GARLITO, ‘nasa pequeña para pescar en los ríos’, origen incierto, probablemente emparentado con el leon. carriego ‘cesta grande’, ‘garlito’, con el cambio de -rr- en -rl-, que no es raro en voces de origen prerromano o extranjero.

1.ª doc.: h. 1400, Canc. de Baena (W. Schmid); APal. («gurgustium... cosa angostilla en que se lançan los pexes, que es garlito», 186d; otro ej. s. v. nassa, 154d).

También en Nebr. («garlito para pescar: nassa, fiscina») y Aut. cita ejs. clásicos; ‘calabozo’ en dos romances germanescos del S. XVII (Hill). Percivale (1591) agrega que es también cierta ave. El port. galrito (que Moraes cita de la Ordenação Filipina, según creo de fines del S. XVI o primeros del XVII) ha de ser castellanismo en vista del sufijo -ito; se emplea hoy en el Alentejo «rêde de vime para apanhar peixe miudo» (RL XXIX, 220). En la Extremadura española se dice galro y en Cespedosa galrito (RFE XV, 155); probablemente esta trasposición del grupo rl es secundaria, como en bulrar, Calros, etc., y no originaria como en calrear (de calor) por carlear. Nadie, que yo sepa, ha estudiado el origen de garlito. Carriego ‘buitron de pesca’ se halla ya en un texto leonés de 1669, y hoy el mismo vocablo tiene además el sentido de ‘cesta grande para echar en colada las madejas de lino cuando se cura y blanquea’ (Acad., DHist.). Para ejs. del cambio RR > rl, vid. mi nota en VRom. II, 455. Comp., además, GARNIEL. Como los garlitos suelen colocarse en los saltos de agua, es posible que haya relación con el santand. garlu ‘chorro’ (G. Lomas) (¿onomatopeya?). Es imposible la etimología híbrida propuesta por el P. Guadix ár. ġâr ‘cueva’ + lat. litus ‘costa’. Hay variantes port. galricho, galripo (en parte con sentidos secundarios); no existe fundamento semántico para partir de un GALLŬLA diminutivo de GALLA ‘agalla’, por más que diga GdDD 3062.