ESCONCE, ‘ángulo entrante o saliente’, ‘rincón’, tomado del fr. ant. *escoinz, nominativo del fr. ant. escoinçon íd. (hoy écoinçon), derivado de coin ‘rincón’, procedente del lat. CŬNĔUS ‘cuña’.

1.ª doc.: 1543, F. de Ocampo.

Los primeros lexicógrafos que recogieron el vocablo parecen ser los autores de Aut.; citaron el pasaje de Ocampo «esta ribera va casi toda seguida y derecha sin que la mar haga por ella notables entradas... si no son dos esconces dissimulados, que le va ganando la mar sin casi sentirse», y el de Quevedo «Tuve dos mozos de silla, / por noticias y avizores / de la entrada de las casas, / puertas, ventanas y esconces»1, y definieron «esquinazo, rincón, punta que hace alguna sala en alguno de los ángulos; lo que también se dice de otra o cualquiera obra o parage que hace esquinazo», agregando el adjetivo esconzado «lo que pertenece a esconze: como aposento esconzado, pieza esconzada»; el verbo esconzar «hacer a esconce una habitación u otra cosa cualquiera» está registrado por la Acad. sólo después de 1899. Lz. de Arenas (1633) emplea repetidamente yzgonce e yzgonçado (cap. 8, p. 10, etc.), que Mariátegui en su glosario define, respectivamente, «lo que le falta o sobra a un ángulo para ser recto» y «se dice de una pieza cuyos ángulos no son todos rectos». Sin relación con esconce debe de estar conza, empleado por el mismo autor (cap. 18, p. 42, etc.) en el sentido de «plantilla que sirve para formar los racimos de mocárabes, y con la cual se rodean las medinas de éstos» (quizá venga del it. conciare ‘arreglar’).

En port. también tenemos esconso, que puede ser sustantivo «o ângulo ou quina resaltada irregular do edificio», pero que además es adjetivo en el sentido de ‘rombal’ o ‘romboidal’ (hablando de una sala), de donde figuradamente esconso do cervello ‘el que no piensa bien, que no tiene buen juicio’, con ej. de Diogo Bernardes (nacido junto a la frontera gallega, † 1605) (Moraes); o esconso d’alguma coisa ‘su irregularidad’ (Vieira), esconso ‘rincón, escondrijo’, ‘lugar oculto’, de esconso ‘de soslayo’ (Fig.).

Me parece bien claro que el uso adjetivo, sólo portugués, es debido a una evolución secundaria y que se trata evidentemente de un término del lenguaje artesano, perteneciente al vocabulario de la construcción, y de procedencia francesa: la identidad semántica con el fr. ant. escoinçon es perfecta, pues God. define «coin, angle coupé, pierre ou bois posé dans un mur et saillant dans l’intérieur, pour porter une poutre ou quelque autre chose», y da ejs. muy abundantes desde 1334, comp. la ac. especial del ast. esconciu «pedazo con que las piedras de las jambas de las puertas y ventanas se sujetan a las paredes» (Rato); santand. esgonce o esconce ‘gozne, articulación’ (?, G. Lomas).

Ya Spitzer, ZRPh. XXXIX, 496-7, y Schuchardt, ZRPh. XLI, 256, relacionaron nuestro vocablo con écoinçon, pero la mala ordenación de las acs. en los diccionarios portugueses, y la confusión que Moraes hace con el sustantivo esconsa2, les desviaron hasta admitir que el punto de partida era ABSCONSUS ‘escondido’. La procedencia es tanto más segura cuanto que no puede dudarse de que existió un nominativo francés *escoinz, que aunque no figure en los textos se ha conservado en varias hablas francoprovenzales, borgoñonas y del Poitou: Châtellerault, Vaux, Versailleux, Clessé, Igé, Mâcon écoin «angle de bâtiment, de terrain», terre en écoin «formant une saillie angulaire», y en otros dialectos franceses, con ligera alteración, Alençon, Anjou, Bas-Manceau décoin «angle (surtout de rues)» (FEW II, 1536b); y que ha dejado huellas en el ingl. asquint ‘al sesgo’, ingl. antic. askoyne íd. (luego deformado en askance por influjo de otra palabra, vid. NED y Skeat), según indicó Weekley, citado por Spitzer; en el propio francés antiguo el sinónimo derivado escoinceau (1411) es prueba de la existencia de *escoinz3. Aunque Spitzer (MLN LXXI, 378) se adhiere por lo demás a mi interpretación, sugiere que, más que un nominativo antiguo *escoinz, sea un derivado retrógrado de escoinçon. Tiene razón probablemente, pues si bien no deja de haber algun caso de tales nominativos en nombres de cosas (grip ~ gripon, nombre de barco, si bien el sentido primitivo es ‘grifo, ave fantástica’) y aun es posible que en otros como bony junto a bugnon se trate primitivamente de nominativos (générace, junto a génération y análogos, no cuentan, por ser cultismos), el caso es que casi todos los casos de declinación imparisilábica en -on son de nombres de seres animados (y p. ej. UNIO sólo dejó huellas de su nominativo en anglosajón, no en romance). Esconce no viene de un *EXCOMPTIARE derivado de COMPTUS ‘compuesto’, como dice GdDD 2525. Comp. cast. GOZNE 4.

