DESVAÍDO, ‘alto y desairado’, ‘(color) bajo y disipado’, forma parte de un conjunto de homónimos iberorromances de historia complicada y oscura; la voz castellana se tomó, al parecer, del port. esvaído, desvaído, ‘desvanecido’, ‘evaporado’, ‘enflaquecido’, ‘sin sustancia’, procedente del participio del lat. EVANESCĔRE ‘desaparecer’, ‘disiparse’, ‘evaporarse’, derivado de VANUSvano’; sin embargo existe, aunque menos probable, la posibilidad de que proceda del lat. EVADĔRE en el sentido de ‘asaltar (una muralla)’, sea como descendiente autóctono, o como advenedizo tomado del cat. esvair ‘asaltar’, ‘atacar’, ‘destruir, consumir’, esvairse ‘desvanecerse’.

1.ª doc.: 1604, 2.ª parte del G. de Alfarache; 1607, Oudin; 1623, Minsheu1.

Escribe Mateo Alemán: «Derrenegad siempre de unos hombres como unos perales, enxutos, magros, altos y desvaídos»; y Rojas Zorrilla: «Es un caballero flaco, / desvaído, macilento, / muy cortísimo de talle / y larguísimo de cuerpo.» La primera ac. indicada arriba se halla ya en Aut., la segunda la había agregado ya la Acad. en 1884, y desde 1843 por lo menos figura además, como anticuada, otra ac. ‘vaciado, adelgazado, disminuído’. De ahí bóveda vaída ‘la formada por un hemisferio cortado por cuatro planos verticales paralelos dos a dos’ [1708, Tosca, Aut.]. No es posible desconocer la identidad semántica de este adjetivo con el port. esvaído «desangrado, v. g. esvaído do sangue; esvaído da cabeça: o que a tem m?i fraca e quasi arvoada», esvaír-se «evaporar-se a parte espiritosa e forte, v. g. do líquido...; enfraquecer-se o corpo com o m?ito que se desangra», según Moraes, que cita ejs. de la Hist. Náutica Trágico-Marítima (SS. XVI-XVII), Fr. António Feo (1612) y Fr. António das Chagas († 1687, luzimento esvaído «que nƟo tem tomo, sustância»); «desmaiar; ter tonturas; desbotar (= hacer desvanecer el color)» (Fig.); desvaído «esvaído, esgotado, exangue, desangrado» (Vieira). Gall. esvaerse, -vair, esvaído («desexo de esvaerse no remanso da morte», «Sabela esvaíuseme da memoria» Castelao 269.18, 207.4, 200.2). Junto a estas formas está en portugués esvaecer, muy frecuente desde antiguo y con los mismos sentidos que el cast. desvanecer, de suerte que apenas puede ponerse en duda que los vocablos portugueses vienen, como éste, del lat. EVANESCĔRE, pret. EVANUIT, sin participio en latín clásico, pero en el vulgar debió de crearse *EVANէTUS (-զTUS), del cual procederán el port. esvaído y el cat. esvanit ‘desvanecido, desaparecido’. Entonces el cast. desvaído, por la pérdida de la -N- intervocálica, sería portuguesismo de fines del S. XVI.

Por otra parte, G. de Diego, Contr., § 218, cita entre los descendientes de EVADĔRE ‘escapar, salir, eludir’ una serie de formas francesas, catalanas y castellanas, que es preciso analizar. Desde luego nada tienen que ver con nuestro desvaído el cast. ant. EMBAÍR ‘engañar, embaucar’ y embaidor ‘embaucador’, a los cuales pertenece el ej. del primero en Alex. 2206, que G. de Diego entendió erróneamente como ‘escapar, evadirse’, desorientado por las erratas del texto de Janer (vid. ahora el de Willis). También hay que dejar a un lado el fr. ébahir ‘asombrar’, cat. ant. esbair íd.2, etc., sea que éstas procedan de la interjección bah (M-L.) o de BATARE, con galicismo temprano en los demás romances, ya en el S. XIII [?] (Bloch); con éstos podrá ir el cast. antic. embaído ‘absorto, ensimismado’, del cual cita G. de Diego un ej. del S. XVI.

