OMBLIGO, del lat. ŬMBէLզCUS íd.
1.ª doc.: orígenes del idioma (J. Ruiz, 477a).
El lat. umbilicus se derivó en época pre-itálica del nombre indoeuropeo de lo mismo (común con el scr. nabhiɅ, el germ. nabil, etc.), el cual, sin sufijo, dió el lat. umbo, -onis, nombre de muchos objetos convexos o abultados, como la bloca o bulto central del escudo, del broquel mismo, del bulto que forman los pliegues de la toga o un mechón de cabellos, un promontorio, etc. Un descendiente romance aislado (no observado hasta ahora) se conservó en Galicia, en una voz, dialectal allí del SE.: amboa ‘tinaja de barro con su espita’ (Sarm. CaG. 136r) que éste señala en Lemos y el P. Sobreira allí y en Santalla de Rey, con variante amoa en Ribadavia (DAcG.) < *ombõa UMBONE; no se conservó ni en portugués, y fonéticamente no puede venir, de amphora. Lo que sí convendría estudiar mejor es si BOMBONA no es en realidad otro sucesor de UMBO: oriundo del Sur de Francia y algo cambiado por influjo de bomba; y si redoma y el mozárabe retumba no son lo mismo en combinación con ROTA O ROTUNDUS. acrítico>
DERIV.
Ombligada; ombligado ant. (‘lo que tiene ombligo’, Nebr.). Ombliguero ‘venda que se pone a los recién nacidos’ [Aut.], cub. ‘fracción de un potrero establecida para que los animales vayan cambiando de pastos’ (Ca., 170). Cultismos: umbilical [Aut.]; umbilicado.