CHICO, voz común al castellano con el vasco, el catalán, el sardo y algunos dialectos italianos, de creación expresiva, sólo indirectamente relacionada con el lat. CICCUM ‘membrana que separa los granos de la granada’, ‘cosa insignificante, pizca’.

1.ª doc.: Cid.

En castellano es voz corriente en todas las épocas y regiones del idioma, aunque las vicisitudes de su concurrencia y su lucha con el rival pequeño no han sido iguales en todos los tiempos, en todas partes ni en todas las connotaciones estilísticas y sociales. El examen de este aspecto de la historia del vocablo requería un estudio monográfico, que no se puede hacer aquí. Además de los materiales proporcionados por Cuervo, Dicc. II, 718-20, y Cej. VIII, § 16, he aquí algunos que deberán tenerse en cuenta. Chico aparece a menudo en Berceo (p. ej. Mil. 720b, 726a, 801d) y se halla en Sta. M. Egipc., 220; docs. de Soria, a. 1233, Castilla del Norte, a. 1244, Oña, 1245, Rioja Baja, 1289 (M. P., D. L., 217.14; 57.36; 130.37; Oríg., 190); Tilander, Fueros de Aragón, § 139.16; Poema de Yúçuf, A, 62b; Sem Tob, 72d; Danza de la Muerte, 311; Celestina, ed. 1902, 131.15; APal. 43b, 453b; Nebr.; es innecesario, por su misma abundancia, indicar ejs. posteriores al S. XV.

En general, no hay diferencia notable en el uso de chico entre España y América, aunque en muchas partes del Nuevo Mundo el concurrente pequeño tiene empleo más restringido que en la antigua metrópoli (así en Nuevo Méjico―BDHA IV, 51―y, en el extremo opuesto, en la Arg.).

Al menos modernamente, el vocablo es ajeno al portugués: el chulesco chico ‘moneda de oro pequeña’ (Moraes), el nombre propio Chico de una inquiriçƟo norteña de 1258 (PMH, p. 366), y aun el gallego chicòte ‘de poca edad, pero robusto’, parecen o pueden ser castellanismos. En cambio el cat. xic es demasiado antiguo y general para serlo, pues se halla en los Privilegios de Catí h. 1403 (Bol. Soc. Castellon. de Cult. XV, 88); en Jaume Roig (a. 1460); en el Curial (med. del S. XV), II, 129; en la traducción del Excitatorium de Bernat Oliver (h. 1450), p. 105; en J. Esteve (1489); en Gerson (1491); y en muchísimos textos desde el S. XVI, pertenecientes así al Principado como al reino de Valencia (p. ej. Barcelona, S. XVI); en cuanto a los ejs. del S. XV, los dos primeros y otro son valencianos, los demás no se pueden localizar con seguridad, aunque de un par de ellos hay sospechas inciertas de que lo sean también. Hoy en día el vocablo no es ajeno a ninguna parte del territorio continental de lengua catalana1, pero es verdad que su uso es más amplio en tierras valencianas que en la propia Cataluña, donde lucha con petit, desconocido allá; sin embargo el uso de xic como adjetivo es popular y ampliamente arraigado en todo el ámbito de las provincias de Tarragona y Lérida, aun en la parte pirenaica de esta última, y si bien es verdad que en Barcelona no se emplea como adjetivo, a no ser con un valor afectivo especial, el neutro un xic por ‘un poco’ se oye en todo el Principado, y lo mismo ocurre con xicot ‘muchacho’ (mientras que xiquet es especialmente valenciano y tarragonense). En conjunto―y a reserva de confirmación futura, que sólo podrá lograrse con un estudio de geografía lingüística en fuentes antiguas―, es posible que en catalán el vocablo se propagara desde los dialectos mozárabes del País Valenciano y Sur del Principado2, aunque también pudo ser vocablo extendido desde el principio a todo el territorio lingüístico, pero limitado en el Norte a un matiz afectivo especial, por la coexistencia allí del sinónimo más objetivo petit y del anticuado poc ‘pequeño’; en todo caso creo puede asegurarse que no es castellanismo.

Por otra parte vasco txiki ‘pequeño’, propio de los dialectos vizc., guip., a. y b. nav., y, con el valor de ‘un poco’, roncalés3; mientras que en los dialectos vascos de Francia se emplea txipi (o ?ipi), en algunas localidades labortanas la forma «menos diminutiva» ziki, y en otras partes xehe y zehe (Azkue; Schuchardt, BhZRPh. VI, 39): como ya observó Diez, ni txiki puede ser el étimo del cast. chico ni puede mirarse tampoco como castellanismo, ya que entonces esperaríamos *txiko y no se explicarían las variantes. Para el vasco txipi (más generalizado anteriormente que txiki), vid. Michelena, BSVAP XI, 286.

Entre los dialectos de Oc señala Mistral chic, ‘pequeño’ y ‘poco’, como narbonense, bearnés y gascón; pero en realidad otras fuentes sólo confirman el segundo significado, y como propio del bearnés y del gascón occidental, en las Landas y costa girondina (ALF; Palay; Moureau); más al Este sólo hallo un chic ‘un poco’ en Lavelanet, Ariège, cerca del límite catalán (Bouts dera Mountanho XXV, 31); como esta repartición geográfica es muy sospechosa de hispanismo, sería importante confirmar la existencia de chic ‘pequeño’ y achicar ‘empequeñecer’ registrados por el pequeño Levy como pertenecientes al idioma antiguo, pero ambos vocablos faltan en el Levy grande y en Raynouard, y los dos ejs. de achicar ‘humillar’ citados por Kolsen (ASNSL CXLIII, 265), en dos trovadores de fines del S. XII, tolosano el uno y el otro auvernés, son muy oscuros y presentan graves dudas en la trasmisión del texto.

