PLEPA, ‘persona o animal lleno de defectos en lo físico o en lo moral’, origen incierto.

1.ª doc.: Bretón de los Herreros (que escribió desde 1820 a 1860), en Pagés; Acad. 1884, no 1843.

Aun cuando se aplica a hombres y a animales machos suele decirse una plepa, V. el ej. de Bretón, y así sigue siendo usual hasta hoy (sin embargo, el ecuatoriano Montalvo escribe el plepa). Parece ser palabra oriunda del Noroeste, pues hay en gallego plepa o prepa «maula, carga», y en asturiano «plepa f.: engaño con que se embauca a alguno; la persona achacosa: estar fechuna plepa; meter a un plepes: embaucar a alguno» (Vigón)1; en este dialecto hallamos además «aplipayar, vid. apocar [que falta]; entristecerse, rodearse de cuidados por efecto de los achaques» (Rato). Si no hay aquí una definición tendenciosa influída por un prejuicio etimológico; como las que a veces suele dar Rato, esto indicaría relación con el ast. plipayu ‘cada una de las basas de los pegollos o puntales en el hórreo’, que tiene variante pilpayu (Rato, s. v. orro y pegollera). Acaso sea éste variante de PERPIAÑO, gall. prepiaño, pues los pilpayos son precisamente piedras, como lo es el perpiaño, aunque la función de ésta sea distinta. Pudo haber variante *plepayo, de la cual sería plepa un derivado regresivo. Pero faltaría encontrar comprobaciones del paso de ‘apuntalar’ a ‘tratar como a persona achacosa’ o del de ‘piedra’ a ‘objeto inútil’ y además todo esto queda algo incierto y vago. Sugestiones etimológicas muy inciertas en Spitzer, MLN LXXII, 1957, 585.

1 Además murc. plepa ‘molestia, alifafe’ (G. Soriano, con la inverosímil etimología fr. plaît pas).