REGALAR I ‘agasajar’, ‘hacer una dádiva’, probablemente tomado del fr. régaler ‘agasajar’ y éste derivado de galer ‘divertirse, festejar’, de origen seguramente germánico (V. GALA).

1.ª doc.: Nebr. («regalar halagando: delicate tracto»).

Está también en los léxicos del Siglo de Oro: C. de las Casas (1570) «regalar: vezzeggiare; regaladamente: vezzosamente; regalo: blandimento, delitia, vezzo»; Percivale (1591) «to cocker, to make much of; regalamiento: cockering; regaladamente: gently, curteously, daintily, cockeringly; regalo: gentle usage, daintenesse»; Oudin «mignarder, caresser, cherir, faire bonne chere, amadouer, traitter delicatement, doreloter, delicater, festoyer; regalar con un presente: faire un present à quelqu’un; regalarse: se delicater, vivre delicatement, se doreloter»; Covarr. «regalo: trato real, y regalarse tener las delicias que los Reyes pueden tener...; regalado, el que se trata con curiosidad y con gusto, especialmente en su comida...». En estas acs. es sumamente común en los escritores clásicos: recuérdese «cuán regalada vida...» de Fr L. de León, regalado ‘agradable y deleitoso’ en Vz. de Guevara (Fcha.), y V. los numerosísimos ejs. de Góngora y de Cenantes en los léxicos respectivos, y los demás reunidos por Aut.

En lo que concierne al verbo regalar transitivo, en la acepción ‘hacer un presente, una dádiva’ y regalo ‘presente’, parecen ser todavía ajenos a esta época, aunque ya se podía decir regalar con un presente (Oudin), pero el sentido de regalar en este caso sólo era ‘agasajar, obsequiar’ y regalo era voz abstracta en el sentido de ‘agasajo, festejo’; las acs. modernas ya habían aparecido en 1737 al publicarse Aut., pero los autores de este diccionario (y Alemany en el de Góngora) las achacan infundadamente a los clásicos: los primeros testimonios literarios de que dispongo no son anteriores a 1800; «otros se dieron a la jocosidad festiva, y regalaron a la nación gran cantidad de epigramas» y «ahí he puesto los regalos que le hago yo» en L. F. de Moratín; en la Arg. apenas llegó a penetrar esta innovación española, y allí suele emplearse obsequiar en el sentido de ‘hacer un presente’ (le obsequió unos pendientes).

Regalar en su sentido clásico, tampoco parece ser palabra muy antigua, pues no sólo falta en todas las fuentes medievales a mi alcance, sino aun en los glos. de 1400 y en APal. Sin duda varios lexicógrafos han confundido nuestro vocablo con el antiguo regalar ‘derretir, licuar’, por serles desconocida esta voz, de etimología diferente; sin echarles en cara esta ignorancia, me limito a poner en guardia a los críticos ante esta confusión. Aun en el sigtnente pasaje del Conde Luc. estamos ante un ej. de esta voz antigua: «un moro havía una hermana que era tan regalada, que de quequier que veié o la fazién, que de todo tomava recelo e se espantava; et tanto havía esta manera que quando bevía del agua en unas tarraçuelas con que la suelen bever los moros, que suena el agua quando beven, guando aquella mora oyé aquel sueno... dava a entender que tan grand miedo havía d’aquel sueno que se quería amortescer» (xlvii: ed. Knust 214.3; ed. Hz. Ureña, 208): esta hermanita otro día desentierra a un muerto, y para mejor quitarle los vestidos preciosos con que le habían enterrado, no vacila en descoyuntarle el pescuezo con sus delicadas manos. El sentido no es, pues, ‘suave, delicada’, sino muy peyorativamente ‘afectada, gazmoña’, y se trata de una certera metáfora partiendo de la idea de ‘delicuescente, derretido’, comparable a seboso ‘enamorado ridículo’, gachón ‘mimado’, hacer gachas ‘estar creído, mimado’, cat. una pastetes ‘afectadamente aniñada, ceceosa’, etc. Claro que posteriormente este antiguo regalado metafórico se cruzó y combinó inextricablemente con el verbo galicado regalar dando lugar a la frecuencia del uso de regalado ‘educado con regalo’, que sin embargo se diferencia del ej. juanmanuelesco en no tener matiz peyorativo; de todos modos en el habla arcaica de los judíos españoles parecen quedar resabios de este cruce: iȤo regalado ‘hijo único’, el refrán regalado so yo: lo que quero hago; regalado cuando no se trata de hijos ‘privilegiado’ en el mismo dialecto y regalar ‘mimar y criar con demasiado cariño’ (Yahuda, RFE II, 367); marroq. arregalar ‘mimar a un hijo, prodigarle cuidados y cariños’ (BRAE XIV, 572); y aun en la definición que da Nebr. a regalor. halagando: indulgentia») parece quedar un eco de este valor.

