GALA, tomado del fr. ant. y med. gale ‘placer, diversión’, derivado de galer ‘divertirse, ir de parranda’, de origen incierto, quizá del fráncico *WALLAN ‘hervir’, ‘bullir, agitarse’ (a. alem. ant. y b. alem. ant. wallan, alem. wallen, ags. weallan; comp. escand. ant. vella).
1.ª doc.: med. S. XV, Suero de Ribera, Canc. de Stúñiga, 168; Nebr.: «gala: elegantia vel lauticia vestium»1.
En portugués tenemos bastantes ejs. desde la Crónica de García de Resende (h. 1500), Gil Vicente, etc. (Moraes, Vieira). En catalán aparece desde fin S. XIV: Crón. del Ceremonioso; J. Roig, Spill, n. 64313; en J. B. Masdovelles y el Tirante (Ag.). En lengua de Oc, esta palabra y su familia faltan casi del todo en la Edad Media: sólo Levy cita un ej. en texto no fechado. En italiano aparece gala ‘fiesta’, ‘pompa’, ‘lujo de vestidos’ desde los Pulci, a fines del S. XV, y se hace común en el XVI y XVII4. En contraste con estas fechas tardías y coincidentes, el fr. ant. gale está ya en Rutebeuf (3.r cuarto del S. XIII), hay algún ej. del S. XIV, y es muy frecuente hasta fines del XV por lo menos (Coquillart); el sentido es ‘placer’, ‘gozo’, ‘diversión’, y faire la gale es ‘entregarse al placer, pasarlo bien, divertirse’. Es visible que gale arranca del verbo galer ‘divertirse’, ‘pasarlo bien’, ‘festejar’, ‘ir de parranda’, a veces con matiz indecente, y casi siempre término familiar y afectivo, que ya aparece en Gautier de Coinci (1223) y permanece usual hasta la misma época y aun en Rabelais, mientras que la locución sinónima galer le bon temps aparece aún en Montaigne y en Cotgrave (1611).
Para la etimología tiene importancia la existencia de variantes con w- inicial, como ya notaron Suchier (ZRPh. I, 431), Gamillscheg (EWFS, s. v.) y Rohlfs (ASNSL CLXXI, 135). En verdad los testimonios de esta variante parecen reducirse a uno solo, citado por Du C. (s. v. galare), y de texto por lo demás idéntico al pasaje de G. de Coinci que figura en God.: se trata, pues, de una variante manuscrita de este autor picardo, muy conforme, por lo tanto, a su dialecto5.
En cuanto a la etimología, debe descartarse definitivamente la de Diez (todavía preferida por E. Thurau): a. alem. ant. geilî ‘orgullo’, ‘rumbo’, ‘ufanía’, pues aunque supongamos una base germ. *GAILA y admitamos que al romanizarse se redujera a *GALA, esta reducción del diptongo sólo se produjo en germanismos muy antiguos, y siendo gale oriundo del Norte de Francia, un *GALA allí hubiera dado forzosamente *giele.
La que propuso Suchier en la citada brevísima nota no ofrece tampoco la base necesaria: el ags. weala (ingl. weal) significa por cierto ‘riquezas’, ‘bienestar’, pero como no conviene fonética ni geográficamente, se apresuraba Suchier a agregar que el neerl. med. wale era preferible; sin embargo, es el caso que esta forma, variante poco común del neerl. med. y mod. wel, sólo parece emplearse como adverbio, en el sentido de ‘bien’, y aunque supongamos que ocasionalmente se sustantivara, tampoco satisfaría en lo semántico; Gamillscheg, que en su EWFS había aceptado este origen sin examen, debió de rechazarlo más tarde, pues no cita el vocablo romance en su R. G.
Schuchardt, ZRPh. XXIX, 331, hablando de los descendientes romances del lat. GALLA ‘agalla (de roble)’, estudia especialmente el it. galleggiare ‘flotar’, ‘agitarse’―explicable por la propiedad que tienen las agallas de sobrenadar en el agua― y el antiguo gallare ‘flotar’ y ‘mostrarse soberbio’ [Dante]6, y dice de paso que el fr. galer es de origen italiano: pero aparte de la forma con w-, no me parece verosímil un italianismo tan vivaz en francés desde princ. S. XIII, y faltaría de todos modos hallar los necesarios eslabones semánticos7.
La explicación más satisfactoria me parece ser la resumida arriba, publicada por Bloch, y probablemente inspirada por Sainéan (Sources Indig. II, 210-1)8, pero en lugar de partir de un gót. *WALLAN, que no convendría geográficamente (en este idioma sólo se halla WULAN), O del alto alemán, es preferible tomar como base la forma fráncica, que sería idéntica, a juzgar por los dialectos más afines9.
