CARLEAR, ‘jadear’, de *calrear y éste, por síncopa, de *calorear, derivado de calor.

1.ª doc.: 1565, Zúñiga y Sotomayor; por las mismas fechas en el Canc. de Horozco.

Segl, ZRPh. XLII, 98. El carlear es consecuencia del calor: «mojándole la carne en agua en día de gran calor, lo qual sea después que esté sosegado, sin carlear» (Zúñiga), «en tiempo del estío, cuando caen llamas de fuego, los perros están carleando, sacadas las lenguas» (Valderrama). *Calorear no me es conocido, pero sí su alteración caloriar ‘calentar’ que el DHist. registra como voz navarra. Comp. ACARRARSE.