PONCELLA, ant., ‘doncella’, tomado del cat. poncella, de origen incierto, probablemente del lat. vg. *PŬELLէCELLA, diminutivo de PUĔLLA ‘muchacha’.

1.ª doc.: Berceo.

Ponzella aparece rimando en -ella en Berceo, Mil., 117, 327, ponzela (o poncella en otro ms.) en Mil., 823, punçella en Loores, 29, ponçella (también en rima) en Alex., 1366, 2245 (P trae punçella en el 2.° pasaje) siempre en el sentido de ‘virgen, doncella’; más tarde se hace desusado el vocablo. Y aunque lo emplean Covarr., Mariana y la Crón. de Álvaro de Luna (ésta da poncela), es con referencia a Juana de Arco (Cuervo, Obr. Inéd., 238)1: se trata, pues, de una adaptación del fr. pucelle a la forma del antiguo catalanismo, que todavía se recordaba. Nunca parece haber sido voz de uso general, y la falta de diptongación prueba que hubo de tomarse de otro romance, evidentemente el cat. puesto que la forma fr. no conviene y en oc. predominan de mucho las formas piuzela, piucela, pulcela, sobre puncela. Es verdad que si partiéramos de un diminutivo en -CէLLA (como en DOMNICILLA > doncella) habría la posibilidad de mirarlo como voz autóctona, pero esto es inverosímil dado el empleo tan limitado del vocablo, y los diminutivos en -CILLA son muy raros. Por otra parte ni en oc. ant. ni en catalán conozco otra pronunciación que la correspondiente a Ĕ: ponclla en Barcelona y Mallorca (Figuera), pulcella:bella en Jaufré (Appel n. 43), pieusela:bela en Amanieu de Sescàs (Rayn., Choix II, 268), pucela:isnela en Peire Vidal (Be·m pac). Penetró también en port. ant. («fremosa poncela, queredes vos mim por entendedor», Canc., da Vat., 689), y en vasco (b. nav. phunzela, Van Eys, Salaberry).

En cat. poncella ha sido de uso general en todo tiempo, aunque hoy apenas vive más que la ac. secundaria ‘capullo de flor’ (muy viva en todas partes), mas la primitiva es vulgarísima en la E. Media; hoy se pronuncia con o, así en Valencia (Escrig) como en Mallorca (Amengual; BDLC XIII, 228; 294), y Ag. cita varios ejs. medievales de esta grafía; en lo antiguo es muy común puncella (Usatges, N. Cl., 112; Costumbres de Tortosa, 233; Senescal d’Egipte, 149; Filla de Contastí, 74; Jaume Roig, n. 15970; ej. del S. XV en Ag.). Además del cat. y el galorromance conocen el vocablo el milan. ant. polçella, ponç-, sobreselv. purɊchala, svcr. pùncjela (el it. pulcella, -zella, es literario y anticuado, suele referirse a Francia, y es galicismo).

Se ha discutido largamente acerca de la etimología; véase sobre todo Diez, Wörterbuch, 258; G. Paris, Rom. XV, 446; Wallenskjöld, Mél. A. Thomas, 1927, 489-92; Margit Sahlin, Studia Neophilol. X (tienen hoy poco interés De Gregorio, ZRPh. XXXIV, 373-4, y artículos anteriores citados en el REW 6819). La duda sólo puede estar entre *PŬLLէCELLA, diminutivo de PŬLLA, ‘hembra de animal joven’ (comp. lo dicho sobre POLLO), y *PŬELLէCELLA, diminutivo de PUELLA; las formas pulicella, pulicellus, pullicla, del bajo latín arcaico (S. VI), no aclaran en absoluto esta duda; en cuanto a la n del cat. y el cast. se explica por disimilación de las dos L. G. Paris, Wallenskjöld y Gamillscheg se deciden por el segundo étimo, Diez y Wartburg (en Bloch, 2.ª ed.) por el primero, M-L. (REW3) y Bloch vacilan entre los dos. Desde el punto de vista morfológico ambos son buenos, comp. DONCELLA < DOMNICILLA < DOM(I)NA; en lo semántico aquél es preferible, pues PULLA aplicado a una mujer es poco frecuente y en general demasiado tardío para que resulte verosímil la creación de *PŬLLICELLA en un sentido tan esencial, en el latín vulgar de toda Francia y parte de España e Italia; esta razón no es decisiva, pero tiene un peso grande.

