ORTEGA, ‘gallinácea semejante a la avutarda, de tamaño algo mayor que una perdiz’, parece ser alteración popular del lat. ortyx, -ǰgis, gr. ƽρτυξ, -ȌƔος, ‘codorniz’.

1.ª doc.: 1644, Martínez de Espinar (Aut.).

Este autor dice que es algo mayor que la ganga y menor que el sisón. No parece ser denominación muy popular, pues no figura en diccionarios independientes de Aut., ni tengo otros testimonios de autores, a no ser el de Málaga, de Medina Conde, que dice son especie de avutardas y se crían allí (ed. 1789, p. 198). Es lo mismo que la CORTEZA, que parece ser denominación más popular, pues ésta y no ortega figura en Juan Manuel y en otros. Ni en lo semántico ni en lo fonético es enteramente normal el paso de ortyx a ortega por vía hereditaria; pero es comprensible esta alteración si se trata de un término semiculto introducido por naturalistas en fecha más o menos antigua. El apellido Ortega (ya documentado en Santoña en 1220, M. P., D. L. 5.44, y en Miranda de Duero, en 1532, Leite de V., RL VII, 283) no vendrá de este nombre de ave, sino más bien de ortega variante de ORTIGA (véase). En cuanto a (h)ortegón, nombre de un árbol de gran altura propio de Puerto Rico (Malaret, Vocab. de P. R., s. v.; Por mi Patria y por mi Idioma, p. 33), no es probable que tenga que ver con ninguno de los dos; quizá sea indígena.