LUGANO, ‘pájaro cantor semejante al jilguero y al verderón, Fringilla spinus’, emparentado con el port. lugre, cat. llucaret, -eta, oc. lucre, it. lucherino, alto-it. lùgaro, lugarin, de origen incierto; quizá del lat. LȢCNUS ‘de la aurora’, porque gusta de cantar a esta hora.

1.ª doc.: lugaro, 1405, Fco. Imperial; lugano, 1566, Arbolanche; 1646, Estebanillo (Aut.).

Describiendo Imperial una visión que se le presentó al despertarse, «passando el aurora, viniendo el día», dice «cantavan lugaros a los rruyseñores, / commo acostumbran al alva del día». El verso de arte mayor exige el acento en la a de lugaros (aunque es verdad que en esta poesía hay varios versos mal medidos). Canc. de Baena, n.° 226, v. 31. En Aut. se imprime con acento el pasaje del Estebanillo «agachándome como quien andaba a caza de luganos»1, y define «páxaro pequeño de jaula, del tamaño de un pardillo; es variado de colores, pardo, verde y pajizo; canta bien y suele tomar el canto de otros pájaros». Terr. da lugano como variante de lujano y explica éste como «ave pasajera, que baja de las Sierras en octubre, es menor que un canario, de un verde hermoso, y la corona de la cabeza negra; enjaulada, lo cual se hace fácilmente por ser muy pacífica y mansa, apenas cesa en el canto, que es bastante agradable»2. La Acad. lo registra en 1843 como equivalente de jilguero; pero ya en 1884 se había restablecido la definición de Aut., que más tarde se ha detallado más.

El dicc. de Figueiredo registra el port. lugre como pájaro conirrostro, especie de jilguero verdoso, Chrysomitris spinus, Lin.; no tengo otros datos portugueses. En catalán Ag. registra lluqueret «ocellet de bardissa», es sinónimo de verduell según el rosellonés Companyó y en este dialecto ya se registra en 1745; Griera da llucareta ‘Fringilla citrinella, L.’ como usual en Vinaroz y Burriana; según Fabra es Carduelis citrinella, ‘pájaro de un gris amarillento, menos oscuro en las partes inferiores’. En lengua de Oc lucre, usual en Provenza y ya documentado en Zerbin (primera mitad del S. XVII), particularmente en el Var y en Toulon, también en el Hérault, mientras que en Niza dicen lieucre: es la Fringilla spinus de Linneo, tarin en francés, zeisig en alemán, siskin en inglés (Rolland, Flore Pop. II, 191-2; X, 63-64). Lucardillus aparece en Niza en un texto bajo-latino de 1333 (Du C.). En italiano se dice lucherino o lucarino; lugarin ya aparece en un vocabulario veneciano de fines del S. XV, mientras que otros dos glosarios del veneciano rústico y del veronés, del mismo siglo, registran lugaro; según Mussafia (Denkschriften d. Wiener Akad. XXII, 175) hay las formas dialectales siguientes: venec. y genov. lùgaro, friul. lùjar, Lucca locorino, venec. y veron. lugarin, friul. lujarin, Cremona, Romagna lugaren, Parma logarein, Génova lügain [< lügarin con pérdida fonética de la -r-], Tirol lugherim, Brescia, Crema lugherì, Bergamo logan, Milán legorin, Crema legorì, Como ligurin.

Comparando estas formas se adivina que lucarino, lugarino, es la primitiva, de donde lügurin > ligurin > legorin3; como estas formas en -in(o) tenían aspecto diminutivo, se sacarían de ellas seudoprimitivos como los ejs. citados de lùgaro, en el dialecto líguro-provenzal de Menton lugaro, sic. lucaru, por otra parte sic. lécora, napol. lecura, maltés écora. También el port. lugre se explica fácilmente por regresión de un *lug(ue)rinho, oc. lucre por un *lucrin, y aun la dualidad entre el cast. lugano y el antiguo lugaro se explicaría más fácilmente por derivación retrógrada de un *lugarino parcialmente disimilado en *lugarino. En términos parecidos M-L., REW 5135, quien declara desconocido el origen. No es convincente el étimo de la Acad. lūcānus ‘del bosque’, que carece de justificación semántica: ni éste ni el primitivo lūcus ‘bosque’ son palabras heredadas por el latín vulgar ni el romance4. El pasaje de Francisco Imperial y la denominación dialectal francesa pinson d’aube (Haute-Marne), sugieren un *LȢCANզNUS derivado de LȢCNUS ‘propio del alba’; voz ésta continuada en romance por oc. lug(r)an ‘lucero matutino’ (REW 5133); de ahí *LUCARINUS por disimilación; el cast. lugano podría ser el propio LUCANUS o bien regresión de *LUCANINUS. La -c- de las formas catalanas y occitanas se debería a alguna contaminación. De todos modos, convendría también tener en cuenta el cat. lluer ‘Carduelis spinus’ (cf. Gulsoy, Sanelo, s. v.); parece haber además un navarro lleguacero que Azkue emplea para traducir el roncalés beurtxori ‘estornino’. El fr. tarin y los germánicos zeisig, siskin (de procedencia eslava), parecen ser onomatopeyas imitativas del canto.

1 No son raros los errores de acentuación en Aut. Comp., sin embargo, la vacilación entre JILGUERO y el gall. xílgaro, hisp.-am. jílguero. De hecho hoy lugano es como se dice en Andalucía (A. Venceslada): la vacilación acentual se explica por el probable carácter regresivo de lugano, sacado de luganino (V. abajo); está ya luganos (en verso, pero con acento ambiguo) en el navarro Arbolanche (1566), 22rl0.―

2 Esta forma lujano difícilmente puede explicarse si no es por pronunciación gallega. Falta el vocablo en Valladares.―

3 De ahí ligurinus en fuentes bajo-latinas post-medievales, citadas por Du C. y Diefenbach, Gloss. Lat.-Germ., que corresponderán al uso vulgar del Norte de Italia. De ahí deducía la Crusca, seguida por Diez, que el vocablo venía de *LIGURINUS ‘pájaro de Liguria’, lo cual carece de base, naturalmente. Otra forma lucar tardía, en Diefenbach, será latinización del alto-it. lugar(o).―

4 Claro está que el anticuado luco ‘bosque’, sólo empleado por Juan de Mena, es latinismo crudo. Hay sólo algún nombre de lugar, vid. Simonet, s. v. luc, lúcar, lúco, luch.