriba’, ant., del lat. vg. SȢSUM, reducción del lat. SȢRSUMhacia arriba’.

1.ª doc.: doc. de 1061 (Oelschl.); Cid, etc.

Es palabra todavía bien usual en los SS. XIII y XIV: Berceo Mil., 879b, S. Or., 40, Sinos, 56; Alex., 1852; Gr. Conq. de Ultr., 547; Libro de los Enxemplos, 488, y así en J. Ruiz, etc. Todavía APal. 74b, 78d, 80b, 99d, 478d; Nebr. «suso prep.: super; adv. de lugar: sursum», pero ya es raro en los clásicos. La forma SȢSUM es ya frecuente en textos vulgares latinos (Petronio LXXVII, 4, en boca del liberto Trimalción), y es la conservada por todos los romances. Alguna vez se apocopa en sus, p. ej. sus e yuso en Berceo, Mil., 83c; quizá de ahí salga la interjección ¡sus!, que aparece ya en la Celestina I (Cl. C. I, 87.5) y que Aut. documenta en Ercilla (h. 1570); esto es posible desde el punto de vista semántico y es tradicional suponerlo desde Covarr. hasta M. P. (Rom. XXIX, 239) y Rdz. Marín (nota al Quijote, Cl. C. II, 179); comp. Cej. IX, § 141. Pero no sería natural el empleo de una forma apocopada como interjección, o sea en fin de frase, y así debería suponerse que se tomó del cat. o del fr. en calidad de término cinegético, lo cual en efecto sería perfectamente posible. De todos modos hay que tener en cuenta que AZUZAR es palabra expresiva de creación independiente, y no puede descartarse del todo que la interjección ¡sus! sea también una creación primaria del idioma, sin etimología.

DERIV.

Susano ant. [Berceo, Sacrif., 89; invent. arag. de 1444, BRAE II, 558; Cej. VIII, § 128]. Susero.

CPT.

Asuso. Desuso [Berceo, Mil., 320b, 880b; J. Ruiz 428, etc.]. Susodicho [APal. 78d; Acad. 1832, no 1780; falta en Covarr., Casas, Góngora; creo recordarlo en docs. del S. XIII].