FÁBRICA, tomado del lat. fabrĭca ‘oficio de artesano’, ‘arquitectura’, ‘acción de labrar o componer’, ‘taller’, ‘fragua’, abreviación de ars fabrica ‘arte del obrero o artesano’, derivado de faber, que en latín designa a este último.
1.ª doc.: Mena, Santillana (C. C. Smith, BHisp. LXI); APal., 47b («un varón que intervino en la fábrica de la torre de Babilonia»), comp. 92b y 150d; Nebr.; 1502, N. Recopil., I, ii, 1.
DERIV.
Son también cultismos los siguientes vocablos. Fabricar [fablicar, h. 1400, Canc. de Baena, 411; fabr- Rimado de Palacio (D. Alonso, La Leng. Poét. de Góngora); APal. 81d, 100b, 150d, 474b; «fazer por artificio», Nebr.; Aut. allega ejs. de h. 1600, a los cuales se puede agregar el de Paravicino citado en RFE XXIV, 313], de fabricare o -ari ‘componer, modelar, confeccionar’; fabricación [Nebr.]; fabricador [Nebr.]; fabricante; fabrical adj. [1454, Arévalo, Suma, p. 255b (Nougué, BHisp. LXVI)]. Fabriquero. Fabro ‘artífice’, vocablo correspondiente al lat. faber, -bri, íd., que la Acad. registra como ant. [1843], y del cual no conozco ej. castellano. Fabril [1499, H. Núñez de Toledo; fuera de ese texto latinizante sólo cita Aut. uno de Palomino, a. 1708, y dice que es voz anticuada; no empezó a ser verdaderamente usual hasta el S. XIX], de fabrīlis ‘propio del artesano’.
En cuanto a fabrido, que la Acad. da como ant. [1817, no 1783], en el sentido de ‘labrado’ o ‘fabricado’, no parece tener otro fundamento que un verso famoso de Jorge Manrique («las dádivas desmedidas, / los edeficios reales / llenos d’oro, / las baxillas tan febridas, / los enriques e reales / del thesoro /...¿dónde iremos a buscallos?», copla XIX, donde el significado real, según observa Cortina en su ed., es ‘bruñida, resplandeciente’; la ed. de 1490 trae febridas, y fabridas la reproducción de 1512 por Barahona, mientras Gómez Manrique en el Planto de las Virtudes y Poesía, que parece haber sido modelo de las famosas Coplas, da también vaxillas febridas1; se trata indudablemente de un catalanismo, el verbo febrir ‘bruñir, acicalar’2, común en la lengua de Auziás, cuyo origen es incierto, pero es probable resulte del fráncico *FŬRBJAN ‘limpiar, pulir’ (a. alem. ant. furban, a. alem. med. fürben íd., fr. fourbir, oc. forbir, it. forbire ‘bruñir, pulir’, Aosta y Lorena frebir, ya documentado en un texto escrito en Flandes en el S. XV, FEW III, 882b), quizá alterado por influjo del lat. tardío fabrire ‘fabricar’, o más bien de su compuesto orfebre, orfebrería3; en cuanto al and. fabrir ‘construir, labrar’ (fabrir una reja de arado), parece ser latinismo independiente.
1 Hay otros dos ejs. de arneses febridos en la Crónica de Juan II (h. 1460) y en el falsario Cibdarreal, citados y mal traducidos por Aut. También en el fuero aragonés de 1350 y en otros textos citados por Tilander, RFE XXII, 23 y 132.― ↩
2 Los textos que distinguen la e átona de la a, escriben siempre e: J. Roig, 2554 (Chabás; malamente fabrir en Ag.), 2617; Llibre de Tres, n.° 18; Tirante I, 192 y 258. Ag. da dos ejs. de la grafía fabrir, en un texto del S. XIV, y otro de 1444, a los cuales agréguese A. Canals, Scipió, 62, pero en este manuscrito abundan las grafías orientales, debidas al copista, y las muestras copiadas de aquellos dos presentan asimismo varios ejs. de confusión de e con a. En vista de esta e constante cabría incluso dudar del influjo de fabrire y pensar si no hay una trasposición espontánea (?), como la que aparentemente se ofrece en el fr. navrer―si es que es germanismo (= alem. narbe)―, con una especie de diferenciación de la o en e entre las dos labiales (comp. clotell > clatell, si molt convé > si mel convé, plourà > pleurà). Volveré sobre el problema en mi DECat. De todos modos, no creo tenga que ver con el fránc. FARWJAN ‘colorear’ (REW, 3207), según quisiera Tilander.― ↩
3 Nótese la variante febrería en un anónimo aragonés del S. XV («perlas, oro, febrería», Canc. de Stúñiga, p. 175). ↩