Sea de ello lo que quiera, no sería fácil llegar al verbo regalar ‘obsequiar, agasajar’ partiendo de ‘derretir’, mientras que no hay dificultad en explicar este verbo como un préstamo francés. En Francia es sabido que régaler es expresión sumamente castiza en el sentido de ‘agasajar, festejar’ y muy propia y frecuente en los clásicos del S. XVII. No es de creer que sea hispanismo un vocablo favorito de autores tan puristas como La Fontaine, Corneille y Molière; y por lo demás entonces ya no era palabra reciente, pues a pesar del poco cuidado que han prestado los estudiosos del fr. medio y antiguo a las voces que pertenecen al francés clásico y moderno, no sólo régaler se encuentra desde fines del S. XVI, sino que el sustantivo postverbal régal o régale es frecuente desde el XV y la variante rigale aparece ya en 1314 (Fauvel).

Creo que tienen razón Gamillscheg (EWFS) y Wartburg (en la 2.ª ed. de Bloch) al derivar régal de gale ‘regocijo’, voz tan arraigada y productiva en todas las épocas del francés; el cat. regal, que Ag. ya señala en el S. XV, ha de ser también galicismo1. Pero en los detalles es lícito apartarse del juicio de Gamillscheg y Wartburg: régal no es el punto de partida de régaler (aunque éste por casualidad no haya sido documentado hasta más tarde), sino probablemente postverbal, y régaler deriva del antiguo verbo galer ‘pasársela bien, festejar’ (más antiguo que el sustantivo gale); en cuanto al prefijo, claro que no es ri-, sino el corriente re-, y en la forma aislada rigale hemos de ver una contaminación de rigoler (verbo formado por composición de rire y goler = gueuler)2. La opinión del DGén. y de Bloch, según la cual el fr. régaler sería italianismo, choca ya con el carácter poco castizo de las palabras italianas en re- (el prefijo italiano es ri-), y también con el hecho de que los it. regalare «trattar bene, accarezzare» y regalo «lautezza, condimento, squisitezza» son voces tardías que sólo alguna vez aparecen en el S. XVI y sobre todo se encuentran en autores del XVII, por lo cual ya Zaccaria las consideró hispanismos; opinión aceptada por Prati y Migliorini y confirmada por la circunstancia de que no sólo C. de las Casas (1570) se abstiene de registrarlas como italianas, sino que evita su empleo al traducir el cast. regalar y regalo. Lo que desde luego es imposible es aceptar, como hacen Prati y Migliorini, la vieja etimología de Covarr., procedente de Aldrete: «de regalis diximos regalo, como cosa digna de Rey, dada o por voluntad o por obligación que llaman regalía» (Origen, fº 50v°2). Dénsele las vueltas semánticas que se quiera, el adjetivo regal no ha sido nunca cast. ni fr. y por lo tanto mal podía derivarse del mismo el verbo romance regalar (y no de real o royal, si acaso)3. Lo que no puedo decidir es si el it. regalare se tomó del cast. o directamente del francés.

DERIV.

Regalada. Regalado (V. arriba). Regalador4. Regalamiento. Regalaría [Cervantes, Fcha.]. Regalero. Regalo [Nebr., V. arriba]; regalillo ‘manguito’ [1570, C. de las Casas]; regalón [S. XVI, Aut.]. Gall. regalía ‘regalo, delicia’: «roubaba pra dar regalía ó seu bandullo», «para regalía dos que poidan comprender o noso linguaxe» (Castelao 187. 29, 277.16).

1 Más tarde lo predominante es el castellanismo regalo.―

2 No hay que tomar la forma ré- del prefijo como indicio de otra cosa, p. ej. de una procedencia española o italiana. En realidad ignoramos con qué clase de e pronunciaban este vocablo en los SS. XIV-XVI, y en el francés clásico es sabido que por una oleada general de influjo culto ré- desbancó muchas voces a un antiguo re-. Por lo demás, en nuestro caso habría confusión con régaler ‘volver a igualar, alisar’ [h. 1400].―

3 No está a mi alcance la nota del AGI XXXII, 118ss., donde Migliorini trató de regalare por primera vez, y supongo ya en el sentido indicado. De todos modos será nota breve, pues forma parte de una reseña.―

4 En la ac. «palo de media vara de largo, y gruesso como la muñeca, cubierto con una soguilla de esparto arrollada a él; y sirve para alisar y acabar de limpiar las corambres por la parte de afuera» [Aut.] es voz diferente, derivada del fr. antic. régaler ‘nivelar, alisar’ [h. 1400], derivado de égaler ‘igualar’.