En cuanto a la historia semántica de nuestro vocablo y de su familia, en español y en los idiomas afines, hace gran falta una monografía de conjunto, más general y más original que la
de Else Thurau10, que contiene una apreciable reunión de materiales, pero limitada casi del todo al francés. Ahora bien, es un hecho que el español y el italiano, aunque tomaran los vocablos franceses en préstamo, les dieron vida nueva, lozana y original, se influyeron recíprocamente en su uso y reaccionaron también sobre el empleo francés.
Acerca de los usos clásicos en castellano, además de las indicaciones dadas arriba, informa bastante bien Aut. Es muy clásica en particular la ac. concreta ‘atavío, prenda de vestir lujosa’ (Cervantes, Lope, etc.)11. Así gala como galante, galán, galano, alcanzaron gran vitalidad en el Siglo de Oro, y formaron en España más derivados que en parte alguna; no cabe duda que influyeron luego en el uso de las voces francesas y, como reconocen Zaccaria y Migliorini (VRom. I, 85), en las acs. italianas. De ahí el vestido de gala, día de gala, y locuciones semejantes, cuya adopción en la Corte española halló pronto eco en toda Europa: en Inglaterra se habla ya de que «the whole Court put on Galas» en 1625, en Viena el emperador Leopoldo (1658-1705) introdujo gala en el ceremonial de Corte tomándolo de España, y así entró el vocablo en alemán, y si en Francia Voltaire escribe «le gala des Italiens» es probable que este influjo italiano no sea el que allí abrió las puertas al vocablo (vid. Thurau, p. 86).
DERIV.
Galán [med. S. XV, Mendoça, en el Canc. de Stúñiga, p. 24912; 1476, Coplas de J. Manrique13; «galán: elegans, lautus», Nebr.; con matiz familiar, casi despectivo, en el Alfarache de Martí14], del fr. galant15, participio activo de galer [S. XIV], al principio ‘que se divierte’, ‘atrevido, emprendedor’, después ‘enamorado’, ‘galante’ (sobre todo desde el S. XVII)16; primitivamente se empleó galán como sustantivo o como adjetivo, así p. ej. en el Quijote o en Góngora (V. los respectivos glosarios), y aun como adjetivo de una sola terminación con nombres de objetos17; pero pronto, según el modelo de otros adjetivos (buen ~ bueno, etc., comp. el caso análogo de fulán > fulano), se tomó galán por forma proclítica apocopada de un adjetivo de dos terminaciones, creándose galano, y acabó por especializarse galán en el uso sustantivo; galana figura ya en el aragonés Juan de Tapia, a mediados del S. XV18, galanamente está en el Dicc. de Nebrija, que emplea también galana cosa en su artículo elegante, y el italiano Pedro Mártir de Anghiera, a fines del S. XV, dice que «hispánico idiomate elegantes galanos appellant»; de ahí pasó ocasionalmente a Italia, donde el Aretino y Cecchi emplean galan y galani en frases bilingües hispano-italianas y se sustantivan galano y galana en el sentido de «cinto, nodo o cappio di nastro» desde fines del S. XVI y en los XVII y XVIII (Zaccaria). En cuanto al cast. galante, es por su origen duplicado de galán y galano, pero de aparición más tardía (Aut. sólo desde G. del Corral, 1628, aunque ya está una vez en Santillana y otra en el italianizante Torres Naharro), limitado al principio al uso ante sustantivo en vocal inicial, y como sinónimo riguroso de galano, del cual al fin era variante fonética («galante estilo», en Góngora I, 356); después se aclimató con el sentido actual, procedente al parecer de Italia («es hombre galante, como dizen en Italia» escribe Cervantes, Quijote II, xxv, 97; vid. Gillet, Propaladia III, 691), donde era galicismo nacionalizado desde fines del S. XV; falta averiguar la procedencia francesa o italiana de los derivados galantería [1517, Torres Naharro, Sold. IV, 142, y Tinell. V, 288; 1611, Covarr.; Cervantes, Coloquio de los Perros, 1613, ed. Cl. C., 283; Paravicino; Vélez de Guevara], galantear [Góngora; Oudin; el it. galanteggiare aparece en el S. XVII], galanteo [mediados del S. XVII, Rebolledo; de ahí el it. galanteo que aparece una sola vez, en el mismo siglo y en traducción del castellano]. Galancete [Quevedo]. Galanía, ant. [h. 1570, Ambr. de Morales]; galanura [Aut.]. Engalanar [1583, Fr. L. de León; falta aún en Nebr. y en C. de las Casas, 1570]. Galar ‘ganar’ gnía. y galear ‘bravatear’ [1609, J. Hidalgo], el primero quizá derivado directo del fr. ant. galer. Véase además REGALAR.