En lo fonético ninguno de los dos es bien claro, pero no creo que la pérdida de la primera E de *PUELLICELLA cause escrúpulo a nadie. El fr., el oc.2 y una parte de las formas catalanas postulan una base con U cerrada, mientras que parte del cat., el milanés y el rético postulan U abierta. Esta vacilación recuerda el tratamiento de la U de DŬAS, TŬA, SŬA > cat. dues, tua, sua, frente a oc. doas, toa, soa (pero en muchos textos duas, tua, sua), fr. ant. does, toe, soe; es verdad que la distribución geográfica no es la misma, sobre todo en lo que respecta al fr. y al oc., pero la ü tiene mayor extensión en el caso de FŬIT, FŬĔRUNT, FŬĔRAT > fr. fut, furent, fure. Así, pues, es posible en rigor explicar fonéticamente partiendo de *PUELLICELLA, y aunque quede alguna dificultad no es de gran monta; por otra parte en el caso de *PŬLLICELLA existe la misma dificultad, pero con carácter más grave, para lo cual es menester echar mano de un cruce con PȢTUS, que igualmente podría aplicarse al otro étimo, si fuese menester, y que no es muy verosímil dado que precisamente PUTUS no ha dejado descendencia en galorromance y catalán (a no ser en el sentido de ‘prostituta’, tan alejado). En una palabra, el étimo *PUELLICELLA es preferible; otros que se han propuesto (PULICELLA ‘pulguita’, PUERICELLA de PUER, y *PŬDICELLA de PŬDզCUS ‘púdico’) ni siquiera pueden tomarse en consideración3. Spitzer (Rom. LXXII, 100-7) defiende ingeniosamente la base *PȢLICELLA ‘pulguita’, a base de frases como ego *pulicella... ‘yo, pulguita vuestra...’, dichas por una sirvienta a su dueña. Realmente que hubiera algo de esto es muy concebible, y esta etimología puede ahora tomarse en serio, teniendo en cuenta los curiosos paralelos onomásticos que aduce (Sterculus, Vespula...) y la frase de humildad ego pulex que halla en Rufino y otros padres de la Iglesia. De todos modos el lenguaje servil es algo harto diferente de ese producto retórico que es el estilo de los padres de la Iglesia; pese a la circunstancia realmente curiosa de que en la Ley Sálica pulicella designa un personaje más bajo socialmente que la ancilla cellaria, el propio Spitzer no se declara convencido del todo, y desde luego yo tampoco. En todo caso sus argumentos fonéticos no son oportunos: la grafía pulicella (con -l- sencilla) de la Ley Sálica es demasiado tardía para significar nada, y la evolución oc. piuzela (= piuze) nada prueba en favor de PULICELLA más que en favor de PU(E)LLICELLA.

1 Pero Díaz de Games, Victorial, ed. Mata Carriazo p. 238, utiliza puselas con referencia a las damas francesas.―

2 El oc. ant. piucela es diferenciación normal de Ȯcela.―

3 Contradicen directamente el último, además del pulicella de la Ley Sálica y de una capitular de Clodoveo (a. 500-511), el milan. ant. polçella, el pulcella de la Cantilena de Sta. Eulalia, y pulcela en dos textos occitanos citados por Levy y Raynouard. También postulan una base con -LC- la forma oc. general piuzela, y la cat. arcaica pucella (Vidas de Santos del S. XIII: AILC III, 209). Entre las etimologías desechables pongo una base *PȢ(B)ULICELLA, dimin. de *PȢBŬLA ‘pubis, pelo de las partes sexuales’ (comp. arg. pendeja ‘jovencita’ junto a pendejo ‘pelo íd.’), en la que había pensado yo mismo; aunque sería más sencilla fonéticamente que *PULLICELLA y no mucho más construida, le fallaría una base importante si es verdad, como parece, que el rum. pulă ‘miembro viril’ no viene de *PUBULA, sino de PULLA (comp. la voz castellana correspondiente). Sea como quiera, *PUELLICELLA me parece preferible.