DERIV.

Esconzar, esconzado, V. arriba; de aquí, con metátesis, escoznar, que registra G. de Segovia en 1475, p. 55; comp. también el arag. escuezno ‘pierna de nuez’, que es algo metido en un verdadero esconce; nuez escoznada ‘sacada de su cáscara’ (S. XIII, Libro de los Cavallos, 36.19)5. Esgonzar, según G. Lomas, se aplicaría en Santander a la distensión violenta de las coyonturas.

1 Pagés agrega otro ejemplo, de Bernardo de Balbuena.―

2 Se trata de una especie de lenguaje esotérico o convencional empleado por los monjes de ciertas órdenes, según Viterbo, que ni siquiera nos da ejs. portugueses ni manifiesta categóricamente que sea vocablo del portugués y no del bajo latín internacional. El sentido y el ambiente del vocablo es tan radicalmente distinto que no creo que este evidente cultismo, procedente de ABSCONSUS, haya tenido nada que ver con el port. esconso ‘sesgo’, ‘rincón’, a no ser en la mente de algunos lexicógrafos.―

3 La formación del diminutivo écoinçon es paralela a la de tantos como escuçon, enfançon, tronçon, poinçon, parçon, Brabançon (junto a escu, enfant, tronc, pointe, part, Brabant), tanto más fácil cuanto que el nominativo de coin era coinz con -z en francés antiguo. El prefijo es- quizá supone un verbo, pero comp. cat. escurçó ‘víbora, culebra corta’ junto a curt ‘corto’. Partiendo de écoinçon, se formó después coincer (cuya c no es analógica de palabras en -z, como supone FEW II, 1533a) y los dialectales égoincher, écoincie, etc. (ibid., 1536b).―

4 No veo claro en qué forma puede tener que ver con esconce y su derivado esconzado, esconzar, el antiguo verbo del aragonés aljamiado eškonçar (presente eškwença) que Nykl señaló en el Recontamiento de Alixandre, 70, 74, 124v° y 98. Él define ‘oponerse’ en el primer ej., ‘obtener’ en el último y ‘realizar, cumplir’ en los otros dos; quizá la idea básica sea la de ‘combatir’, de donde ‘oponerse’ y por otra parte ‘combatir por algo’, de donde ‘lograrlo’, ‘realizarlo, obtenerlo’: «no á nenguno de los que m’escuençe(n), que no ponga Allah en sus corazones espanto», «[Alejandro] escribió a su maestro Arçatataliç [= Aristóteles] una carta que’l haçia a saber con lo que abia bisto, i lo que abia esconçado», y en la contestación de Aristóteles «ya me a llegado tus nuebas, i lo k’as esconçado de los espantos, i de las peleas i de los aferes fuertes i de las marabillas, i lo que t’a dado Allah del poder en la tierra», o en otra comunicación del conquistador: «ya bos a llegado lo k’an esconçado de mi los rreyes de toda la tierra, lo que m’an dado de los presentes i de pagar los espletes». Creo que en el último caso el sentido es más bien ‘oponerse, combatir’ (con régimen arabizante de en lugar de a) que lo que supone Nykl. Dudo mucho que éste se inspire bien al relacionarlo con el it. sconciare ‘desordenar’, ‘echar a perder’, lat. EX-COMPT-IARE (derivado de COMPTUS ‘arreglado’), que M-L. (ZRPh. X, 172) había tomado como étimo de esconce, sin verosimilitud semántica. Puesto que en catalán existe acunçar ‘arreglar ingeniosamente’, no sería imposible que algo de esto hubiera existido en aragonés, pero no me parece que esto nos pueda explicar el sentido de ‘combatir por algo, lograrlo’, y ‘combatir, oponerse’. Todavía me parece más difícil, sin embargo, derivar este vocablo aragonés del cast. esconce, fr. écoinçon, a base de ‘poner de sesgo, contrariar’. Lo más probable es que sean homónimos sin relación etimológica. Hoy en Venasque escunsá-se es ‘encontrarse dos personas casualmente’ (Ferraz). Sí irá, en cambio, con esconce, el mall. en escunsa ‘oblicuamente’ (BDLC IX, 315).―

5 Es imposible morfológicamente relacionar con el fr. cosse ‘vaina de legumbre’, como propone Sachs en el glosario de su edición.