Más lejos hallamos logud. ticcu ‘poco’ (cuya t- corresponde a una z- sorda italiana, pero en muchas palabras de origen oscuro equivale a una ch- castellana: Jud, Rom. XLIII, 452), campid. azzic-cheddu ‘poco, gotita’, calabr. zica ‘gota, gotita’, na zica ‘un poco’, zichi ‘poquísimo’ (Rohlfs, Diz.), Cilento tsiku ‘pequeño’, Lacio tsiko íd. (Rohlfs, ZRPh. LVII, 447)4: luego los dos últimos tienen el mismo significado que en español, pero los demás van con el it. cica ‘nada’ (non trovò cica: moderno y ya en el Pataffio, 2.ª mitad del S. XV), it. antic. cìgolo ‘poco’, ‘pequeño’, y por lo tanto tienen el mismo empleo que el lat. CICCUM ‘nada’ (ciccum non interduim ‘no daría ni pizca’, en Plauto, etc.), ciccum: ƔρǢ, κóκκος (en el glosario de Filóxeno, ms. S. IX, y nec ciccum ‘nihil’ en una glosa placidiana, que se halla en varios mss. desde el S. VIII: CGL VI, 730). A las formas dialectales italianas agreguése Amaseno (Lacio) na ci(ca) d ‘un poco de’ (na ci pan, na ci sapon «del pane, del sapone», Rohlfs, It. Gr. § 426). La vacilación y contradicción entre italiano zi ~ ci y cast. chi, así como la -c- simple medial del italiano, prueban claramente que más que la continuación fonética de CICCUM nos ofrecen los varios romances la creación renovada varias veces de una voz de creación expresiva, quizá infantil, que indica, mediante el sonido CHIC- o parecidos, la idea de pequeñez5. El carácter de creación expresiva que tiene el vocablo está comprobado por la variante burg. chiguito, rioj. chiguín, aducida por GdDD 1624. Termino llamando la atención sobre el hecho de que en la lengua arcaica cast. se empleó chico con el valor sustantivo de ‘un poco’, como en latín (según todavía ocurre en cat. y en vasco): «si el cavallo fuere ferido en el ojo en guisa que sea asedado o que se faga dentro chico de carne» (Libro de los Cavallos, S. XIII, publ. p. G. Sachs, 26.17). Comp. CISCO.

DERIV.

Achicar [Nebr.; 1526, Woodbr.], antes también enchicar; achicador, achicadura, achicamiento. Chica. Chicada. Chicorro, chicorrotico, chicorrotín. Chicote ‘persona de poca edad pero robusta’ [princ. S. XVII, J. Polo, Quevedo]. Chiquillo; chiquillada; chiquillería. Chiquito [Celestina, ed. 1902, 99.25], chiquitín; chiquirritico, chiquirritín. Chicarrero ‘zapatero que hace calzado de niño pequeño’ (A. Venceslada; Acad., ya 1843, define ‘zapatillero’ [?]).

CPT.

Chiquilicuatro, con el mismo radical que el popular chiquilín, que hoy falta todavía en la Acad.

1 El diccionario mallorquín de Amengual no lo registra, aunque no aseguraré que sea ajeno al lenguaje de las Islas. Tampoco tengo datos del Rosellón, pero una xica o unes xiques ‘un poco’ se emplea en varias localidades de Cerdaña (BDC II, 57), y lo he oído en Meranges, de la misma comarca, y en Setcases, en el mismo límite de Conflent. Pero según el ALF, un peu se dice un poc en las cinco localidades rosellonesas.―

2 Que el vocablo podría pertenecer a los dialectos mozárabes del actual territorio catalán, parece probarlo (y precisamente para Mallorca) el nombre de la alquería llamada Rahal Axic, posiblemente, rahal aš-šik ‘rafal o casa de campo del Chico’ (Repartimiento de Mallorca, término de Montuïri, 112). Del mozárabe castellano pasaría al ár. argelino Ƈekīkûn «très petit enfant, marmot; petit (adj.)»; en cuanto a Ǥîq o Ǥûq ‘pequeño’ que Simonet recoge de Abenalbéitar como vocablo del Turquestán, claro está que no puede haber parentesco histórico, y que aun la posibilidad de un parentesco elemental es sumamente dudosa.―

3 Es verosímil que el significado roncalés sea el más antiguo en vasco: en ese dialecto se decía txiki para ‘poco’ y el comparativo txikiago era la expresión de la idea de ‘menos’, mientras que como adj. ‘pequeño’ se decía sólo ño (Azkue, Morf. 212n.).―

4 El REW, 2451b, cita además Lucca y Versilia Ƈikko ‘pequeño’, Bregaglia tsik ‘poco’; Ƈiko ‘pequeño’ y ‘poco’ en el dialecto de Sora y en otros meridionales.―

5 Quizá tiene el mismo origen el fr. chiche ‘mezquino, avaro’ [S. XII], pero ya es más dudoso. Hay todavía otras formas romances, como Ƈika registrado por el ALF en el valle de Aosta.