CANDELA, del lat. CANDLA íd.

1.ª doc.: Cid.

La arcaica ac. ‘lumbre, fuego’, no documentada en latín, pero que procede directamente del sentido del verbo candēre ‘arder’, del cual deriva candela, se halla ya en el Fuero Juzgo y en J. Ruiz (1502a), y hoy se conserva en Andalucía, y en varias partes de América: Perú (VKR XI, 52), Colombia (J. E. Rivera, La Vorágine), Cuba (Pichardo) y costa atlántica de Méjico (BDHA IV, 77). Para la ac. ‘flor de ciertos árboles’, vid. CÁNDANO.

DERIV.

Candelabro [Berceo], tomado del lat. candelābrum íd. Candelada ‘quema’ [S. XIII, Libro de los Cavallos 102.19], ‘hoguera’, hoy salm., cub., etc.; ejs. en DHist. Candelaria; ast. candelera (V). Candelaria. El it. candelara, it. dial. candelora, hace pensar que quizá el cast. candelaria, cat. y ast. candelera, vengan de un festa *candelaro (FESTA CANDELARUMfiesta de las candelas’) cambiado en -ara (por influjo del femenino FESTA), de donde luego -aria o -era. Santa Maria Candelor en Fuero de Navarra, p. 124b. ‘Candelera’, de oc. ant. candelor, y éste del lat. vg. festum candelorum, barbarismo por f. candelarum ‘fiesta de las candelas’. Candeleja ‘arandela de candelabro’; candelejón ‘cándido’, por floreo verbal. Candelera. Candelero [Berceo, Sacr. 8; h. 1300: Gr. Conq. de Ultr.]; candelerazo. Candelería. Candaliza [1539: Guevara; candeliza, Aut.] ‘cada uno de los cabos que pasan por unos motones de la verga de mesana y sirven para hacer firmes los chicotes en la relinga de la vela’, también se ha dicho candeleta [1538, Gili]: por comparación con la posición vertical de la candela, comp. estar en candela ‘estar (un mástil, etc.) en posición vertical’, término náutico [1732]. Candelilla. Candelina ‘planta de unos 80 cms. que crece junto a los setos: tallos ramosos, hojas alternas y flor pequeña y blanquecina’ ast. (V). Candelizo ‘carámbano’. Encandilar ‘deslumbrar’ [encandelado, h. 1490, Celestina, Cl. C. II, 19.18; encandelar pájaros en Ovalle; encandilar ya en Fr. L. de León, según Aut.], de candela ‘lumbre’ con influjo ulterior de candil, comp. alent. encandiar (presente encandeia: RL IV, 63), chil. encandilar el fuego ‘hacer que haga llama’ (G. Maturana, Cuentos Trad. en Chile, AUCh. XCII, iii, 23)1.

1 Cej., basándose en el pasaje de la Celestina («no puedes ver de encandilado, como perdiz con la calderuela») y el de Ovalle, supone se explique por una candela que se llevaba al cazar tapada con una calderuela, pero en realidad no consta de qué clase de luz se trataba. No habrá relación directa con candil, pues la ac. ‘lámpara grande’ en esta palabra sólo es antigua en árabe (en Méjico puede ser secundaria). El and. candilazo ‘gran claridad del firmamento al anochecer’ (Toro, RH XLIX, s. v.) es también derivado de candela ‘fuego’ con influjo de candil; en Chile, Colombia y Ecuador se emplea encandelillar ‘encandilar’ (Lemos, Semántica, s. v.), derivado de candelilla; en cuanto a candelilla ‘luciérnaga’ en el Ecuador, ‘fuego fatuo’ en Chile y la Argentina (Lemos, Barb. Fon., s. v.), es probable que sea también diminutivo de candela en esta ac.