HABER, del lat. HABୱRE ‘tener, poseer’.
1.ª doc.: aver, orígenes del idioma (Cid, docs. del S. XII, etc.).
DERIV.
Habedero o habidero ant. Habiente. Hábil [ábile, h. 1440, A. de la Torre (C. C. Smith, BHisp. LXI); APal. 89b: «á. para capitanear»; íd. Nebr.; hábil, Quijote], tomado del lat. habĭlis ‘manejable, que se puede tener fácilmente’, ‘bien adaptado’, ‘apto’; habilidad5, habilidoso; habilitar6, del lat. tardío habilitare íd.; habilitación, habilitado, habilitador; inhábil [Nebr. inable, cosa no ábile], inhabilidad, inhabilitar [Nebr.], inhabilitación; rehabilitar [Aut.], -ación [íd.]. Hábito [‘vestido’, Berceo, Mil., 468, etc.; ábito «vestidura; disposición, costumbres», Nebr.; ‘insignia de una orden militar’, La Gitanilla, ed. Cl. C., 20, 36; ‘traje seglar’: «empecé a sentir en mí nuevos apetitos que no había tenido en mi mendiguez y pobreza, y nuevas esperanzas, nacidas de verme en buen hábito y con dinero en mano», en el Alfarache de Martí, ed. Rivad., p. 373], tomado del lat. habĭtus, -ūs ‘manera de ser, aspecto externo’, ‘vestido’, ‘disposición física o moral de alguien’; habituar [Nebr.]; habitual; habituación; habitud, habitudinal. Habitar [Berceo]7, tomado de habĭtare ‘ocupar un lugar’, ‘vivir en él’; habitable, habitabilidad; habitación; habitáculo (comp. BITÁCORA); habitador; habitamiento; habitante, habitanza; inhabitable; cohabitar, cohabitación. Formas flexivas del verbo haber sustantivadas: haber ‘hacienda, bienes’ [Berceo, Mil., 876b; Alex., 220; P. de Alf. XI, 14, 94, etc.]; haberado; haberoso; haberío [‘mula’ en Aragón, ‘asno’ en Soria, en otras partes cualquier bestia de carga o de labor; primitivamente es colectivo ‘conjunto de animales domésticos’, por ser éstos los bienes del rústico por excelencia; en el mismo sentido en Galicia haber es ‘res vacuna’, y abere en vasco ‘ovejas’: G. de Diego, RFE VIII, 411; averia en Cataluña].
Haya ‘cierto donativo’. Evás ‘he aquí’ [primera mitad del S. XIII, Disputa entre un cristiano y un judío8; Vidal Mayor, glos.] y evad [Cid; Vidal Mayor, glos.; Conde Luc., ed. Hz. Ureña, p. 115; avad, Corbacho, ed. P. Pastor, 166.20] o evades [avades, S. María Egipc.], dirigidos a persona plural: no puede caber duda, a pesar de las varias hipótesis propuestas9, de que proceden de los lat. HABEAS ‘tengas’ y HABEATIS ‘tengáis’ (> evades)10, respectivamente; en cuanto a la forma evad es naturalmente analógica, sacada de evades (asimilado a tengades), según el modelo de andad junto a andades, por influjo del sentido evidentemente imperativo del vocablo; evas como palabra gramaticalizada se hizo proclítica (evas aquí) y acabaría por fijar el acento en la última sílaba con arreglo a evades y evad; esta explicación está confirmada en forma indudable por el cat. ant., hoy mall. jas y jau (procedentes de HABEAS y HABEATIS, con aféresis de la primera sílaba), que tienen exactamente el mismo empleo11. El jas mallorquín se emplea también en valenciano: en Játiva y valle de Albaida; en la Ribera del Júcar y en el Sur de la provincia de Castellón existe una pronunciación más arcaica ଖas, y en Sueca y Cullera ྜas (Giner i March). El último se explicará por influjo de ྜa < n’hi ha ‘hay’.
1 Curiosa la supervivencia de haber ‘tener’ en el lenguaje mixto hispano-náhuatl de Centroamérica (BDHA IV, 326).― ↩
2 Algún conato de la misma tendencia se manifiesta en el castellano coloquial del Siglo de Oro, aunque luego fracasó: «menos daño ha sucedido / del que tube ymaginado...», Lope, El Cuerdo Loco, v. 126.― ↩
3 Pero el ms. aragonés P, que es del S. XV, ya da muestras de desaprobar este uso arcaico al reemplazar por la construcción personal «an esas santas aguas otra mejor costumbre».― ↩
4 En el Siglo de Oro alguna vez invade hay el terreno del temporal ha: «si es el Duque, como vos decís, no hay una hora que le dejé bueno, sano y salvo», La Señora Cornelia, ed. Hz. Ureña, p. 166.― ↩
5 Habilencia en boca de rústicos, en Tirso, La Prudencia en la Mujer III, ix, ed. Losada, p. 255.― ↩
6 Para acs. nuevas en Cuba y Centroamérica, vid. F. Ortiz, Catauro, p. 112.― ↩
7 Sentidos especiales cubanos, en F. Ortiz, Catauro, 192, 179.― ↩
8 «Ninguno de mi mano non podrá foyr. Ond evás sana prueba que él dixo que avía mano», RFE I, 177. «Ell estonces cogiós affuyr, et yo travél del manto por le tener... mas dexó me el manto, et evás le aquí», Gral. Estoria, cita de M. P., Yúçuf, línea 217; más ejs. Gr. Conq. de Ultr., 591; y en M. P., Cid, pp. 675-7. El mismo vocablo se ha conservado en estado fósil en el proverbio portugués avache a ti, acache a ti, não ficará nada para mi, estudiado por AdriƟo, RL XXXII, 37, que contiene aglutinado el antiguo pronombre personal che ‘a ti’; en efecto, en la Gral. Est. gall. leemos: «diso entonçes Caym a noso Señor Deus: ―Ava que tu me deytas da façe da terra» allí donde el otro ms. trae evás (12.34).― ↩
9 Véase el análisis en M. P., l. c. Particularmente erróneo es partir del ár. afric. ⺆â⺆uwa ‘hele aquí’, como sugiere Baist, GGr. I, §§ 5 y 84.― ↩
10 El empleo de un presente de subjuntivo con valor de imperativo es muy frecuente en castellano arcaico: dedes ‘dad’, firades ‘atacad’ en el Cid, 1129 y 1130, p. ej.― ↩
11 Jas «toma; interjección con que se llama al perro, y regularmente se duplica o repite», «jas, vet-ho aquí», «jas, pren aqueixa y per la resta ja tornaràs» (Amengual). Jau se emplea en la misma forma, hablando a varias personas, o a una sola a quien se trata de vós. La forma jas prueba que la acentuación HABEÁS, procedente de la proclisis, era ya antigua, anterior al cambio catalán de -AS en -es (comp. hages: ‘que tú hayas’). Ahora bien, la forma fonética evás (o jas) aislaba esta palabra de todos los subjuntivos, puesto que no existía ningún subjuntivo en -as acentuado; la pareja evás ~ evades quedaba asimilada a los indicativos das ~ dades, estás ~ estades, y así como junto a éstos se hallaba dad y estad, junto a evás ~ evades se creó el nuevo imperativo evad. Nótese que algunos también crearon un nuevo imperativo singular (santand. évate, port. avache). ↩