PALAFRÉN, tomado del cat. palafrè (pl. -frens), y éste del fr. ant. palefrei, que a su vez procede del lat. tardío PARAVERDUS ‘caballo de posta’, derivado de VERDUS íd., voz de origen céltico.

1.ª doc.: palafré, Cid, etc.

La forma arcaica sin -n aparece también en muchos textos de los SS. XIII y XIV: los Aranceles Santanderinos, la Disputa del Alma y el Cuerpo, el Apol. (130c), los Proverbios de Salomón (pl. -freses, Homen. a M. P. I, 276), la Gr. Conq. de Ultr. (p. 633), vid. RFE X, 118, y M. P., Cid (s. v.). Palafrenes aparece ya en el Alex., palafrén en un romance citado por M. P., en Covarr., Cervantes, Góngora, etc. Ninguna de las dos formas puede ser autóctona en castellano, pues PARAVERDUS habría dado *palabredo o a lo sumo *palafredo. En autores catalanes encontramos ya palafrè varias veces en el S. XIII (Lulio, Meravelles, N. Cl. II, 58; III, 70) y palafrei (rimando con rei) en Guillem de Berguedà, fin del S. XII (Raynouard); pero ni en catalán ni en lengua de Oc (palafré) puede ser tampoco indígena, pues aquí habría que esperar *palauré y allí *palaureu; indudablemente se tomó del fr. arcaico palefrei (como revela la forma de Berguedà), en el cual se explica mejor que en lengua de Oc el paso de *palevrei a palefrei por influjo de. frein ‘freno’, de significado afín; el it. palafreno es también occitanismo.

El latino PARAVERDUS se encuentra en fuentes romanas muy tardías (Codex Justinianeus), en lugar del sinónimo VERDUS, que es algo anterior (desde Marcial); formado éste con la preposición céltica VE- ‘junto a’ y RAEDA ‘coche de cuatro ruedas’ (de la misma familia indoeuropea que el alem. reiten, ingl. ride ‘ir a caballo’; comp. VEREDA). En PARAVERDUS se agregó la preposición griega παρĮ , sinónima del célt. VE-, gracias al influjo griego, que se hizo sentir junto al céltico en la terminología de las postas romanas (vid. Bloch, s. v. palefroi); lo más probable es que como traducción del célt. VERDUS se formara en el Imperio de Oriente un híbrido *PARARDUS, del cual vendría el a. alem. ant. pfarit (alem. pferd ‘caballo’), b. alem. ant. prid, neerl. med. paert; y al propagarse *PARARDUS al Occidente romano se cruzaría allí con VEREDUS, resultando PARAVEREDUS: de otra manera costaría de comprender la acumulación de las preposiciones. Es inverosímil la etimología de Skok (ZRPh. LIV, 197-8), que quiere partir del hebr. pered (fered) ‘caballo’, con añadidura de la preposición griega.

DERIV.

Palafrenero.