JOFAINA, del ár. Ǥufáȳna, diminutivo de Ǥáfana o Ǥáfna ‘escudilla grande, fuente honda’.
Hallamos también
aljufaina en Quevedo,
aljofaina en varios autores de los SS. XVIII y XIX,
alcofaina a mediados de aquel siglo en Torres Quevedo (
DHist.) y hoy es popular en Méjico (R. Duarte),
jufaina en
Aut. como variante popular,
cofaina es vulgar en muchos puntos: en Murcia, Bilbao (Arriaga), lo he oído a gente de Santander, y G. de Diego afirma que con este carácter es de extensión general (
RFE VII, 386). Aunque arraigado en gran parte de España, el uso de
jofaina y sus variantes no se extiende a todo el dominio de lengua castellana.
Palangana es más popular en gran parte de América, desde la Arg. a las Antillas, y asimismo en Almería (donde
p. es más conocido que
j., aunque más bien se dice
zafa) y muchos puntos del Norte de la Península. La variante con
c se explica por contaminación de otro vocablo, seguramente el ár.
qúffa ‘espuerta, capazo, cenacho’, de donde el cat.
cofa, cast. y port. (
al)
COFA1. En árabe
Ǥufáȳna no es más que el diminutivo del vocablo corriente, que era
Ǥáfna o Ǥáfana, clásico aquél y vulgar este último (Dozy,
Suppl. I, 201
a). Puede ser una escudilla de madera, una fuente honda, o también una gran fuente de barro. Este mismo primitivo pasó también al castellano, con igual significado:
aljáfana [1525, R. de Nola, p. 91; y otros autores de 1599 y 1614],
aljébana (1599), murc.
aljébena2.
Se conoce la etimología desde Dozy (
Gloss., 144).