PRURITO, tomado del lat. prūrītus, -ūs, ‘comezón’, derivado de prurire ‘sentir picor’.

1.ª doc.:. Terr.; Acad. 1817.

En aquél está ya con el sentido metafórico ‘deseo irresistible’: «las mujeres suelen tener prurito de hablar, y los parleros de decir cuanto saben».

DERIV.

El verbo PRURIRE, disimilado vulgarmente en *PRȢDզRE, se conservó en varios romances: it. prudere, oc. pruzir, cat. y port. pruir, gall. pruir ‘picarle (algo a uno)’, en presente proi (loc. cad’un raña [‘rasca’] onde lle proi, IrmFa. 327) o proe («rañarse cando proe» ‘rascarse cuando se siente comezón’ Castelao 65.5), cuya área se prolonga hasta el asturiano: pruir «sentir vivo deseo», estar pruyéndoy’a un les uñes ‘tener comezón de pelear’ (V, R). Prurigo. Pruína ‘helada que quema las plantas’ ant. (sólo en Juan de Mena), tomado de pruīna íd., voz afín a prurire (propiamente ‘arderle a uno la piel’).