PETREL, ‘ave marina del género Procellaria’, voz documentada primeramente en Inglaterra y Francia, de origen incierto.

1.ª doc.: Acad. 1899 o 1914.

No tengo documentación anterior de este vocablo en castellano, portugués ni catalán (petrell)1; el fr. pétrel aparece ya en 1699, el ingl. petrel va en 1676 (escrito pitteral). Si el vocablo fuese de procedencia iberorrománica se podría pensar en una forma mozárabe de PETRARIUS, derivada de PETRA, pues el petrel anida en las rocas; no habría dificultad fonética, pues esta base ha dado Petrer en el Sur de Alicante (Petrel en castellano), Petrairs en valenciano antiguo (Repartimiento de Valencia, hoy Patraix junto a la capital valenciana). Pero la aparición tardía del vocablo en la Península obliga a abandonar, al menos provisionalmente, esta etimología. Se ha venido repitiendo que petrel es derivado de PETRUS porque se ve muchas veces a esta ave como si fuera sobrenadando en el mar, y así se le habría comparado con el milagro de San Pedro andando sobre las aguas, en apoyo de lo cual se aduce el alem. petersvogel, propiamente ‘ave de S. Pedro’, pero esta forma parece ser tardía y seguramente es adaptación de la inglesa o francesa por etimología popular; ahora bien, para admitir esta etimología sería preciso que el vocablo hubiese pasado de Inglaterra (donde se dice Peter por ‘Pedro’) a Francia (donde es Pierre), pero el caso es que entonces no se explica el sufijo. Por el contrario Spitzer (ZRPh. XLII, 7-9) indica que el petrel deja oír una especie de crepitación durante sus amores, lo que autorizaría a identificar con un fr. dial. péterel ‘pedorrero’ (comp. el fr. antic. pétereau ‘especie de cañón de artillería’, God. VI, 131); Baist piensa en lo mismo, con la posibilidad de otra explicación semántica no bien precisada (ZRPh. XLIII, 91-92), comp. el norm. chievent y petit puant usual en el dep. de Finistère (Rolland II, 385). Quizá sea éste el origen, pero es inseguro.

1 Está en Fabra, pero no Ag., Griera (Tresor), BDC XXI, Amengual ni Escrig. Ni el DAlcM. ni Maluquer, Ocells de les Terres Catalanes, ed. 1973, p. 264, dan datos anteriores a 1916. Lo único arraigado en tierras baleares y valencianas es baldriga o baldritxa, ave casi igual, aunque no del todo (vid. PERDIZ). El cast. petrel no figura en la lista de aves malagueñas, por lo demás poco extensa, que da Medina Conde.