1 Zaccaria cita gala en doc. de 1492 de la colección Fernández de Navarrete.― ↩
2 Es de notar la ausencia en las Coplas de Jorge Manrique, donde había ocasión de emplear el vocablo y donde figura galán.― ↩
3 «De mes parentes / e benvolentes / una ·n triàs / qual me semblàs / voler menys gala, / e pensant quala / ja m’alegrava».― ↩
4 Zaccaria, s. v. Es verdad que gala en la ac. «striscia di trine o di pannolino lavorato a trapunto con ago», todavía viva en la actualidad, aparece ya una vez en Boccaccio, pero éste es otro vocablo, derivado regresivo de galone, de otro origen etimológico, vid. GALÓN.― ↩
5 «Ce tant peu qu’il avoit wala, / et geta puer [‘lejos’] si folement / que povertés isnelement / a son oncle le racacha [= fr. rechassa]». Es, pues, transitivo, en el sentido de ‘gastar en fiestas’, ac. sin otros ejs., aunque el vocablo es también transitivo en la frase galer le bon temps. Roquefort tiene también un artículo waller, sin ejs., que define de la misma manera: se fundará, pues, en el pasaje citado por Du C. En cuanto al fr. ant. walois ‘alegre’ por lo común gallois, será prudente mantenerlo aparte: parece ser idéntico al étnico gaulois, que tiene también el sentido de ‘libertino’ y procede del germ. WALHA ‘romance, francés’. Pero deducir de ahí el fr. galer, como parece proponer Ettmayer (ZRPh. XLVII, 49), tiene poca verosimilitud; además de que la fecha de galois es posterior, creo que la ac. ‘libertino, amigo de placeres’ se debe justamente al influjo de galer.― ↩
6 En los Pulci, segunda mitad del S. XV, tiene aproximadamente el sentido del fr. galer, pero es probablemente galicismo.― ↩
7 M-L, REW, 3655, se adhirió a la opinión de Schuchardt, si bien notando que el it. gala y galante han de ser a su vez galicismos posteriores; pero en la tercera edición borró totalmente esta etimología, aunque sin reemplazarla por otra.― ↩
8 Ahí hay que rectificar la confusión con el fr. jaillir (ant. y dial. galir), que según muestra la j- ha de corresponder a una base completamente diversa.― ↩
9 Wartburg, en la nueva ed. de Bloch, reemplaza esta etimología por una variante de la de Suchier, partiendo de un fráncico *WALA ‘bien’. Aunque admitamos la posibilidad de que ésta fuese la forma fráncica (a pesar de que se esperaría más bien *WËLA (gót. waíla, ags. y neerl. wel, a. alem. ant. wëla, y a veces wola y wala), desde luego es forzado en el aspecto semántico suponer que el verbo galer derive de un adverbio.― ↩
10 «Galant», ein Beitrag zur französischen Wortund Kulturgeschichte, en Frankfurter Quellen und Forschungen zur germ. u. rom. Philol., 1936, 113 pp. Comp. ZRPh. LVIII, 401-10, y la reseña citada de Rohlfs.― ↩
11 Nótese la frase hacer alguna gala ‘gastar algo para vestir bien’: «vengo a Madrid a verme con mi suegro / y a ver esta divina cortesana. / ―De vuestro bien, si lo ha de ser, me alegro. / ―Aquí querría hazer alguna gala / y entrar a vistas con vestido negro», Lope, Marqués de las Navas, v. 468.― ↩
12 «De las que han grand dolçura, / galanes non vos fiés».― ↩
13 «¿Qué se hizo el rey don Joan? / Los infantes de Aragón, / ¿qué se hizieron? / ¿Qué fué de tanto galán, / qué de tanta invinción / que truxeron?, copla XVI, v. 4.― ↩
14 «Y como iba embebecido y descuidado, siento que me dan un golpe en el hombro y un empellón diciendo: ―apártese, galán―; vuelvo la cara, y veo era un corchete o alguacil que hacía lugar a un alcaide de casa y corte», ed. Rivad., p. 411. Comp. sentidos semejantes en el francés de los SS. XVI y XVII, Rabelais, Despériers, Lafontaine (Thurau, pp. 24, 30, 66).― ↩
15 Para los sentidos variadísimos y algo vagos que toma en el francés del S. XVII, V. el interesante estudio de Brunot, en su Hist. de la Langue Fr. III, 236-41.― ↩
16 Inadmisible, por evidentes razones fonéticas y de toda clase, es derivar, como hacen algunos, el cast. galán del ár. ġulâm ‘muchacho’.― ↩
17 «Los valerosos Zegrís / con libreas muy galanes, / todos de morado y verde, / marlotas y capellares», Pérez de Hita, Guerras C. de Granada, ed. Blanchard I, 149.― ↩
18 «Aunque seas más galana, / de muchos serás represa, / que eres tornada francesa, / non quieres ser catalana», Canc. de Stúñiga, p. 201. ↩