En cuanto al salm. envaer, envaír, que también vendría de EVADERE según este filólogo, esta opinión se basa en una interpretación gratuita de los ejs. citados por Lamano, no autorizada por los datos de este dialectólogo; hay que partir del uso, que éste conoce como vivo, está envaendo el tiempo, en el sentido de «entretener, distraer, gastar»; los demás, citados de textos y romances, contienen el mismo verbo envaírse o envaerse en el sentido de ‘entretenerse’. Es peligroso elevarse directamente desde estas formas dialectales y recientes hasta el latín clásico EVADEREescapar’; más natural parecería relacionar con el castellano embaír ‘engañar’, embaír el tiempo ‘hacerlo pasar de prisa’, literalmente ‘engañarlo’, y empleado absolutamente envaírse ‘entretenerse’3

El cat. esvair-se ‘desvanecerse’ sí deberá de proceder de EVADERE, a no ser que lo separemos del cat. ant. esvair ‘asaltar’, ‘atacar, acometer’4, pues junto a éste tenemos el oc. ant. esvazir, de significado idéntico, cuya -z- indica inequívocamente el étimo EVADĔRE, aunque no en el sentido de ‘evadir, escapar’, sino en el de ‘asaltar (una muralla u obstáculo)’, también clásico (evadere in muros T. Livio, ad summi fastigia culminis Virgilio; también evadere ardua en aquél y evadere gradus altos en éste). Hay por lo tanto dos homónimos indiscutibles en la Península: el cat. ant. esvair EVADERE y el port. esvair, esvaecer, EVAN(ESC)ERE. En cuanto al cat. mod. esvair-se ‘desvanecerse, desaparecer’, su origen es menos evidente. Siendo ajeno al idioma medieval, podría sospechársele origen portugués por conducto del castellano, aunque es palabra de uso muy castizo, y su matiz semántico no es conocido más que en portugués, pero no en el intermediario castellano. Será bueno tener en cuenta las demás acs. regionales del catalán moderno: ‘desfallecer, desmayarse’ (prov. de Lérida), esvaït ‘desvanecido, desmayado, pálido’ (Solsona, Camprodon), podrían conciliarse con el origen castellano-portugués, pero las hablas arcaizantes de Mallorca señalan otra dirección: esvair ‘acabar con, consumir’ (hablando de comida, de tiempo: Ag.), ‘arrasar’ (esvaït ‘roturado, artiga’ en Manacor), ‘destruir’ (BDLC VII, 133) y aun ‘atacar’ (en las Rondayes Mallorquines de Alcover, IV, 75, según Tallgren, Neuphil. Mitt. XX, 47). Claro está que todo esto es inseparable del cat. ant. esvair ‘acometer’, ‘saquear’, EVADĔRE; desde ‘destruir, consumir’ se pudo pasar a esvair-se ‘volverse pálido, desvanecerse’ y de ahí a ‘disiparse, desaparecer’.

¿Tendremos derecho, en vista de esta documentación, bien trabada y que se remonta hasta el S. XIII, a suponer que el cast. desvaído y aun acaso la voz portuguesa, de fecha más moderna por lo que sabemos, sean catalanismos? En teoría es muy posible; y sin embargo me parece poco probable, y aun menos probable creo que el cast. desvaído sea otro representante autóctono de EVADERE que siguiera (subterráneamente durante la Edad Media) el mismo camino recorrido por el catalán. Lo verosímil, en resumen, es que tengamos tres familias homónimas: port. y cast. desvaído EVANITUS, cat. ant. y mod. esvaïr EVADERE, y cast. embaír ‘engañar’, ‘entretener’, para el cual V. artículo aparte.

DERIV.

Desvaírse [fin S. XIX, en el español Palacio Valdés y en el argentino L. Lugones, vid. Toro G., BRAE VIII, 489; no admitido aún por la Acad.]. Desvaidura.

1 «DesVaýdo: faint, hartlesse», «DesVayado (vide desVaýdo): feeble, hartlesse, scarce able to goe on his legs». Probablemente tomado de Oudin (1607): «Desuayado o desuaydo, un corps qui est creu outre mesure, grand, mal-basty», a lo cual en la ed. de 1616 agregó «vn grand esquiolé, vn landore, vn longis». Claro está que la variante desvayado se debe al influjo de desmayado y desmaído, coexistentes.―

2 B y v no se confunden nunca en la Edad Media catalana. Además semánticamente el vocablo se distingue de esvair en forma inequívoca, vid. Vidas de Santos del S. XIII, fº 6rºb (AILC III, 189); Lulio, Meravelles I, 29; Senescal d’Egipte, p. 149; A. Canals, Scipió, 43, 72, 76; Curial N. Cl. II, 36.―

3 En catalán se llegó al mismo resultado desde otro punto de partida: esvair lo temps es ‘matar, perder el tiempo’ en texto de 1390 (Ag.). Aquí debe partirse de EVADERE en el sentido de ‘acometer’, que se comenta a continuación.―

4 V. muchos ejs. en Ag. Pueden agregarse: «no es lo arbre ben forts e ferm sinó com continuat vent lo esvaeix, car ab la vexació del vent se estreny, e fica les raels pus certament», «no era en Roma qui·ns gohàs deffendre los camps ni les alqueries que estaven fora la ciutat, e aquest esvaýa les nostres hosts» (A. Canals, Scipió, 48; Providència, 111, también 87). Esvaiment ‘asalto, forzamiento, violación’ en las Costumbres de Tortosa, S. XIII, ed. Oliver, p. 436.