CÓDIGO, tomado del lat. cōdex, -ĭcis, ‘libro’ aplicado por antonomasia al código de Justiniano y después a otras fuentes legales.

1.ª doc.: APal. 238d.

Forma semejante tomó el vocablo en port. código e it. ant. codico (SS. XIII-XIV). La terminación irregular en -o ha de ser debida al carácter culto del vocablo, pero no es fácil explicarla ni partiendo del nominativo codex ni de los demás casos, que en bajo latín se pronunciaban con ç, a excepción del genitivo plural codicum, que no era de aplicación frecuente en este caso. Quizá se trate del latinismo gr. κǠƌικος (genitivo sing. de κNjƌιξ, vid. ejs. en el diccionario griego medieval de Sophocles), empleado al citar una ley del código de Justiniano y entrado en romance por la Italia bizantina1, desde la escuela jurídica de Bolonia.

Códice [Villena (C. C. Smith, BHisp. LXI); APal., 82d; Terr.], duplicado culto de código.

DERIV.

Codicilo [Nebr.; cobdeçillo 1374, BHisp. LVIII, 88; codecillo, Canc. de Baena, vid. W. Schmid], tomado del lat. codicillus diminutivo de codex en el sentido de ‘testamento’; Aut. cita una variante codicilio; codicilar.

CPT.

Codificar [ya Acad. 1884], del fr. codifier (1845; codification, 1819; el ingl. codify, que ya aparece en 1800, suele también considerarse galicismo), derivado de code ‘código’, con la terminación latinizante -fier, -ficar: el vocablo se extendería gracias al esfuerzo codificador de Napoleón; codificación, codificador.

1 También oc. ant. y cat. codi (y aun fr. code) cabría explicarlos, como formas semicultas, partiendo de la misma base.