CAMAL, ‘cabestro o cabezón con que se ata la bestia’, probablemente derivado del lat. CAMUScabezada para atar los animales’, ‘bozal’, procedente del dórico κĘμος (gr. ático κƓμóς) íd.

1.ª doc.: Covarr.

También Ariège camal ‘cadena para atar las vacas al pesebre’, bearn. camau ‘collar del buey’, que no es probable que vengan del céltico *CAMBOScurvo’ (V. CAMA II), según quiere el FEW II, 126a, 127a. Para las acs. ‘palo grueso’, ‘rama gruesa’, V. GAMBA. La antigua ‘almófar de malla’ (inv. arag. de 1374, BRAE VI, 738.261; S. XV: DHist., 3) es palabra diferente de ambas, tomada del cat. capmall, compuesto de cap ‘cabeza’ y malla, de formación poco clara (Gamillscheg, EWFS s. v. camail); quizá se trate de una formación ya latina CAPUT MACULAE literalmente ‘cabeza de malla’.

DERIV.

Camaleja.

1 «Unos camales de siellas de cuero vermello» en Inv. arag. de 1930 (BRAE II, 555.12): no tiene que ver con la ac. ‘cabestro’, sino con el cat. camal ‘especie de calzón’, deriv. de cama ‘pierna’.