JABA, amer., ‘cesto a manera de jaula que sirve para el transporte de objetos frágiles’, del taíno haba íd.
Así Oviedo como el P. Las Casas y Aguado escriben
haba (o
hava) y los dos primeros atestiguan que es palabra de los indios de Haití y Cuba. Los españoles extendieron además el vocablo a la América Central y a toda la América del Sur, salvo los países del Río de la Plata. Hoy una variante
waba o
wapá sigue viva entre los caribes de Tierra Firme, y Schuchardt (
Litbl. VII, 73) sospecha que de ahí venga
waïà íd., empleado en el dialecto criollo francés de Trinidad. No tiene fundamento la opinión de F. Ortiz (
Ca. 39) de que sea variante de
ALJABA, pues el propio Oviedo, en otro pasaje que no cita Ortiz, afirma que es palabra indígena, y si viniera del mismo origen que
aljaba no se explicaría la antigua grafía con
h-. Lenz,
Dicc. 415; Friederici,
Am.
Wb., 292-3; Cej. IX, § 213.