FRESAR, ‘gruñir o regañar’ ant., ‘mezclar la harina con el agua antes de amasar’ albac., ‘labrar metales por medio de la fresa, herramienta de movimiento circular continuo’, del lat. vg. *FRSARErechinar con los dientes’, ‘moler, machacar, triturar’, frecuentativo del lat. FRENDĔRE íd. (participio FRSUM); la última ac. castellana se ha tomado del fr. fraiser, y no es seguro tampoco que las demás sean genuinas.

1.ª doc.: «fresar una cosa con otra: infrico; fresar como havas: frendeo; fresada cosa: fresus; fresadas de cevada: ptisanum ordeaceum», Nebr.

Aunque de Nebrija reprodujeron estos artículos PAlc., Percivale y Oudin, y de éste pasaron a otros diccionarios (C. de las Casas sólo trae fresadas de cevada), debieron quedar pronto anticuadas estas acs. o más bien serían siempre de uso poco común, pues a nada de eso se refieren Covarr. ni Aut., y estos vocablos no figuran en los glosarios medievales y clásicos de que disponemos, ni tampoco se hallan en gallegoportugués. La Acad. ha desenterrado el anticuado fresada, con la definición ‘cierta vianda compuesta de leche y manteca’, y ha agregado (también desde 1843) el verbo fresar «gruñir o regañar», asimismo anticuado. El galicismo fresar de los técnicos es reciente (Acad. después de 1899). Hoy sólo tengo noticias del uso popular del vocablo en un par de hablas orientales, en Albacete (vid. arriba) y en la Litera, en el sentido de ‘moler sal entre dos piedras’ (Coll A.). En efecto, es palabra bien representada en catalán y en galorrománico: cat. fresar ‘mezclar la harina con la levadura para amasar’ y ‘desmenuzar el maíz para hacer sopas’, usual en la zona pirenaica, y el general fresar ‘desovar los peces, frezar’ (ya fresada y fresades con la definición castellana en el Nebrija catalán de 1560, que no es testimonio seguro), gasc. heresà «décortiquer, frotter légèrement» (Rohlfs, BhZRPh. LXXXV, § 271), oc. ant. y mod. fresar «fraiser des fèves», fr. fraiser «écosser et piler des fèves», «briser la pâte en la séparant par des pétrissages faits à l’aide de la paume», y demás formas antiguas y dialectales, que revelan gran popularidad y arraigo en el país vecino (FEW III, 777-9). Es fácil comprender el tránsito semántico de ‘rechinar con los dientes’ a ‘regañar’ (comp. REÑIR), y el de ‘moler, machacar’ a ‘machacar habas’, ‘amasar (pan)’, ‘fresar con fresadora’.

DERIV.

Fresa ‘herramienta para fresar’ [Acad. después de 1899]. Fresado ‘acción de fresar’. Fresadora.