ORTEGA, ‘gallinácea semejante a la avutarda, de tamaño algo mayor que una perdiz’, parece ser alteración popular del lat. ortyx, -ǰgis, gr. ƽρτυξ, -ȌƔος, ‘codorniz’.
Este autor dice que es algo mayor que la ganga y menor que el sisón. No parece ser denominación muy popular, pues no figura en diccionarios independientes de
Aut., ni tengo otros testimonios de autores, a no ser el de Málaga, de Medina Conde, que dice son especie de avutardas y se crían allí (ed. 1789, p. 198). Es lo mismo que la
CORTEZA, que parece ser denominación más popular, pues ésta y no
ortega figura en Juan Manuel y en otros. Ni en lo semántico ni en lo fonético es enteramente normal el paso de
ortyx a
ortega por vía hereditaria; pero es comprensible esta alteración si se trata de un término semiculto introducido por naturalistas en fecha más o menos antigua. El apellido
Ortega (ya documentado en Santoña en 1220, M. P.,
D.
L. 5.44, y en Miranda de Duero, en 1532, Leite de V.,
RL VII, 283) no vendrá de este nombre de ave, sino más bien de
ortega variante de
ORTIGA (véase). En cuanto a (
h)
ortegón, nombre de un árbol de gran altura propio de Puerto Rico (Malaret,
Vocab.
de P.
R., s. v.;
Por mi Patria y por mi Idioma, p. 33), no es probable que tenga que ver con ninguno de los dos; quizá sea indígena.